Hungría se impone a Austria en el ‘clásico europeo’
Hungría ha vencido a Austria en el ‘clásico europeo’ (2-0), un encuentro que ha vivido en Burdeos su edición número 137 y en el que, además, el cancerbero magiar, Gabor Király, ha batido el récord de edad de la historia de la Eurocopa al jugar con 40 y 75 días de edad.
Los tantos de Adam Szalai (minuto 62), delantero del Hannover 96 de Alemania, y el de Zoltan Stieber (minuto 87), han volteado el duelo a favor de Hungría, que hasta el tanto de Szalai estaba siendo superada por Austria.
Porque, en el combate, lento y con pocas acciones vistosas, han sido los austríacos los que más han propuesto. Sin embargo, en cuatro minutos, Hungría ha tomado por completo las sensaciones del partido. Porque si en el minuto 62 se ha puesto con 1-0 a favor, en el 66 ha sido expulsado Aleksandar Dragovic por una plancha a un rival que le ha valido la segunda amarilla.
Ha sido un partido con aroma a tradición. El ‘clásico europeo’. El enfrentamiento que más veces se ha visto en el Viejo Continente y el segundo más visto en el mundo tras el de La Plata, que mide a Argentina con Uruguay.
El duelo ha tenido también un aliciente especial: ver en acción a Gabor Király. El meta es el «abuelo» del torneo, después de haber batido el récord de edad de la Eurocopa, que estaba en poder del alemán Lothar Matthaeus (39 años y 91 días). Kiraly ha jugado en Burdeos con 40 años y 75 días.
Ha sido la selección austríaca la que ha comenzado mandando en el encuentro. De hecho, ha tardado un minuto en asustar a los húngaros. Lo ha hecho David Alaba, jugador del Bayern Múnich, con una de sus especialidades. Ha enganchado con la zurda desde fuera del área un disparo envenenado que ha botado delante de Király antes de estrellarse en el palo izquierdo del cancerbero.
La ocasión ha sido una premonición de lo que se iba a ver en el primer acto, en el que ha sido el combinado dirigido por el suizo Marcel Koller, el que se ha apropiado del balón. El partido, de ritmo lento por parte de los dos conjuntos, parecía decantarse del lado austríaco. De hecho a la oportunidad de Alaba, que en su selección juega como mediocentro de contención, le ha seguido otra de Zlatko Junozovic y una más de Martin Harnik, al filo del descanso.
De Hungría, poco se sabía en el primer período y tampoco en el inicio de la segunda mitad, a pesar de que Balazs Dzsudzsák ha gozado de una buena ocasión. Pero todo ha cambiado a partir del, para los austríacos, fatídico minuto 62. Al gol de Szalai le ha sucedido la expulsión de Dragovic y ya todo ha sido más fácil para Hungría, que se ha permitido sentenciar con el tanto de Stieber casi al final.
El triunfo es el 67 de Hungría de un total de 137 choques, en los que Austria ha vencido en 40 ocasiones y en 30 se ha registrado un empate.