Lakua se garantiza la abstención del PP a cambio de modificar el 0,26% de sus Presupuestos
El Gobierno autonómico y el PP han firmado este lunes un acuerdo por el que estos últimos se comprometen a abstenerse en la votación de los Presupuestos, lo que garantiza su aprobación, a cambio de modificaciones valoradas en 29 millones de euros (0,26%) y de algunos compromisos en materia fiscal.
El Gobierno autonómico y el PP han firmado este lunes un acuerdo por el que estos últimos se comprometen a abstenerse en la votación de los Presupuestos, lo que garantiza su aprobación, a cambio de modificaciones valoradas en 29 millones de euros (0,26%) y de algunos compromisos en materia fiscal.
El acuerdo ha sido firmado en el Parlamento de Gasteiz por el consejero de Hacienda y Economía, Pedro Azpiazu, y el portavoz de economía del PP, Antón Damborenea, que han subrayado que se trata de una «buena noticia» y de un pacto «positivo».
El pacto consiste en un documento de bases que, con posterioridad, deberá concretarse en un acuerdo sobre las enmiendas específicas que el PP pretende introducir en el Proyecto de Presupuestos para este año.
Estas enmiendas están valoradas en 29 millones de euros, un 0,26% de la cuantía de las Cuentas, y el acuerdo sobre las mismas se podría cerrar en un plazo de tres o cuatro días.
A través del documento suscrito este lunes, el PP se compromete a abstenerse en la votación de los Presupuestos, lo que garantiza su aprobación al Gobierno de coalición que conforman el PNV y el PSE.
Azpiazu no ha querido «especular» sobre la posibilidad de que este acuerdo pueda ser la antesala de otros similares para los presupuestos venideros de esta legislatura.
Damborenea ha incidido en que se trata de una abstención, y no de un respaldo, porque no están de acuerdo con «muchas de las partidas». No obstante, se ha felicitado por que el Ejecutivo haya apostado por unos presupuestos «realistas» que favorezcan el crecimiento de la economía y del empleo.
El representante del PP asegura que este acuerdo frena los «cantos de sirena» procedentes de la «extrema izquierda» para aumentar la presión fiscal, el gasto corriente y la deuda.