La situación del Alavés se agrava tras la derrota en Riazor
Un tanto de Luisinho (1-0) en el tiempo añadido del primer periodo dio oxígeno a su equipo, el Deportivo, y crédito a su entrenador, Pepe Mel, y ha agravado la situación del Alavés, que sigue sin ver puerta y sin estrenar su casillero de puntos esta temporada. [Ficha técnica y estadísticas]
En un partido espeso, los deportivistas, que de nuevo han echado mano de la inspiración individual de sus jugadores, han dejado por primera vez la portería a cero y han sumado también su primera victoria y, con ella, han abandonado las posiciones de descenso.
En su debut en el banquillo del Alavés, en principio como entrenador interino, Javier Cabello ha retocado el once, ha prescindido de Alfonso Pedraza, Alexis, Wakaso y Tomás Pina (además de Bojan por lesión) y ha dispuesto un 4-4-2 con Medrán y Munir como jugadores más adelantados en el césped de Riazor, donde se ha estrenado en Liga el chileno Giillermo Maripán.
A pesar de las modificaciones de unos y otros, el encuentro ha sido plano y soporífero. Pronto han quedado patentes los problemas del Deportivo para mover el esférico por su falta de ideas y la presión rival.
El argentino Fede Cartabia, algo individualista, ha sido el que más entró en juego hasta el ecuador del primer periodo y de una acción suya, tras 20 minutos insulsos, ha llegado la primera ocasión del partido, que ha culminado su tocayo Valverde con un derechazo que se ha marchado por encima de la portería de Pacheco.
El Deportivo se ha atascado aún más y el Alavés ha empezado a explotar la idea con la que había llegado a Riazor, el contraataque.
En los minutos previos al descanso, el conjunto vasco ha puesto nervioso al público local con un disparo lejano de Munir, con la zurda, que se ha envenenado y ha obligado a intervenir a Pantilimon, y, en el córner posterior, un cabezazo de Rodrigo Ely que ha rechazado el poste.
De esos momentos de dudas, el Deportivo se ha repuesto en la prolongación del primer periodo. Andone ha esperado en línea de fondo la llegada de Luisinho y el portugués ha rematado con la zurda ajustado al palo, inalcanzable para Pacheco. Un jarro de agua fría para los gasteiztarras y excesivo premio para los coruñeses en su primer disparo a portería.
Al Alavés no le ha quedado otra que asumir la iniciativa en el segundo tiempo y con un duro lanzamiento de Burgui a los 55 minutos ha logrado poner en apuros a Pantilimon, al que se le ha escapado el balón. En el rechazo, Munir ha sido incapaz de rematar a puerta.
Los locales han buscado el gol de la tranquilidad. Lo ha querido firmar Valverde con otro potente lanzamiento a media distancia que ha salido desviado y también Andone, con un disparo con la derecha que ha despejado Pacheco.
Los deportivistas no han logrado esa diana que les permitiera tener un final de partido tranquilo, pero el Alavés, que ha perdido por lesión a Munir, tampoco ha sido capaz de complicarles la vida.