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Interview
Amalur MENDIZABAL
Exsenadora de Amaiur

«Nadie del Departamento me preguntó ni ‘¿cómo estás?’»

Mendizabal nunca ha dado una gravedad especial a su caso, teniendo en cuenta que otras agresiones policiales han tenido consecuencias irreparables como la muerte de Iñigo Cabacas. Y tras conocer la sentencia, mantiene esa línea. Sí le llama la atención que ni cuando sufrió el porrazo ni después nadie del Departamento de Interior, ni siquiera en privado, le haya mostrado algún interés por su situación.

Amalur Mendizabal. (Gorka RUBIO | FOKU)

¿Satisfecha por la sentencia? Queda probado todo su testimonio, aunque indudablemente sea gracias al vídeo...

Lo he dicho siempre y lo tuve claro desde el primer momento; la suerte fue que hubiera una persona grabando la carga, ¡han pasado tantas cosas en este país que no se han aclarado! Y ya hemos visto la posición que ha tenido el ertzaina en este proceso, contando una historia que no tenía nada que ver con la realidad. Yo no pude escucharlo en el juicio porque entraba posteriormente a declarar, pero mi familia sí lo hizo, y mi marido por ejemplo salió de la sala, indignado. Han dicho entre otras cosas que me quería saltar el cordón policial, ¡para nada!

Explicó en su día que recibió el porrazo por sorpresa, sin esperarlo. ¿A qué lo atribuye?

No lo esperaba en absoluto. De hecho, no me pude proteger, no hice nada, me pegó de lleno. Sí hubo un momento en que se me pasó por la cabeza «¿es que me va a golpear?», pero pensé que no lo haría. No me lo podía creer, la verdad.

¿Iba a por usted directamente el golpe o le cayó de forma aleatoria?

Fue a por mí, sí, lo tengo claro. Me estaba venga mirar y luego vino directo. Y luego, el golpe fue de lleno, en toda la cabeza. Recuerdo que noté que el impacto del porrazo se me metía por el cuello y fue como si atravesara todo el cuerpo, no sé cómo explicarlo...

En los días posteriores hubo denuncia pública de usted y sus compañeros, y de hecho existía la fotografía que evidenciaba la herida producida, pero no se produjeron reacciones entre la clase política. ¿Sí las hubo en privado? ¿Le llamó alguien de otros partidos, o del Departamento de Seguridad?

Nada. Nada de nada. Con el paso de los años sí he ido pensando que quizás yo podía haber ido más lejos. Aunque entonces ya pedí el número de placa y no hubo forma... El mando me decía «ya llamamos a la ambulancia» y yo le insistía en el número de placa, no en la ambulancia. Después, políticamente no ha habido ni una llamada, nada. Al margen de mis compañeros y compañeras nadie me ha preguntado siquiera «¿cómo estás?». Hubo una comparecencia de la consejera en el Parlamento, y yo ya entiendo que Estefanía Beltrán de Heredia no lo va a hacer públicamente, pero siempre tenía la opción de acercarse de otra forma más discreta e interesarse, pero no ha sido así. Sí me extraña esta reacción entre gente que al fin y al cabo estábamos trabajando en los mismos sitios.

Durante la instrucción de este caso, y visto que es casi paralelo en el tiempo al de Iñigo Cabacas [fallecido en abril de 2012], ¿ha llegado a pensar que se iba a imponer también la obstrucción que vemos en ese crimen de Bilbo y que su caso iba a quedar impune?

Conociendo todos los antecedentes de este país, eso siempre se te pasa por la cabeza. Incluso en un primer momento percibes el riesgo de que acaben acusándote a ti. Pero lo cierto es que con el vídeo las cosas ya quedaban muy claras y la labor de mi abogado, Iñigo Iruin, me transmitía confianza.

¿Piensa tomar ahora alguna iniciativa, dirigirse al Departamento de Seguridad por ejemplo, o prefiere dejar las cosas tal y como están en la sentencia?

No lo he pensado, pero no creo que haga nada especial. Por un lado, porque mi caso no es nada comparado con otros como el de Iñigo Cabacas. Y por otro, porque en ese asunto precisamente estamos viendo lo que son capaces de hacer: han actuado contra la familia, contra la abogada, contra periodistas de GARA... Si ante ese drama han llegado a hacer todo esto, ¿qué les voy a pedir yo, acaso puedo esperar algo de gente que actúa así? Eso sí, si me preguntan por mi tema tampoco me voy a callar, eso lo tengo claro.