Con la única mentalidad de ganar
El empate a dos de Anoeta obliga a pensar que la victoria es el único resultado válido para pasar a octavos con temperaturas bajo cero.
La Real saldrá esta noche al Salzburg Stadion con la única idea de ganar para pasar a octavos de la Europa League, aunque repetir el empate a dos de la ida le permitiría ir a la prórroga y una igualada a más goles le clasifica.
No será fácil porque el Salzburg no ha perdido ninguno de los 23 partidos oficiales jugados esta temporada en su casa y antes de ir a Anoeta no había encajado gol en sus cinco partidos anteriores de Europa League y ha acabado con su portería a cero cinco de sus seis duelos europeos como local de esta temporada, con cuatro victorias y dos empates. Solo ha encajado en su campo un gol ante el Rijeka, que le eliminó por el valor doble de los tantos como visitante en la previa de la Champions League.
Por eso, a pesar de los dos goles que la Real logró en la ida, es conveniente pensar que no será fácil marcar y que las opciones del equipo blanquiazul pasan por lo que ha hecho en sus últimos dos partidos ligueros de Anoeta, en los que consiguió mantener la portería a cero sin conceder ocasiones al rival con una buena dosis de paciencia.
Un gol puede bastar si no se recibe ninguno y por ello cabe esperar que Eusebio repita la defensa del domingo y la duda estriba en saber si se va a decantar por un centro del campo más físico con Illarra, Zubeldia o Zurutuza ante un rival que destaca en esa faceta o preferirá colocar a Canales en el lugar de Xabi Prieto después de su buen partido contra el Levante. Además, Juanmi, Agirretxe, Bautista, Januzaj y el cántabro optan a acompañar a Mikel Oyarzabal.
Bajas de los centrales locales
El Salzburg afrontará el partido con bajas importantes en el centro de la defensa. Ya perdió a Paulo Miranda en el mercado de enero, su compañero hasta entonces Caleta Car es baja por sanción y se da por segura la de Pongracic por enfermedad, lo que obligaría a Marco Rose a colocar a Ramalho junto al joven francés de 20 años Jérôme Onguéné, que aún no ha jugado ningún minuto en toda su trayectoria profesional en Europa. También el lateral derecho Lainer estuvo enfermo el fin de semana, pero se da por segura su alineación. Más dudosa es la participación de Berisha, un jugador básico que ha tenido problemas en la cadera y que por ese motivo causó baja en la ida.
Se espera que Rose alinee un once parecido al de Anoeta, con un centro del campo muy físico que impidió a la Real sacar jugado el balón como le gusta y dos delanteros como Hwang y Dabbur a los que dio descanso el fin de semana en Liga. La clave estará en marcar primero, superar la presión, para lo que la Real recurrió en la segunda parte de Anoeta a un juego más directo, y en evitar las contras tras pérdida.
2.000 realistas en Austria
Se espera a 2.000 seguidores blanquiazules en las gradas del Salzburg Stadion para ayudar a superar la primera eliminatoria de una fase final europea que disputa su equipo desde la perdida ante el Olympique de Lyon en la Champions en 2004.
Algunos acompañaron a la Real en un vuelo charter en el que destacó la presencia de jugadores legendarios como Luis Arkonada y Roberto López Ufarte y expresidentes como Iñaki Alkiza, José Luis Astiazaran y Miguel Fuentes invitados por el club. El frío recibió en Austria al equipo y está garantizado que el partido se jugará con temperaturas bajo cero. La mínima prevista para hoy es de -6 grados y la máxima de -1. La Real no pudo entrenarse ayer en el escenario del partido como es norma para los visitantes por su mal estado y es otro factor que no ayudará.
Eusebio: «Es una gran oportunidad»
Eusebio dijo en la rueda de prensa previa al encuentro en Salzburgo que «nuestro objetivo es hacer un muy buen partido, ser superiores y conseguir la victoria. Nos hace mucha ilusión estar en la siguiente fase. Es una oportunidad muy grande para el club. Hemos demostrado que tenemos un gran potencial, queremos un mejor rendimiento. El Salzburg tiene dinamismo e intensidad, pero estamos convencidos de que con un rendimiento superior tendremos mejores opciones».
No dio importancia a las bajas y sobre el apoyo de 2.000 seguidores añadió que «es una inyección de energía el respaldo de nuestra afición, la fidelidad a la filosofía de este club. Queremos dar todo lo que tenemos para que se sientan orgullosos». Sobre el frío, dijo que «no nos preocupa el tiempo, estamos en iguales condiciones».
Marco Rose, técnico del Salzburg, señaló que «queremos tener una alta intensidad y pasar de ronda. Si no lo logramos estaremos muy decepcionados». GARA