Salud defiende el programa Skolae y la necesidad de implantar la educación afectivo-sexual
La directora gerente del Instituto de Salud Pública y Laboral de Navarra, Mª José Pérez, ha defendido el programa Skolae ante la «necesidad» de «implantar la educación afectivo-sexual en los centros educativos navarros» y ha destacado que «existe una evidencia científica clarísima sobre los resultados positivos de los programas estructurados de educación en sexualidad».
En una comisión parlamentaria, a petición de Geroa Bai, EH Bildu, Podemos-Orain Bai e I-E, para explicar el trabajo desarrollado en la elaboración del programa Skolae, Pérez ha subrayado que «en la actualidad existe un consenso científico generalizado sobre la necesidad y la eficacia de la educación afectivo-sexual en la escuela, y desde edades tempranas». Y ha asegurado que «ha demostrado beneficios para la salud y bienestar y también para la prevención de infecciones de transmisión sexual, embarazos no deseados y violencia sexual».
Pérez, que ha estado acompañada por el director general de Salud, Luis Gabilondo, y la jefa de la Sección de Promoción de la Salud, Margarita Echauri, ha asegurado, además, que las recomendaciones realizadas desde el ISPLN a Educación para la elaboración del programa Skolae se han basado en el informe ‘Orientaciones técnicas internacionales sobre educación en sexualidad, un enfoque basado en la evidencia’, elaborado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), UNESCO y UNICEF.
Un informe, ha agregado, que pide a los gobiernos «un mayor compromiso para desarrollar programas de educación sexual integral en los centros educativos para la infancia y juventud, con currículos estructurados basados en los estudios científicos».
En este mismo sentido, Luis Gabilondo ha puesto de manifiesto la «relevancia que los expertos sanitarios conceden en la actualidad a la salud sexual» y ha defendido «la necesidad de normalizar la atención que se presta a la salud sexual tanto en el sistema sanitario como en la escuela». «Necesitamos normalizar la atención que se presta a la salud sexual como cualquier otro ámbito de la salud humana», ha argumentado.
Para lograrlo, ha insistido en la necesidad de que «reconozcamos que hablar de la sexualidad continúa siendo un tabú social que genera importantes dificultades para la comunicación normalizada, entre padres e hijos, entre educadores y alumnos e incluso entre profesionales sanitarios y pacientes».
En su opinión, «la existencia de este tabú social pone de manifiesto la importancia de normalizar la educación afectivo-sexual también en los centros educativos». Y ha asegurado que «la mejor forma de normalizar la atención a la salud sexual es seguir las orientaciones técnicas internacionales recomendadas por la OMS o Unicef, basadas en evidencias». «No es de recibo que los jóvenes tengan más fácil el acceso a la pornografía que a una formación estructurada y basada en la evidencia», ha apuntado.
Asimismo, el director general de Salud ha apelado a la «corresponsabilidad y participación de todos los actores» y ha remarcado que «la polémica no ayuda porque puede hacer que perdamos otra oportunidad inmejorable de mejorar la salud sexual de la población».
Por su parte, la jefa de la Sección de Promoción de la Salud, Margarita Echauri, ha puesto de relieve que el ISPLN cuenta con profesionales de «acreditada solvencia e incuestionable liderazgo» en materia de Educación para la Salud y con formación en sexología que «basan sus recomendaciones en evidencias y consensos internacionales».
Y ha destacado que, en su trabajo relacionado con el programa Skolae, el ISPLN ha aplicado «la misma metodología y con el mismo rigor que viene utilizando en los trabajos para la promoción de la salud en todos los estilos de vida saludable».