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El ultraderechista Bolsonaro jura como nuevo presidente de Brasil

El líder de la ultraderecha brasileña, Jair Messias Bolsonaro, ha jurado ante el Congreso como nuevo presidente constitucional de la República Federativa de Brasil para los próximos cuatro años.

Bolsonaro saluda a sus seguidores en el trayecto hacia su toma de posesión. (CARL DE SOUZA / AFP)

«Prometo mantener, defender y cumplir la Constitución brasileña» y «observar las leyes, por el bien del pueblo brasileño», ha recitado el ahora gobernante, quien ha sido seguido por el nuevo vicepresidente Hamilton Mourao, general de la reserva del Ejército, en un juramento similar con la mano sobre la Carta Magna.

A la ceremonia, que se celebra en el hemiciclo del Senado, asisten los presidentes de Bolivia, Evo Morales; Chile, Sebastián Piñera; Honduras, Juan Orlando Hernández; Paraguay, Mario Abdo Benítez; Perú, Martín Vizcarra; y Uruguay, Tabaré Vázquez.

Asimismo, están presentes los primeros ministros de Israel, Benjamín Netanyahu; Hungría, Viktor Orbán; y Marruecos, Saadedine Othmani, así como los presidentes de Portugal, Marcelo Rebelo de Souza, y Cabo Verde, Jorge Carlos Fonseca, entre otras autoridades.

Tras prestar juramento como nuevo presidente de Brasil, Bolsonaro ha pronunciado un primer discurso ante el pleno del Parlamento, y luego se ha dirigido al vecino Palacio de Planalto, sede del Gobierno, donde ha recibido la banda presidencial de manos del gobernante saliente, Michel Temer.

El también capitán de la reserva del Ejército brasileño ha pronunciado entonces un segundo discurso ante las miles de personas que se han congregado frente al palacio presidencial, donde ha recibido el saludo de las autoridades extranjeras y ha encabezado la ceremonia en la que han asumido sus cargos los 22 miembros de su Gabinete.

«Nuestros valores y Dios»

«Vamos a unir al pueblo, darle valor a la familia, respetar las religiones y las tradiciones judeo-cristianas, combatir la ideología de género, conservando nuestros valores», ha afirmado el nuevo presidente de Brasil, de 63 años, en su discurso de investidura.

«Brasil volverá a ser un país libre de las amarras ideológicas», ha sostenido Bolsonaro, quien también ha abundado en las alusiones a «Dios», al que ha citado una decena de veces en sus pronunciamientos, y ha sentenciado que el país empieza a «liberarse del socialismo» y de la «inversión de valores».

El nuevo presidente ha hecho gala de su anticomunismo, sobre todo en el discurso que ha hecho ante los miles de seguidores que se han vocado a las calles de Brasilia para aclamarle, y a los que ha enseñado la bandera verde y amarilla del país.

«Esta es nuestra bandera, que jamás será roja. Solo será roja, si es necesario, con nuestra sangre, para mantenerla verde y amarilla», ha prometido.