Los chalecos amarillos siguen movilizados en Euskal Herria
Más de 800 personas han participado esta tarde en la movilización convocada por los chalecos amarillos en Donibane Lohizune. En Baiona, con respaldo expreso de la CGT, otro cortejo reunía a unas 350 personas. Así las cosas, el lanzamiento del «debate nacional» impulsado por el Elíseo para salir de la crisis social y política abierta en el país no ha desmovilizado a los chalecos amarillos. A la espera de conocer el balance de los chalecos amarillos, que este sábado, por primera vez han establecido servicio de seguridad en sus marchas, el Ministerio de Interior ha cifrado en 27.000 los manifestantes, a media tarde, en las numerosas protestas convocadas en el Hexágono.
La protesta convocada en Donibane Lohizune ha partido, pasadas las 14.00 de la plaza Louis XIV. El cortejo, encabezado exclusivamente por mujeres, demandaba desde la pancarta principal la implantación del Referéndum de Iniciativa Ciudadana (RIC).
Desde los primeros compases de la marcha, a la entrada de la calle Ganbetta, han arreciado los eslóganes en demanda de la dimisión de Emmanuel Macron. Varios chalecos portaban una pancarta en la que se reclamaba expresamente el «derecho a vivir del trabajo».
La iniciativa de «debate nacional», puesta en marcha oficialmente esta semana por el presidente de la República, no ha hecho desistir a los chalecos amarillos. En la marcha que ha discurrido por el centro de Donibane Lohizune varios manifestantes portaban, de hecho, carteles en los que se aludía como un nuevo engaño a esa iniciativa.
Los manifestantes de Donibane Lohizune habían recibido una comunicación con un recorrido preciso de la parte del Ayuntamiento, aunque, llegados al parque de Ducontenia han decidido seguir por la carretera general, para desviarse después hacia la estación de tren. Ello ha provocado algún que otro problema a los conductores que se han visto sorprendidos por el paso de una marcha que ha transcurrido de forma tranquila y festiva.
Por vez primera, los chalecos han encuadrado las marchas de este décimo sábado de movilizaciones con servicio de seguridad propio y anuncian un balance propio sobre el número de participantes en las protestas al final de la jornada. Decisiones que parecen dar a entender una vocación de dar forma a este movimiento, siquiera en cuanto al desarrollo de las movilizaciones.
A diferencia de las imágenes de París, donde en la esplanada de los Inválidos se reproducían, finalizada la larga marcha de 15 km que han realizado los chalecos, algunas escenas de tensión y enfrentamiento, el cortejo de Donibane Lohizune se ha caracterizado por el ambiente distendido.
La marcha se ha detenido varias veces para entonar cantos, y así las notas de ‘Txoria txori’ se han hecho oir a unos metros de la estación, antes de que la marcha buscara el mar, e hiciera una nueva parada, ya en la parte central de la plaza lohizundarra, para entonar ‘Paquito chocolatero’. Una banda sonora ecléctica, para un movimiento poliédrico.
París ha movilizado a 100.000 policías y gendarmes, de ellos 5.000 en la capital, para esta décima jornada de movilizaciones de los chalecos amarillos.