La montaña rusa de Albisu
El de Ataun hace un balance personal positivo de un Parejas en el que le ha faltado algo más de suerte.
La montaña rusa de sensaciones que ha supuesto este Parejas para Jon Ander Albisu llega el sábado a su fin con un partido que clasificatoriamente no va más allá, pero en el que el de Ataun quiere llegar a 22 para que el balance general de un campeonato que no puede ser plenamente satisfactorio deje un gusto final algo más agradable.
«Al fin y al cabo, creo que he hecho un campeonato completo, he tenido algún que otro partido bastante malo, pero estoy bastante satisfecho con el nivel que he ofrecido. En la liguilla de semifinales también creo que he hecho dos buenos partidos, pero nos faltó algo de suerte para llegar a 22 y a ver si podemos hacerlo en esta última jornada», apuntó el zaguero de Baiko en la elección de ayer en el Labrit iruindarra.
El goierritarra y Víctor siguen lamiéndose las heridas del partido del pasado sábado, en el que se dejaron todas sus opciones de seguir con vida tras haber tenido contra las cuerdas a Altuna III-Martija. «No sé si es suerte o qué, pero es verdad que se nos fueron dos pelotas a la chapa y un par de ellas a la contracancha... al final regalamos más que ellos y por eso perdimos. En el primer partido también nos pasó algo parecido, creo que estamos jugando bien pero nos falta algo para ganar partidos», apuntó el zaguero sin encontrar las palabras adecuadas para explicar eso de cuya falta han adolecido.
Al zaguero guipuzcoano le va tocando ya pasar página de un campeonato que quedó irremediablemente marcado por la lesión de Aimar Olaizola a principios de febrero, punto de inflexión en el que pasaron de ser unos de los más claros favoritos a la txapela a defenderse en una liguilla de semifinales en la que Albisu ha cuajado dos grandísimas actuaciones, pero en la que necesitaba algo más de ayuda para deshacerse de unos rivales muy fuertes.
Ahora su próximo reto podría ser un Manomanista en el que no está del todo clara su participación. «No me preocupa en exceso. Me preguntaron si quería jugar y yo le dije a la empresa que la decisión es suya, que si me ponían bien y que si no, no pasaba nada».
Sin preferencias
En el otro lado de la balanza están Irribarria y Zabaleta, pelotaris que buscan la victoria para mantener esas sensaciones experimentadas en semifinales, que los han llevado a ser los grandes favoritos a la txapela.
«Llevamos escuchando todo el campeonato que somos favoritos pero ya hemos dicho que eso no da ningún punto, que hay que demostrarlo en la cancha y, si estamos en la final, es por méritos nuestros. Llevo un tiempo sin jugar una final y a ver si podemos disfrutar», apuntó el delantero de Arama.
El domingo se enfrentan en Donostia Altuna III-Martija y Elezkano-Rezusta, de donde saldrán sus rivales el día 7. «Es un partido muy igualado, los dos tienen opciones de ganar y seguro que será un partido bonito para el público y super igualado. No tengo preferencias, hemos ganado y hemos perdido contra la dos parejas y, toque la que toque, el día de la final vamos a ir a ganar», apuntó José Javier Zabaleta, que aspira a retener la txapela conseguida junto a Joseba Ezkurdia.
Aretxabaleta, tres meses baja
Andoni Aretxabaleta fue intervenido satisfactoriamente ayer en Gasteiz de una «luxación recidivante de la IFD del cuarto dedo de la mano izquierda», motivo por el que el zaguero de Markina-Xemein deberá permanecer un periodo aproximado de tres meses de baja. Se espera que el pelotari de Baiko reciba hoy el alta hospitalaria.
La LEP.M prefiere guardar silencio
A pesar de que habían anunciado un comunicado en el que iban a ofrecer su versión sobre las negociaciones que han mantenido con el colectivo de jueces, las empresas de la LEP.M no quisieron entrar en una guerra de cifras y prefirieron guardar silencio en torno a la polémica surgida en torno a su decisión de contar con un grupo propio de jueces.
Eso sí, fuentes empresariales consultadas por GARA, no escondieron su malestar por ciertas declaraciones publicadas los últimos días. Entre otras cosas, apuntan que sí estaban dispuestos a asumir una subida en el salario acorde al IPC, que estiman en torno al 4,5%, cantidad que habría sido rechazado por el colectivo de jueces.
Esas mismas fuentes reconocen que la subida anual del IPC está congelada desde 2012, pero apuntan que fue algo consensuado con los jueces y que coincide con una época de crisis en la que todos los estamentos se ajustaron sus sueldos.J.O.