Benzema doblega a un buen Eibar (2-1)
Un gol de Cardona ha premiado la magnífica primera parte del Eibar. El Real Madrid ha reaccionado tras el descanso y ha volteado el marcador con dos cabezazos de Benzema.
Un buen Eibar ha ejercido de tirita para la crisis madridista. Los azulgranas han firmado un primer tiempo magnífico, que se ha visto premiado con el gol de Marc Cardona. Pero tras el descanso la tarde se ha torcido por completo: Ramis se ha retirado lesionado, cinco minutos después Benzema ha restablecido el empate y a partir de ese momento el Real Madrid se ha venido encima para acabar volteando el marcador con otro tanto del delantero francés.
Los azulgranas han sucumbido ante la reacción local pero también ante el cúmulo de adversidades al que han tenido que hacer frente en forma de lesión. Ya llegaban al Santiago Bernabéu con muchas interrogantes y unas cuantas ausencias: sólo dos centrales disponibles, por las lesiones de Arbilla y Bigas; Diop, una pieza indiscutible en el centro del campo, también en la enfermería; Escalante con problemas en un tobillo... Y algunos jugadores con muchos minutos a cuestas en esta semana con triple compromiso. No hay más que ver el once que ha alineado José Luis Mendilibar, inédito y sorprendente. No tanto por el dibujo (Enrich como único delantero), sino por la presencia de Sergio Álvarez en el pivote tras su discreta actuación ante el Rayo –aunque ha abado siendo uno de los mejores– y, sobre todo, la de Pablo De Blasis, que desde su última titularidad ante el Leganés, hace dos meses y medio, sólo había disputado un minuto. Hoy ha vuelto al equipo y además para actuar en el lateral derecho, una posición nada habitual para el argentino, en detrimento de Rubén Peña.
La situación, ya comprometida, ha empeorado a lo largo de la tarde. Pedro León, anunciado inicialmente en el once, se ha caído en el último momento por problemas en el sóleo. Su lugar lo ha ocupado Cardona que, curiosamente, ha anotado el gol azulgrana. Escalante y Cote han sufrido, además, sendos percances en el tobillo en el primer tiempo. Aunque el problema que más dolores de cabeza ha producido a su técnico ha sido la lesión de Ramis, que se tenía que retirar a los diez minutos de la reanuación tras sentir un fuerte pinchazo en el muslo. Sin más centrales disponibles, Mendilibar ha dado entrada a Orellana y retrasado la posición de Sergio Álvarez.
Hasta entonces, y pese a todo, el partido había ido sobre ruedas, con un Eibar muy superior en el primer tiempo. Ante un anfitrión ausente, el equipo eibarrés no ha tenido problemas en defensa –dos llegadas peligrosas del Real Madrid, una incluso ha acabado en gol, pero ambas anuladas por fuera de juego– y, aunque no puede decirse que haya cercado la portería de Keylor Navas, sí ofrecía la sensación de estar mucho más cerca del gol que su rival. Y así ha sido. A cinco minutos del descanso, Escalante ha recibido un balón de Cucurella en el área, ha aguantado para el desmarque de Cardona y el jugador cedido por el Barcelona ha batido a Keylor con una buena resolución. El Bernabéu pitaba a los suyos mientras el Eibar se veía ya en los cielos.
No parecía que el partido cambiara a la vuelta de vestuarios. El segundo tiempo, de hecho, ha comenzado con una buena acción de Enrich. Pero acto seguido, Ramis se ha roto. Un minuto después, Benzema ha ganado su primer mano a mano con Sergio Álvarez, aunque el gol ha sido anulado por ajustadísimo fuera de juego del francés. Lamentablemente, sólo ha aplazado lo que acabaría pasando. A punto de cumplirse la hora, Benzema ha cabeceado un centro de Asensio para restablecer el empate. Al cansancio de los eibarreses se le ha sumado el miedo ante un rival que, por primera vez en el partido, ha empezado a sentirse cómodo. Más aún tras la entrada de Kroos. Precisamente un centro del alemán ha permitido a Benzema cabecear el 2-1.
Sólo faltaban diez minutos para el final pero la remontada local ha podido ser mucho más escandalosa. El Real Madrid ha acumulado ocasiones, incluso ha enviado un balón al palo, ante un Eibar que ya no se tenía en pie y ha acabado el partido boqueando.
Los azulgranas, que se quedan con 39 puntos, visitan Anoeta el próximo domingo.