El Eleonore fuerza el desembarco de cien migrantes e Italia abre la puerta al Mare Jonio
El barco Eleonore, con unos cien migrantes rescatados a bordo, ha entrado este lunes en aguas territoriales de Italia a pesar de la prohibición expresa del Gobierno, tras una fuerte tormenta. Luego se ha permitido también el desembarco de los 31 del Mare Jonio.
La Comisión Europea anunció la pasada semana que estaba buscando ya un método de reparto para los inmigrantes rescatados en el Eleonore, a demanda de Berlín, dado que el barco tiene bandera alemana. Sin embargo, la situación se ha precipitado esta mañana con una fuerte tormenta que les ha hecho forzar el desembarco. Los migrantes llevaban una semana a bordo.
El capitán, Claus Reisch, ha declarado el estado de emergencia. Una fuerte tormenta ha provocado inundaciones en cubierta, por lo que ha puesto proa hacia el puerto siliciano de Pozzallo.
Efectivos de la Guardia de Finanzas italiana han subido a bordo y han autorizado al capitán a navegar hacia un puerto para desembarcar a los migrantes, según la cuenta de Twitter @Seegezwitscher, que sigue las actividades del Eleonore. El barco quedará bloqueado para investigaciones.
Un portavoz de Mission Lifeline había explicado a la agencia de noticias DPA que el veto de entrada promulgado por el ministro de Interior en funciones de Italia, Matteo Salvini, no es aplicable en el caso de que pueda haber vidas en peligro.
El propio Salvini ha respondido al desafío del Eleonore a través de Twitter, desde donde ha subrayado que se deben «respetar» las leyes. «Si alguien piensa que puede engañar sin consecuencias, se equivoca de plano y se equivoca de ministro: hago y haré todo lo posible para defender Italia», ha dicho.
Mare Jonio
Horas después, la Guardia Costera de Italia ha autorizado que los 31 migrantes y refugiados que seguían a bordo de otro buque voluntario de salvamento, el Mare Jonio, desembarquen por «razones de salud», según la ONG Mediterranea Seving Humans, que había acusado al Gobierno italiano de mantener a estas personas como «rehenes».
El Mare Jonio rescató la semana pasada en el Mediterráneo a unas cien personas. Pese a que Salini prohibió expresamente la entrada del barco en aguas italianas, se autorizó el traslado a tierra de 64 de los migrantes --menores de edad, mujeres y personas enfermas--. Hoy se soluciona la situación del resto.
Más de 900 migrantes y refugiados han muerto en lo que va de año intentando alcanzar por mar los países del sur de Europa, según la Organización Internacional para las Migraciones (OIM). Pese a ello Italia mantiene una política de «puertos cerrados» a la ONG, a las que amenaza con multas que pueden alcanzar el millón de euros.