Fiesta en el debut de Kirolbet Baskonia, pese a la lesión de Granger (105-82)
Los gasteiztarras han destrozado a Estudiantes en la segunda mitad, a partir de la defensa sobre Brizuela y la explosión de Pierria Henry y Vildoza. Jayson Granger, en cambio, se ha lesionado en el tendón de Aquiles.
Ha empezado frío el debut de Kirolbet Baskonia en la Liga ACB, pero ha terminado con fiesta y liderato en la clasificación general, tras apabullar a Estudiantes en la segunda mitad, con un parcial de 58-36. No es que la afluencia de este estreno liguero haya sido muy buena, 7.625 espectadores según el conteo oficial, en cierta medida porque el horario tampoco ha acompañado. Y por si fuera poco, Jayson Granger ha llegado a su cita habitual con las lesiones a los dos minutos de empezar la Liga ACB, una lesión en el tobillo que ha retirado al uruguayo entre lágrimas al vestuario, sin que haya regresado después, al tratarse de una lesión en el tendón de Aquiles de su pierna izquierda. Los primeros informes del propio club gasteiztarra hablan de una lesión «grave», aunque sin especificar más.
Estudiantes, que en las últimas campañas ha salido a paliza por partido en sus visitas a Zurbano, se ha mostrado como un pollo peleón en toda regla. Primero, porque Víctor Arteaga no ha faltado a su cita de hacer buenos números ante el Baskonia; segundo porque Darío Brizuela ha vuelto a demostrar que es un jugador de dibujos animados, alternando su puesto natural de escolta con el de base, sobre todo cuando se ha dedicado a echar una mano al joven Giedraitis; tercero, porque el fondo de armario del Ramiro, con los Kadji, Pressey y Scrubb –y eso que no ha podido contar con Vicedo–, ha mostrado muy buenas maneras, al punto de aguantar al Baskonia al rebufo en tiempo de descanso, 47-46, al meterle 30 tantos en el segundo cuarto, llegando a ponerse hasta con seis puntos de renta de manera coyuntural.
Sobre el Baskonia, amén del infortunio de Granger, lo mejor ha sido mostrar el tremendo fondo de armario que tiene. Pierria Henry ha ofrecido buenos detalles, igual que un Youssoupha Fall menos dominante de lo que se esperaba, pero que debajo del aro las ha ido metiendo para abajo. Mientras, Shengelia e Ilimane Diop han dado a su equipo también cierta consistencia, el primero en ataque y en defensa el segundo, con Vildoza tomando el mando del partido camino del descanso. A falta de mayor coordinación y tensión defensiva, al menos los mimbres se han adivinado sólidos para evitarse así cualquier sorpresa, por mucho que Estudiantes se haya revelado como un incordio mayor de lo esperado.
El show de Pierria Henry
Ya que la primera jornada es dada a los sustos, tocaba ahuyentar esa opción. De ahí que la defensa baskonista haya dado un paso adelante en la retaguardia después del descanso. De ahí se puede explicar que el acierto de Darío Brizuela haya decaído sobremanera.
Por otro lado, Micheal Eric, después de un discreto arranque, ha empezado también a carburar, al tiempo que Vildoza se ha notado y sentido amo del partido y lo ha concretado con un par de aciertos en los triples para abrir la renta a un confortable 66-56. El problema ha estado en que tras el tiempo muerto de rigor del señor Dzikic, los del Ramiro apretaron y han hallado en Pressey y Kadji la manera de reaccionar. Con todo, después del 66-61, Pierria Henry ha dado un paso adelante para, con un par de acciones llenas de clase, elevar la renta gasteiztarra hasta los 12 puntos, 74-62, al final del tercer asalto.
A golpe de triple, 8 de los 11 del Baskonia han cañizo tras el descanso, se ha roto el partido. Un triple de Pollonara –que ha arrancado como quinto pívot y ha acabado ganándose buenos minutos–, más la exhibición de Pierria Henry ha servido para que los aficionados del Baskonia se hayan podido deleitar de un plácido final de partido. El base estadounidense ha dado muestras de una capacidad de desborde con el bote espectacular, y ha dado unas trazas de poder hacer una sociedad con Vildoza la mar de interesante. A mayor abundamiento, Pierria Henry se ha puesto las botas para un par de asistencias para Micheal Eric y Shields, elevando el marcador a un 92-73 que ha supuesto el jolgorio y la fiesta en las gradas.
Por otro lado, se ha podido ver a Tornike Shengelia experimentando en la posición de pívot durante unos cuantos minutos, en detrimento de un Ilimane Diop que casi ni ha jugado en la segunda mitad, y cuando ha regresado ya no quedaba partido. Con todo, Kirolbet Baskonia arranca la campaña liderando la clasificación.
Perasovic: «Ha sido un partido mucho más difícil de lo que parece»
Satisfecho por el triunfo pero serio tras la lesión de Granger. Así ha comparecido Velimir Perasovic ante la prensa después del partido. No ha dado mayores detalles sobre la lesión del base uruguayo –normal, porque el charrúa ha sido hospitalizado después de abandonar el parqué– pero ha confesado que «parece una lesión grave. No puedo añadir más detalles, pero parece que se trata de una lesión en el tendón de Aquiles».
Respecto al partido, ha subrayado que «ha sido un partido mucho más difícil de lo que parece», y ha dividido su relato con el parteaguas del descanso. «Al principio hemos empezado intercambiando canastas y con una defensa bastante floja; nos ha costado arrancar en esos dos primeros cuartos. A partir del tercer cuarto el equipo ha sido más sólido y hemos podido coger unas ventajas que al final hemos ampliado. Pero ha sido un partido mucho más difícil de lo que parece por la diferencia de puntos», ha insistido.
«Estudiantes nos ha creado problemas con la velocidad de sus pequeños y los tiros de tres de sus grandes. Pero cuando hemos contenido un poco su peligro en el juego de pick'n roll y en el juego de uno contra uno, hemos podido correr y anotar más. Nuestra defensa del segundo tiempo ha sido clave», ha destacado.
Evidentemente, se le ha preguntado por Pierria Henry, al ser el base estadounidense el encargado de romper el partido. No ha querido ser muy tajante Perasovic al tratarse de un jugador que acaba de debutar con el equipo gasteiztarra después de perderse casi toda la pretemporada, pero sí que ha reconocido que «ha jugado un buen partido. Ojalá juegue todos los días así, porque nos ha dado ese cambio de ritmo que necesitábamos. Hemos estado lentos, como pastosos, y él nos ha dado ese cambio de ritmo que nos ha dado canastas fáciles, puntos de otra manera y ahí hemos roto el partido».