Cuatro voces impulsan una izquierda vasca renovada y fuerte, en torno al espacio de EH Bildu
Gemma Zabaleta (que fue exconsejera del Gobierno de Lakua por el PSE), Javier Madrazo (exconsejero también y exlíder de IU-EB), Manuel Díaz de Rábago (expresidente de una sala del TSJPV) y Daniel Arranz (ex gobernador civil de Bizkaia) han unido sus voces por una izquierda para «una nueva Euskal Herria», que creen debe nuclearse en torno al espacio de EH Bildu como única opción.
‘La izquierda con la que construir una nueva Euskal Herria’ es el título de la carta pública firmada por cuatro personas de trayectorias diferentes y que coinciden ahora en apostar por una unidad de fuerzas con vocación de alternativa, sin ataduras y que mire al futuro («que el pasado no sea una losa para nuestro país»).
Consideran que tiene que estar «aglutinada en torno al único partido político que, en nuestra opinón, hoy manifiesta y está en condiciones» de hacerlo, «que el espacio de EH Bildu». Ello supone una noticia relevante si se tiene en cuenta quiénes son los firmantes y cuáles son sus recorridos previos. Gemma Zabaleta fue consejera en el Gobierno de Lakua de Patxi López, en representación del PSE; Javier Madrazo tuvo cartera en el de Juan José Ibarretxe, además de liderar IU-EB; Manuel Díaz de Rábago presidió la sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco; y Daniel Arranz fue gobernador civil de Bizkaia en la era de Felipe González.
En los últimos tiempos todos ellos han tomado partido claro en favor de la democracia en Euskal Herria o la soberanía, aunque remarcan en esta posición común que «no somos independentistas».
En la misiva que se publica íntegra en GARA, consideran que «en Euskadi vivimos una situación anómala desde el punto de vista democrático y es la ausencia de una vocación de alternativa a liderar una apuesta política desde la izquierda vasca capaz de poner a velocidad de crucero las respuestas que necesita la Euskadi del futuro».
Entre las características de la izquierda que impulsan, citan que tenga ambición de ser alternativa, «que no necesite recibir consignas de nadie», «que genere confianza» o «que practique el diálogo frente al insulto, la humildad frente a la prepotencia».
Tras exponer su convicción de que el espacio de EH Bildu es la base para aglutinarla, se dirigen al mismo en estos términos: «Le pedimos abrir las costuras de su proyecto político ya, más allá de la coyuntura electoral, con un compromiso firme de mirada larga; que signifique una apertura a cuantas personas o colectivos quieran iniciar la articulación de la izquierda vasca del futuro, plural, abertzale o vasquista, independentista, soberanista, federalista o confederalista, con un suelo común compartido en defensa del derecho a decidir, pero izquierda de pensamiento libre y agenda renovada con la que aspirar a gobernar Euskadi con mano izquierda».