La ONU pide medidas «inmediatas» para poder seguir rescatando en el Mediterráneo

El Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos ha expresado su «profunda preocupación» por los fallos en los rescates de migrantes y refugiados en el Mediterráneo y ha pedido el levantamiento «inmediato» de las restricciones que impiden el trabajo de las ONG, ya que «están poniendo vidas en peligro».

El portavoz de Naciones Unidas, Rupert Colville, ha expresado «especial preocupación» por las informaciones relativas a los supuestos movimientos de autoridades de Malta para frenar la llegada de pateras a sus aguas territoriales, así como por la ausencia de barcos de ONG en la zona central del Mediterráneo. Tanto Italia como Malta prohibieron el 9 de abril el desembarco de migrantes alegando razones sanitarias.

Las inmovilizaciones de los barcos Aita Mari y Alan Kurdi han impedido la actividad de los últimos dos barcos activos en un momento en el que «las cifras de quienes intentan hacer el peligroso viaje de Libia a Europa ha aumentado drásticamente». Durante el primer trimestre de 2020, han salido de Libia cuatro veces más pateras que en el mismo periodo de 2019.

Colville ha advertido de que, «de ser cierto» que centros de coordinación de rescate marítimo ignoraron los mensajes de alerta lanzados desde pateras, los países estarían incumpliendo los compromisos suscritos en materia de Derechos Humanos.

La oficina que dirige Michelle Bachelet ha recordado que quienes emprenden este viaje están protegidos por el Derecho Internacional, que garantiza por ejemplo el principio de no devolución y que no sean expulsados a contextos «peligrosos», como podría ser el caso libio. El 15 de abril, una embarcación con 51 migrantes fue devuelta al país norteafricano por un barco maltés, después de un periplo marítimo que se saldó con al menos cinco fallecidos y siete desaparecidos.

La ONU tiene constancia de al menos tres embarcaciones con migrantes que esperan poder tocar tierra y, aunque ha aplaudido los desembarcos puntuales de personas en riesgo, ha pedido una solución «urgente» para todas ellas, en la medida en que «las condiciones de los buques mercantes no son adecuadas para una estancia a largo plazo».

«Moratoria de todas las deportaciones y devoluciones a Libia»

Devuelta a Libia, se vuelven a enfrentar a las «horribles condiciones» de las que huyeron y que incluyen «tortura y malos tratos, violencia sexual, falta de atención médica y otros abusos de Derechos Humanos».

«Estas superpobladas instalaciones también tienen un elevado riesgo, por supuesto, de verse afectadas por el Covid-19», ha advertido Colville.

En las actuales circunstancias, ha exigido «una moratoria de todas las deportaciones y las devoluciones a Libia», recordando que también durante la pandemia deben respetarse las obligaciones internacionales hacia los migrantes y refugiados. Esto pasa, entre otras cosas, por un «rápido desembarco» en un «puerto seguro».

Un carguero privado, con bandera de Antigua & Barbuda, tiene a bordo desde el 3 de mayo 79 migrantes que recogió del mar tras recibir un aviso de la coordinación de rescate de Malta, que ahora no se hace cargo y tampoco Italia ha respondido a la petición de desembarcar.

Estas personas fueron rescatadas por el buque mercante Marina que se dirigía a Malta después de recibir el pasado domingo una solicitud del servicio de coordinación de rescate maltés.

Según los medios malteses, el capitán ha explicado que se le ha denegado la entrada a Malta e Italia y ha denunciado que la situación en el barco es muy complicada ante la falta de agua y comida, así como por algunas peleas que se han registrado entre los migrantes, que duermen hacinados en cubierta desde hace 5 días.

El barco se encuentra ahora en aguas territoriales de Italia a pocas millas de la isla de Lampedusa.

La ONG italiana Mediterránea Saving Human ha pedido a Italia que «acepte de inmediato a los 79 rescatados por el mercante Marina.

«Pedimos que el Gobierno italiano se ocupe primero de salvaguardar la vida humana y luego de los litigios político-diplomáticos con Malta», añade.

Mientras tanto, cerca un centenar de migrantes se encuentran aún en el ferry de pasajeros Rubattino, elegido para que pasaran las cuarentena tras su rescate hace un mes, pero del que por el momento sólo han bajado a tierra firme los menores.

Italia está poniendo a disposición otro barco, aún no se conoce de cual se tratará, también para alojar los migrantes que siguen llegando en estos días a sus costas para que guarden en periodo de cuarentena obligado por el Covid-19.

En el caso de Malta, desde hace más de una semana, 70 migrantes se encuentran en espera en un barco de uso turístico de la compañía Capitan Morgan y este jueves otros 130 rescatados de sus aguas fueron trasladados a otra de estas embarcaciones.