Primeros contratiempos en el desconfinamiento en Alemania
Solo dos días después de haber anunciado el regreso progresivo a la normalidad en Alemania, un cantón tuvo que volver a aplicar el confinamiento el viernes y otros dos están considerando si deben hacerlo ante un nuevo aumento en el número de contagios. El sector de la industria cárnica está especialmente bajo observación.
En el land de Renania del Norte-Westfalia, un importante foco de Covid-19 ha brotado en una empresa de procesamiento de carne de la localidad de Coesfeld, donde más de 100 de sus 1.200 empleados han resultado infectados por el coronavirus.
Las instalaciones han sido cerradas provisionalmente, tal como confirmó el viernes el ministro de Salud de este territorio, Karl-Josef Laumann.
Además, informó de que se ha decidido aplazar una semana, hasta el 18 de mayo, el levantamiento de las restricciones a los contactos sociales entre personas, así como la apertura de restaurantes y parques de atracciones. Las escuelas y las guarderías no se verán afectadas por esta medida.
La ciudad de Coesfeld, ubicada en el oeste de Alemania, tiene unos 36.000 habitantes y el cantón (Kreis en alemán) tiene más de 200.000.
En Schleswig-Holstein, land fronterizo con Dinamarca, un matadero del cantón de Segeberg ha registrado 109 casos de contagio, lo que ha hecho que las sospechas se ciernan sobre el conjunto del sector cárnico del país.
Residencias de la tercera edad
Mientras tanto, en Turingia (este de Alemania), en el cantón de Greiz, que tiene cerca de 100.000 habitantes, varias residencias para personas mayores han observado una subida en el número de contagios.
El Gobierno de este land tomará una decisión la próxima semana respecto al proceso de desconfinamiento. «Para ser claros: no vamos a poner a todo el cantón en cuarentena», declaró su presidenta, Martina Schweinsburg. La medida se podría limitar a dos pequeños pueblos particularmente afectados.
Preparados para la segunda ola
Alemania decidió el miércoles un regreso parcial a la normalidad. Pero frente al riesgo de una segunda ola de contagios, que muchos virólogos dan por «segura», la canciller, Angela Merkel, y las autoridades de los länder llegaron a un acuerdo sobre el mecanismo de "reconfinamiento” a nivel local si el número de contagios volviera a elevarse.
Esto se hará por cantón, por localidad o, incluso, por establecimiento cuando se trate de una residencia de ancianos o de un edificio de viviendas, y no como se hacía hasta ahora de manera generalizada para territorios más amplios o para todo el Estado.
El suelo para volver al confinamiento se ha establecido en 50 casos de media por 100.000 habitantes en un periodo de siete días para una zona determinada.
En el cantón de Greiz la cifra alcanzaba los 90 y en el de Coesfeld, 52,7, según datos del Instituto Robert Koch (RKI).
«Tenemos que seguir siendo conscientes de que todavía estamos al principio de la pandemia y que todavía tenemos un largo camino por recorrer en la lucha contra el virus», previno el miércoles Merkel.