Navarra Suma insiste, pese a las protestas, en marginar a los colectivos del programa de infancia
Navarra Suma insiste en seguir adelante con su idea de no renovar el contrato con los colectivos del programa de atención a la infancia de los barrios. Señala que las protestas son «políticas y no tienen sentido».
Navarra Suma ha defendido la medida de no renovar el contrato a los colectivos vecinales del Servicio de Prevención de situaciones de desprotección y conflicto social en el programa de atención a la Infancia y Familia por entender que «la gestión directa refuerza los servicios públicos y llegará a los trece barrios de Pamplona, no solo a ocho de ellos».
Así lo señala en una nota, en la que defiende los cambios anunciados por el Ayuntamiento pese a las protestas que ha generado este anuncio.
Navarra Suma considera que el nuevo programa que se pondrá en marcha en enero, Coworkids, ampliará los servicios prestados hasta la fecha y aglutinará todos los servicios que se oferten.
Además de actividades de ocio y tiempo libre, incluirá campañas de sensibilización y promoción social, propuestas para trabajar la prevención universal a la infancia, proposiciones educativas o escuelas de padres, por ejemplo.
«Tenemos que poner a la infancia, a la adolescencia y las familias en un espacio referencial dentro de la estructura municipal, actuando de forma conjunta y adaptándonos a cada barrio», dicen para defender que la decisión del equipo de Gobierno «responde a la necesidad de dar respuesta a los ámbitos que exige la Cartera de Servicios Sociales: comunitario, social, cultural, educativo y sanitario».
«Es un proyecto ambicioso; es, sin duda, una mejora del servicio en prestaciones y ámbito de aplicación, incorporando cinco nuevos barrios para que ningún niño y niña de ningún barrio de Pamplona quede atrás», han insistido, explicando que el presupuesto asciende a 1,3 millones de euros.
Navarra Suma ha recordado la relación que mantiene Pamplona con UNICEF tras ser declarada ‘Ciudad amiga de la infancia’ en 2018, por lo que «era importante la valoración positiva de la entidad, que ha visto con buenos ojos el enfoque de universalidad de los servicios que queremos darle desde nuestra formación; además de fortalecer la prevención».
La coalición ha insistido en que «se busca una mejora en la calidad de la prestación» y que, pese a las protestas, esta nueva iniciativa «no hace desaparecer el trabajo comunitario en los ocho barrios existentes, sino que se incorpora a este nuevo proyecto».
Tendrán el «espacio que les marca la Cartera de Servicios Sociales, que establece líneas de actuación para fomentar el asociacionismo a través de subvenciones y el impulso de la participación de los y las menores en los espacios culturales, de ocio y tiempo libre de la comunidad».
Navarra Suma asegura que «no está en peligro el trabajo comunitario, son protestas políticas que no tienen sentido. Es sorprendente e incongruente el cambio de criterio de algunas formaciones políticas respecto a la municipalización de servicios».
«La gestión directa en un ámbito tan sensible como la infancia solo va a mejorar y universalizar el servicio», han defendido, recordando que la pandemia ha demostrado que la infancia, adolescencia y las familias deben ser reconocidas como esenciales para dar respuesta rápida en los momentos más difíciles.