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‪Electos piden responsabilidades y políticas conjuntas de montes tras el incendio del Bidasoa‬

Electos de los territorios afectados por el incendio que hace tres semanas arrasó casi 2.000 hectáreas en la zona del Bidasoa han comparecido públicamente para pedir responsabilidades y que se lleven a cabo políticas conjuntas para el cuidado de los montes.

Los electos de Bidasoaldea han comparecido en Bera. Idoia ZABALETA/FOKU

Exigir responsabilidades y solicitar que se lleven a cabo políticas conjuntas para el cuidado y mantenimiento de los montes son las dos principales peticiones que han realizado electos de todos los territorios afectados por el incendio que hace tres semanas arrasó cerca de 2.000 hectáreas en la zona del Bidasoa.

En principio estaba previsto haber realizado una manifestación, pero en vista de la situación de pandemia provocada por el covid-19 se decidió suspender esa marcha y celebrar la comparecencia conjunta de cargos, en la que han participado representantes de Urruña, Azkaine, Biriatu, Ziburu, Sara, Lesaka y Bera.

En la misma, han recordado que los daños provocados por el siniestro «han sido cuantiosos, tanto ecológicos como económicos» y que afectan a terrenos «comunales, bosques y pastizales, y también terrenos privados», además de a varios ganaderos.

El incendio «ha tocado y conmocionado a todos y todas, y hemos querido unirnos los pueblos afectados en torno a unas reivindicaciones», han explicado.

«Intencionado y provocado»

En primer lugar, han pedido responsabilidades por lo sucedido, ya que «pensamos que el incendio fue intencionado y provocado, así lo han manifestado el Procurador de Baiona, la Policía Foral y la Ertzaintza. Creemos que el fuego se encendió para causar dolor y daño, y no vemos otro interés oculto. Nos gustaría subrayar esto. Quien o quienes lo hayan hecho, lo tendrán que pagar de alguna manera».

En lo que respecta a los daños provocados por el fuego, han destacado que «es hora de hacerles frente». Así, en el caso de Nafarroa, el Ejecutivo «asumirá íntegramente las labores de reforestación de los árboles dañados por el incendio. Se ha previsto una línea de ayudas para infraestructuras ganaderas y se está estudiando la forma de compensar los daños causados por la pérdida de animales».

Por su parte, la Dirección General de Medio Ambiente «se encargará de la restauración de la zona afectada, si bien deberá esperarse hasta primavera para comprobar la capacidad de regeneración de la vegetación y, tras su valoración, se realizarán los proyectos de restauración necesarios».

De momento, comenzarán los primeros trabajos de plantación y las plantaciones más jóvenes se llevarán a cabo donde será difícil su restauración.

Dos Estados y dos comunidades

Además, han recordado que «este territorio de Euskal Herria que pisamos depende de varias administraciones: por un lado, los dos Estados, y de este lado de la frontera, de dos comunidades distintas. Paradójicamente, el fuego no entiende de fronteras y se ha dedicado a destruir todo lo que tenía delante».

Por ese motivo, consideran necesario «llevar a cabo políticas conjuntas de montes y tierras comunales transfronterizas. Tenemos mucho que aprender y trabajar juntos en la misma dirección será beneficioso para todos. Nos gustaría recorrer este camino de una manera democrática, escuchando a todos los usuarios de la montaña y llegando a acuerdos y consensos. Los alcaldes  de los pueblos que estamos aquí nos comprometemos a trabajar juntos para ello».

Asimismo han mostrado su agradecimiento a los bomberos, tanto profesionales como voluntarios, que participaron en las tareas de extinción y a todas las personas que de cualqueir manera contribuyeron con su solidaridad a sobrellevar ese día y las consecuencias del siniestro.

Finalmente, han mostrado su interés por «proteger nuestro pueblo y nuestro patrimonio natural. Sabemos que en las últimas décadas la situación socio-económica de nuestros pueblos ha ido cambiando. Pero para mantener nuestro entorno y paisaje tan bello, sabemos lo importantes que son algunas actividades y habrá que seguir fomentándolas y protegerlas. Tendremos que poner todos de nuestra parte para garantizar un uso sostenible, equilibrado y respetuoso del monte y analizar cómo mejorar la gestión de los terrenos comunales, con el consenso de todos los usuarios, para que nadie quede fuera o ‘desplazado’».