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El Supremo de Brasil declara que el juez Moro no fue imparcial al condenar a Lula Da Silva

La Corte Suprema de Brasil ha declarado que el exjuez y exministro Sergio Moro no actuó con imparcialidad en uno de los juicios contra el expresidente Luiz Inácio Lula da Silva.

El expresidente brasileño Luiz Inacio Lula Da Silva. (Miguel SCHINCARIOL/AFP)

La Segunda Sala de la Corte Suprema de Brasil ha declarado este martes que el exjuez Sergio Moro no actuó con imparcialidad en uno de los juicios contra el expresidente Luiz Inácio Lula da Silva, cuyas sentencias ya habían sido anuladas previamente.

La decisión, que responde a una apelación presentada por la defensa de Lula, fue adoptada por tres votos frente a dos y se suma a otro fallo que, por un conflicto de competencias, anuló cuatro procesos contra el exmandatario que estuvieron a cargo de Moro y ordenó que sean realizados nuevamente en otros tribunales.

El voto definitivo sobre la imparcialidad de Moro ha sido emitido por la magistrada Carmen Lucia Antunes, quien en diciembre de 2018, cuando se había comenzado a juzgar ese asunto, se había pronunciado en forma contraria, aunque ahora ha afirmado que «datos nuevos» surgidos desde entonces le han hecho cambiar de opinión.

Empate roto

Horas antes el juez del Supremo Kassio Nunes Marques ha roto el empate a dos que había hasta el momento, posicionándose a favor de Moro.

Marques, quien fue nombrado por Bolsonaro para ocupar uno de los asientos del Supremo, ha rechazado que Moro influyera en la sentencia contra Lula utilizando como justificación que las pruebas utilizadas fueron obtenidas «por piratas informáticos, violando los secretos de decenas de personas».

No obstante, se preveía ya la posibilidad de que otros dos magistrados, Edson Fachin y Antunes, pudieran cambiar su decisión.

Con el cambio de voto de Antunes, queda cancelado el caso contra Lula del apartamento de Guarujá, en Sao Paulo, el cual deberá comenzar ahora desde el principio. 

Grabaciones de Moro

La demada sobre la parcialidad del juez Moro presentada por el expresidente cobró mayor relevancia cuando salieron a la luz una serie de mensajes telefónicos en los que se podía leer como Moro, al frente del caso 'Lava Jato', guiaba a la acusación e incluso proponía testigos contra el expresidente brasileño.

Antunes ha señalado que no ha tenido en cuenta dichos mensajes y que la decisión tomada en este caso en concreto se toma porque hay evidencias de «conductas inapropiadas» contra Lula, pero que eso no conlleva impacto alguno en las otras causas de la operación 'Lava Jato'.

El 'habeas corpus' presentado por Lula busca anular las condenas de corrupción dentro de la operación 'Lava Jato'. La defensa sostiene que no sólo hubo parcialidad en el caso que instruyó Moro {el del apartamento de Guarujá en 2017–-, sino también en los otros dos en los que participó, pues imputó al Partido de los Trabajadores (PT), antes de que acudir a la llamada de Bolsonaro para ser su ministro de Justicia.

A principios de mes, Fachin anuló la sentencia de doce años y un mes de prisión por corrupción y blanqueo de capitales contra Lula que emitió un tribunal de Curitiba al considerar que este no contaba con autoridad para hacerlo y que debía ser nuevamente juzgado por un tribunal federal. Con ello, el expresidente retomó sus derechos políticos y podría se candidato a las presidenciales de 2022.

Lula ingresó en prisión el 7 de abril de 2018. Su condena supuso además su inhabilitación como candidato presidencial cuando era el favorito en las encuestas para las presidenciales del 7 de octubre de ese año, que finalmente fueron para el ultraderechista Jair Bolsonaro.

El juez Moro fue luego nombrado ministro por Bolsonaro, aunque más tarde dimitió.