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David «Infierno» Soria pierde el título de campeón estatal de boxeo ante «La Sombra»

El navarro David ‘Infierno’ Soria ha perdido el título estatal de boxeo ante José ‘La Sombra‘ Suero por KO en el tercer asalto de diez asaltos.

David «Infierno» Soria intenga golpear a «La Sombra» Suero. (Iñigo URIZ/FOKU)

No ha podido ser. El navarro David 'Infierno' Soria ha perdido el título de campeón estatal de de boxeo. Lo ha hehco en su tierra, en el Navarra Arena de Iruñea, frente a José 'La Sombra' Suero por KO en el tercer asalto.

El combate, de diez asaltos en total, ha comenzado con un dominio del iruindarra en el centro del ring. En el tercer asalto, después de una serie de golpes del navarro, un derechazo a la contra en el mentón ha desequilibrado a Soria, quien ya no ha podido levantarse de la lona.

Así, pierde el cinturón de Campeón de España de peso superwelter, conseguido hace un año en el mismo estadio, el Navarra Arena.

Una velada con unas mil personas

La velada ha comenzado con tres combates de K-1 profesional. En el primero de ellos el navarro Lander Rípodas se ha medido en un combate igualado al peleador de Gasteiz Flavius Chiaburu.

El navarro se ha recuperado bien de una cuenta de protección y el combate ha finalizado con resultado nulo.

El segundo combate ha enfrentado al navarro Andrés Unzué contra José María Quevedo, de Barcelona. Este último ha sido el ganador del enfrentamiento, con un Unzué lastrado por un corte en la cara.

En el tercer combate, el navarro Andoni Iglesias se ha medido frente al luchador bilbaíno Mikel Sortino. Iglesias ha ganado gracias al despliegue de una técnica más variada que la de su contrincante.

El siguiente enfrentamiento, de boxeo, ha encarado a Ander Amatriain contra el dominicano Saúl Luna. El navarro ha conseguido la victoria tras una decisión dividida de los jueces.

El penúltimo combate ha enfrentado al barcelonés Cristóbal Lorente frente a 'El flaco' Martínez. Lorente se ha impuesto en el tercer asalto noqueando a su contrincante.

La velada se ha llevado a cabo en el Navarra Arena con un aforo casi completo, de unas 1.000 personas, y unas estrictas medidas de seguridad que han llevado a la desinfección del ring por parte del personal de limpieza del centro después de cada combate.