«EH Bildu hizo de inmediato lo que debía y ahora, a seguir trabajando por Gasteiz»

Félix González San Vicente (Gasteiz, 1964) sustituye en la portavocía del grupo municipal a Miren Larrion. «Gasteiztarra peto-petoa» que no VTV, licenciado en Económicas, máster en Hacienda Pública, euskaldunberri de inicio autodidacta, persona con vocación de servicio y al que ven «comprometido».

Nacido en 1964 junto al seminario viejo, «al ladico de la catedral», Félix González San Vicente se define primero como «gasteiztarra peto-petoa», pero huye de la etiqueta de VTV (vitoriano de toda la vida) que le parece «elitista». «Yo soy de un Gasteiz diverso en el que estamos todos los vitorianos y vitorianas, los nacidos aquí, los que vinieron hace décadas y los que siguen viniendo ahora a vivir y trabajar en esta ciudad».

Empezó a estudiar euskara por su cuenta a los 16 años, con el método de Xabier Gereño y un «diccionario pequeño de los que regalaba La Municipal». Pasó por AEK y en la carrera ya estudiaba matemática y estadística en euskara. Es licenciado en Ciencias Económicas y Empresariales por la UPV-EHU y máster en Hacienda Pública y Finanzas. Asegura tener vocación de servicio público, que desarrolló como funcionario de la Administración en diversos departamentos, y considera que su entrada en el Ayuntamiento como concejal en 2015 es una extensión de esa vocación.

Apunta que quienes le conocen dicen que es «comprometido» y recuerda como «un momento histórico aquel en el que estuvimos sentados en el Arenal de Bilbo», esperando si Bildu se podía presentar o no a las elecciones. «Allí dimos un paso en un proyecto ilusionante y cuatro años después me decidí por dar el paso a ser concejal».

Ahora le ha tocado la tarea de sustituir como portavoz de EH Bildu en el Ayuntamiento a una persona de carisma como Miren Larrion, y en unas circunstancias difíciles…

En lo personal esto es un reto que supone asumir nuevas obligaciones tras una situación muy sorpresiva. Pero, por otra parte, es dar continuidad a la labor de casi seis años que llevo en el Ayuntamiento, con una visión de la ciudad y con el mismo equipo.

¿Qué tiene que decir sobre lo que ha hecho Miren Larrion?

Como el resto del grupo, me enteré la misma mañana en la que Miren Larrion puso en conocimiento de EH Bildu los hechos y ese mismo día por la tarde supe que la consecuencia inmediata era su dimisión. Fue una situación abrupta y sorpresiva. EH Bildu, desde mi punto de vista, actuó de una manera coherente e inmediata. A partir de ahí, como grupo municipal nos ha tocado recomponer la estructura, poner en marcha el proceso de sustitución. Y ahora, a continuar trabajando.

Otros partidos insisten en pedir explicaciones a EH Bildu.

Pero piden a EH Bildu explicaciones de algo que corresponde únicamente a la esfera personal y privada de Miren Larrion, como ella trasladó en la comunicación que hizo al día siguiente. Como EH Bildu no vamos a alentar chismes, rumores o filtraciones sobre una situación que la propia Miren Larrion ya ha dejado claro públicamente que no tiene nada que ver ni con su vida política ni su vida municipal. EH Bildu no puede dar explicaciones sobre nada de eso. Y recordamos a Gorka Urtaran, en una primera faceta de alcalde de la ciudad, diciendo que no iba a entrar en cuestiones personales y a hacer leña del árbol caído y, sin embargo, dos días más tarde dio otro mensaje muy distinto atendiendo a la estrategia política de su partido que nosotros no comprendemos. Miren Larrion ya ha dicho que, en su momento, probablemente ante el juez, dará sus aclaraciones sobre una cuestión a la que nosotros no encontramos explicación.

¿Pero no podía haber hecho EH Bildu algo más?

Ha hecho lo que tenía que hacer. EH Bildu no tiene que hacer especulaciones, tiene que tomar decisiones políticas y lo hizo desde el primer momento, en cuanto conoció los hechos que le planteó Miren Larrion, con las consecuencias ya conocidas.

¿La marcha de Larrion va a suponer algún cambio en la política del grupo municipal?

Ninguno. Nuestro grupo viene trabajando con unos objetivos desde años anteriores y esta salida no altera estos objetivos.

¿Cuáles son esos objetivos?

Trabajar por el bienestar de los ciudadanos y ciudadanas de Gasteiz. En ese sentido van todas las propuestas que hace EH Bildu en distintas materias, en los presupuestos, en los planes de contingencia frente a la pandemia. Pretendemos poner a las personas en el centro de la vida municipal.

¿Qué valoración hace de estos casi dos años de legislatura?

Tenemos una ciudad que socialmente es de izquierdas y en el que la mayoría municipal también es de izquierdas y, sin embargo, el gobierno del PNV se muestra cómodo con las mayorías con las que juega y con su política de alianzas, con la que, a la hora de la verdad, cuando se abordan las cosas sustanciales como dinero, urbanismo o fiscalidad, encuentra pactos con la derecha. Y nosotros querríamos cambiar eso. En esta ciudad y este Ayuntamiento de mayoría de izquierdas se podrían hacer las cosas de otra manera, con otro tipo de gobernanza, con otras decisiones. Por ejemplo, en la reciente adjudicación del servicio de limpieza, se podría optar por su municipalización y que se ofrezca el servicio desde lo público, pero la derecha consigue que se vuelva a dar la concesión a una multinacional de las basuras.

Pero los presupuestos se han aprobado con Elkarrekin Podemos-IU...

Nosotros dijimos desde el principio que eran unos presupuestos insuficientes, porque en un momento excepcional había que tomar medidas extraordinarias, lo que no ha ocurrido. Se sigue en una estrategia de poner restricciones que a nivel global se están superando. Y no entendemos que partidos de izquierdas hayan apoyado unas cuentas así.

Está la cuestión del pozo de gas de Armentia...

Es otro de los temas en los que el PNV está fallando a la ciudadanía de Gasteiz, que mayoritariamente no quiere que se inicien estas actividades en Armentia, y además la normativa urbanística no lo permite. Y lo que no consiguen por delante lo tratan de lograr por detrás a través de los tribunales. Pero no olvidemos que el PNV de Urtaran es el mismo PNV de Arantxa Tapia.

Dar una vuelta por Gasteiz da verdadera pena, ante la cantidad de comercios y locales cerrados que se ven...

Yo pateo mucho la ciudad, me gusta patearla, y efectivamente esa es la impresión. Es otra expresión del fracaso del gobierno Urtaran por reactivar el centro. Hace años que llevamos plantando una estrategia diferente y lo que estamos viendo es que ahora hay cuarenta locales cerrados en el entorno de la manzana de San Prudencio. En los últimos meses han cerrado cuatro más. La forma de reactivar el centro no es poner alfombra roja a empresarios como el de Urteim que está haciendo acopio de locales que mantiene cerrado y arrastran al cierre a los de alrededor. Cuando empezó todo esto ya avisamos de que lo que se oía que pretendía hacer esta empresa no podía hacerse, que la experiencia dice que no se pueden hacer galerías interiores y que había una saturación de supermercados de alimentación, que había que evitarlo desde el planeamiento y no se hizo. El resultado es Urteim 2 - Urtaran 0. Abre un supermercado de alimentación y plantea una galería interior. Esto es un espejo de lo que es este gobierno municipal.