INFO

La vacunación en Iparralde se abre a todos los adultos a partir del 31 de mayo

El primer ministro francés, Jean Castex, ha anunciado este jueves que comenzarán a vacunar a todos los adultos dos semanas antes de lo previsto, el 31 de mayo. Algunas profesiones, como profesores, policías, gendarmes, cajeras o conductores de autobús, podrán vacunarse a partir del 24 de mayo.

Viales de Pfizer, la compañía que más vacunas está enviando a la UE. (Gorka RUBIO | EFE)

«Tras haber superado con éxito el umbral de los 20 millones de vacunaciones por primera vez el pasado sábado, ya tenemos un millón y medio de personas más, por lo que el Gobierno ha decidido, a petición del presidente de la República, acelerar aún más», ha explicado Jean Castex.

La aceleración se debe a que se van a recibir «muchas dosis a finales de junio, por lo que debemos tener una tasa de vacunación lo más alta posible y está a nuestro alcance, gracias a la movilización que no se debilita en los centros de vacunación», ha continuado.

El Estado francés debía recibir 16 millones de dosis en mayo, y luego 32 millones en junio. El objetivo del Gobierno es llegar a 30 millones de personas vacunadas para el 14 de julio, que es la fiesta estatal, al conmemorarse la toma de la Bastilla. 

Antes de este anuncio, el 15 de junio era la fecha elegida para abrir la vacunación a todas las personas de 18 a 49 años. El adelanto de fechas afectará, lógicamente, a Ipar Euskal Herria.

Desde el pasado 10 de mayo, todos los mayores de 50 años, sin condición, pueden vacunarse. En los centros en los que todavía hay citas disponibles el día anterior para el día siguiente, todos los adultos, independientemente de su edad, pueden reservar una plaza, pero esta casuística sigue siendo poco frecuente.

Desde el mes de abril también se han reservado plazas en los centros de vacunación para las personas de 55 a 59 años que están muy expuestas a la enfermedad debido a su profesión. A partir del próximo lunes, estas profesiones tendrán acceso sin límite de edad.

Cabe recordar que en el Estado francés, a diferencia de lo que ocurre en el Estado español, se decidió espaciar las dosis más allá de lo indicado por el fabricante (de 21 a 42 días), lo que les permite cubrir con una primera dosis a más gente y bajar la franja de edad a vacunar, consecuentemente, el doble de rápido.