Mucho trabajo y mucho por ajustar, pero el Athletic empata en Elx en el estreno liguero

Agirrezabala se ha doctorado con dos paradones mientras que sus compañeros han mostrado luces y sombras; una presión agobiante y oleadas de juego bastante aseado con errores garafales que han propiciado peligrosas contras del cuadro ilicitano.

ELCHE 0 - ATHLETIC 0

Ni victoria ni derrota, sino todo lo contrario. El Athletic ha sumado en el campo del Elche su primer punto de la tempora mostrando sus virtudes y carencias. Mucho trabajo le queda por hacer a Marcelino García total y mucho por ajustar a los jugadores, pero al mismo tiempo han mostrado por fases esa presión que tanto daño hace a los rivales. Ahora bien, un par de errores de los laterales rojiblancos han podido costar bien caro.

Aunque no ha pillado a nadie por sorpresa Marcelino García Toral ha incluido a a Agirrezabala en la portería y a Vivian en el centro de la defensa al lado de Iñigo Martínez, al tiempo que la gran sorpresa ha sido ver a Nico Serrano entre los 18 convocados. En el bando local, han jugado su primer partido oficial con la camiseta ilicitana el portero Kiko Casilla y los defensores centrales Enzo Rozo y Pedro Bigas.

Una vez establecido el primer once inicial, con un posicionamiento estratégico clásico de 4-4-2 en el bando rojiblanco y otros menos usual de tres centrales en el bando local, no ha precisado Agirrezabala ni dos minutos en lucirse, tapando en el primer palo un voleón al muñeco de Boyé.

No ha tardado el Athletic en replicar con un par de acercamientos culminados con un córner que por poco no ha acabado con autogol ilicitano al disparo de Berenguer, en un asedio en el que el bando rojiblanco ha sacado cuatro saques de esquina seguidos, pero sin suerte. Eso sí, la nutrida presencia de la afición rojiblanca se ha animado a calentar su garganta por los leones.

La presión alta del Athletic ha causado estragos a un Elche que ha preferido hacer transiciones rápidas que controlar el balón, básicamente porque la intensidad rojiblanca ha provocado robos o «suciedad» en la circulación local del esférico. Ahora bien, al Athletic le ha faltado definir con algún remate desde media distancia, lo cual ha facilitado alguna contra ilicitana que ha acabdo en córner, un córner que Fidel ha botado bien cerrado, aunque sin consecuencias.

Y con todo, la ocasión más clara ha sido local. Pere Milla ha logrado filtrar un balón para Boyé, que ha conseguido tumbar a Agirrezabala, pero entre el guardameta de Orereta y los defensas, sobre todo uin muy atinado Balenziaga, han conseguido encerrar al delantero rival y limitar los daños a un saque de esquina sin consecuencias.

Frenados los bríos bilbainos, ha sido el Elche quien ha empezado a dominar y ahí ha llegado el gol de Fidel ya en el minuto 29, anulado en un primero momento y de forma definitiva, aunque la ubicación de De Marcos ha estado a punto de habilitar el tanto local.

Lo mejor en estos casos es responder cuanto antes, e Iñaki Williams la ha tenido luego de una pared con Sancet. Por desgracia, Enzo Roco se ha cruzado de manera providencial para evitar el remate del delantero bilbaino.

En esos minutos finales posteriores a la parada por hidratación, el Elche ha vuelto a jeter el miedo en el cuerpo, sobre todo en la banda derecha bilbaina, atacando a un De Marcos al que se le ha acumulado el trabajo. Así, Pere Milla la ha tenido a placer para rematar a un centro-chut de Mojica. Por fortuna, su remate ha asemejado más a un despeje, perdiéndose por la línea de fondo.

La recta final previa al descanso ha traído una ocasión para el Athletic, en el que ni Iñigo Martínez ni Iñaki Williams han conseguido llegar a dirigir el balón a la portería. Acto seguido, un gran chut de Balenziaga ha tenido una gran intervención de Kiko Casilla, un córner posterior que ha terminado con un remate posterior de De Marcos que Casilla ha parado sin problemas. Y con esto, tras una contra local que Vivian ha desviado a córner, una acción en la que se ha reclamado penalti de De Marcos, pero que ha culminado sin novedad.

Partido de doble filo

De Marcos ha tenido que abandonar el campo al poco de la reanudación, con lo que debió entrar Iñigo Lekue. Curiosamente, ese cambio facilitó un tanto las tareas defensivas rojibancas. Más aún, el Athletic dispuso de una vaselina de Williams y un centro que Muniain no atinó en el remate a su favor.

No obstante, las contras ilicitanas por la banda de Balenziaga han seguido metiendo miedo, mientras que una galopada de Williams y un mal remate de Dani García han vuelto a dar la réplica. En resumen, que el partido ha podido romperse por un lado, por el otro, o por ninguno.

El calor y el cansancio han empezado a quebrar los compartimentos estancos y aunque el Athletic ha parecido terminar más entero, no ha terminado de hacer valer esa condición física. Marcelino ha apostado por Vesga, Villalibre, Nico Williams y Zarraga, pero sus propios compañeros han decidido apenas hacer uso de esos recambios y jugársela al mucho empujar y poco pensar.

Al final, cuando el 0-0 era ya una evidencia, una frivolidad de Iñigo Lekue ha estado a punto de costar caro, ya que le ha dejado un balón franco a Morente en la frontal del área. Este ha rematado desde el «asa del maletín» y de no haber sido por Agirrezabala, el bueno de Lekue hubiera acabado siendo el infausto protagonista de la jornada.

Al final, empate a cero sin goles, juego trabado por ratos y no tan malo en otros, muchos desajustes y mucha necesidad de mutuo conocimiento, pero con un punto que poder agradecer al esfuerzo y a los numerosos espectadores rojiblancos reunidos en el Martínez Valero, después de 17 meses de fútbol sin un alma en las gradas. Menos da una piedra.