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Osasuna sigue reñido con el gol e incluso falla una pena máxima ante el Celta (0-0)

A Osasuna le sigue faltando la guinda del gol. Ante el Celta ha desplegado todavía un mejor fútbol, sobre todo en una primera parte plagada de ocasiones e incluso ha fallado un penalti al inicio de la segunda, convirtiendo al meta visitante, Matías Dituro, en el protagonista del choque.

Rubén García, rodeado de jugadores del Celta, ha fallado un penalti decisivo. (Idoia ZABALETA/FOKU)

Como ante el Espanyol, Osasuna ha vuelto a firmar un empate a cero frente al Celta, adoleciendo de los mismos males que en la primera jornada: la falta de acierto. En esta ocasión, incluso ha desaprovechado un penalti en el comienzo de la segunda mitad, que Dituro –héroe celtiña– le ha detenido a Rubén García.

Ha sido el cuadro local el único equipo que ha propuesto fútbol creativo, mientras el Celta, con un buen número de futbolistas ofensivos en sus filas, ha esperado al error rival para generar peligro. La escuadra navarra ha producido más que ante el Espanyol, con un juego combinativo y de apertura a banda para buscar posteriores remates.

Pero, como ante los periquitos, se ha marchado de vacío al descanso, pese a haber hecho merecimientos más que sobrados para ponerse por delante en el marcador. Con Kike Barja y Rubén García muy activos y bien secundados por sus respectivos laterales –Manu Sánchez ha sido una de las novedades del once, junto a Aridane–, los locales han ido sumando ocasiones para disfrute de la grada.

Con solo nueve minutos transcurridos, Kike García ya ha disparado al exterior de la red una jugada iniciada por su tocayo Barja. La continuidad la ha puesto Rubén García al cuarto de hora, con una diagonal, posterior recorte y remate que se ha encontrado con las piernas de un rival.

Dos minutos después, Kike García ha vuelto a dejarse notar, con una media vuelta y un disparo centrado, sin problemas para un Dituro, que se ha tenido que emplear más a fondo a la media hora en un lance con los mismos protagonistas. El empalme del delantero conquense, tras domesticar el cuero con el pecho en un envío largo, se ha encontrado con la buena estirada del cancerbero argentino.

Instantes después, Kike Barja se ha quedado a un taco de la bota para empujar el balón a las redes tras centro desde la izquierda de Darko, mientras que Moncayola, por partida doble, lo ha intentado en los estertores del primer tiempo, pero se ha vuelto a encontrar con el buen hacer de Dituro y la falta de precisión en el giro de su cuello al peinar la pelota de cabeza.

Dituro, infranqueable

Incapaz de anotar de jugada, Osasuna la ha tenido desde los once metros, tras un manotazo dentro del área de Domínguez sobre la cara de Kike García. Parecía que era imposibe que no subiese el 1-0 al electrónico, pero el pie del cancerbero argentino, ya engañado, lo ha impedido milagrosamente.

La ocasión perdida le ha sentado como un tiro a los anfitriones, quienes a partir de ahí ya no han sido los mismos que en la primera mitad. No ha habido profundidad por bandas, ni centros, más allá de una peinada de David García a saque de falta lateral y un chut raso desviado de Nacho Vidal.

Tampoco es que el Celta haya sabido sacar provecho de las menores prestaciones rojillas, pues solo un disparo buscando la escuadra por parte de Santi Mina ha llevado cierto marchamo de gol.

El encuentro se ha terminado de revolucionar a raíz de la lesión de Kevin Vázquez coincidiendo con el agotamiento de las ventanas de cambios por parte del técnico celtiña, Eduardo Coudet, lo que ha dejado a los gallegos en inferioridad numérica.

A partir de ahí, Osasuna se ha dedicado a colgar balones en el área rival y dos testarazos de Chimy Ávila han estado en un tris de otorgar justicia al equipo navarro. El primero se ha marchado pegado al poste y el segundo se ha vuelto a encontrar con el omnipresente Dituro, que lo ha parado todo.

Los pupilos de Jagoba Arrasate deberán mejorar su definición en su visita a Cádiz si no quieren volver a protagonizar otro inicio de campaña dubitativo, en el que han dejado patente que saben jugar al fúbol, pero faltándoles la picardía necesaria en los metros finales.

El preparador de Berriatua ha lamentado que su equipo se ha dejado escapar «dos puntos», pues «hemos tenido mucho volumen ofensivo y nos ha faltado eficacia». Así, ha destacado el «fantástico» primer tiempo realizado por los suyos, que tenían «rabia dentro» y que han hecho «todo para ganar».

«He visto un equipo mejor que el de la semana pasada. Creo que hemos bordado lo que queremos durante el primer tiempo y no me cabe duda de que así llegarán los goles», ha afirmado, a la par que ha valorado positivamente el hecho de mantener la portería a cero. «Creo que ha habido un rival que ha sido muy superior al otro», ha apostillado.

Todos los datos del partido se pueden consultar en la página especial de NAIZ.