Cuba supera a Estados Unidos en porcentaje de vacunas administradas contra el covid-19

Cuba es el único país latinoamericano que ha sido capaz de elaborar una vacuna contra el covid-19 –realmente son tres: Abdala, Soberana 02 y Soberana Plus–, y supera de largo en dosis administradas a países tan potentes como México, Brasil y Argentina. También a EEUU, que se está quedando rezagado.

Después de varios meses muy complicados por el impacto del covid, con las tasas de incidencia y cifras de fallecidos más elevadas en toda la pandemia, Cuba encara el inicio del mes de setiembre con dos buenas noticias. La primera, el paulatino descenso en la afección del virus, aún muy alta, y la segunda, el envidiable ritmo en el proceso de vacunación, que ha situado a la isla caribeña entre los países con mayor porcentaje de dosis administradas.

De hecho, según los datos aportados por la publicación online Our World in Data, editado por profesionales de la Universidad de Oxford, en América solo Uruguay, Chile y Canadá han inoculado un mayor porcentaje de vacunas, con 160, 150 y 140 dosis cada cien personas, respectivamente –hay que tener en cuenta que la mayoría de las vacunas requieren más de una dosis por persona–, por las 121,4 dosis de Cuba, que en los últimos días ha conseguido superar incluso a la superpotencia continental y mundial, Estados Unidos.

Como se puede apreciar en el gráfico que acompaña a estas líneas, el gigante norteamericano, que comenzó muy fuerte la campaña, se está quedando muy atrás, debido a las reticencias de buena parte de la población, sobre todo –aunque no solo– en sectores vinculados al Partido Republicano y también a la incapacidad de la administración para llegar a grupos de población expulsados por el propio sistema.

Vacunas de producción propia

En el caso de Cuba, el mérito es doble porque es el único país latinoamericano en haber logrado con éxito producir vacunas propias contra el covid-19. Se trata de las denominadas Andala y las diferentes versiones de Soberana (Soberana 02 y Soberana Plus), que han mostrado índices muy altos de eficacia frente a la enfermedad, de hasta el 92,2% con tres dosis.

Precisamente, el hecho de que sean necesarias tres dosis hace que aunque el porcentaje de vacunas administradas sea tan alto, el porcentaje de población inmunizada esté unos puntos por debajo que el de los países citados. Así, a fecha de ayer algo más de tres millones de personas habían recibido las tres dosis necesarias de esas fórmulas contra el coronavirus, casi un tercio de la población total, y más de cinco millones tienen al menos inoculada la primera dosis vacunal, en torno a la mitad de sus habitantes.

Al ritmo de vacunación actual, que se ve de forma clara en el gráfico, esos porcentajes van a crecer de forma significativa en los próximos meses. Sin embargo, las cifras alcanzadas hasta el momento no habían sido capaces de poner freno al aumento de los contagios en la isla, que han provocado una situación muy delicada.

Tanto, que el pasado domingo comenzó la aplicación de la vacuna china Sinopharm en Cienfuegos (centro) para frenar la rápida propagación del virus en ese enclave, que ha sufrido en las últimas semanas un fuerte impacto de la enfermedad y muestra una alta tasa de incidencia y positividad. De esta forma, la vacuna china ha sido el primer inmunizante extranjero que se aplica en Cuba, que no forma parte del mecanismo Covax creado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) para que los estados de ingresos medios y bajos accedieran a las vacunas.

De esta forma, las autoridades cubanas pretenden acotar definitivamente la expansión de un virus que pese al fuerte rebrote de los últimos meses durante la pandemia ha golpeado a la isla con menor fuerza que a la mayoría de los países del continente, y asentar una mejora que le ha llevado a registrar durante cuatro días consecutivos una disminución de los contagios.