Jokin Aperribay recibe el apoyo casi unánime de los accionistas en la Junta General
El 99,6% de las acciones participantes han aprobado las cuentas del pasado ejercicio y el presupuesto de esta temporada en una cita en la que el Consejo ha desvelado que ahora la Real tiene 37.316 socios cuando antes de la reforma contaba con 24.788 y que por eso va a establecer un límite de 37.500.
El Consejo de Administración de la Real Sociedad ha recibido un apoyo casi unánime en la Junta General de Accionistas celebrada esta tarde en el Teatro Victoria Eugenia de Donostia de manera presencial y telemática.
Un 99,6% de las acciones presentes han aprobado las cuentas de la pasada temporada saldadas con unas pérdidas de 4.6 millones después de impuestos por los doce de saldo negativo provocados por la pandemia y un presupuesto récord para esta temporada de 133,7 millones de euros de gastos y 136,1 de ingresos.
El presidente de la Real Sociedad, Jokin Aperribay, ha anunciado en la Junta de Accionistas que su Consejo ha tomado la decisión de limitar el acceso a la condición de abonado ante otra cifra récord.
37.316 socios
Ha destacado que, a pesar de la pandemia, ha crecido la masa social al registrarse 1.396 bajas y 3.712 altas, con un saldo neto positivo de 2.316 para llegar a un número de 37.316 socios, cuando antes de construir el nuevo campo eran 24.788: «Hemos crecido un 50%. La reforma de Anoeta es muchísimo más que quitar las pistas. Es un orgullo ver esta cifra y tener el 95% del aforo ocupado».
El presidente realista ha explicado que la Real tiene ahora 32.469 abonados individuales, 4.006 corporativos, de los que 1.222 no ocupan asiento en los tres partidos de tipo A –Barcelona, Real Madrid y Athletic–, y en los de Europa League. Además hay 841 socios del programa «Bat, bi, hiru, lau, bost, sei» dirigido a los menores de seis años, sin derecho a asiento, pero sí a tener preferencia para convertirse en abonado al cumplir siete.
Aperribay ha anunciado que éstos serán los únicos que podrán convertirse en abonados con asiento en el nuevo Anoeta si se supera la cifra de 37.500 abonados, aunque ve difícil superar esa barrera porque en enero suelen registrarse bajas.
«Lo mejor, la Copa»
El presidente de la Real ha querido subrayar en el inicio de su discurso que «lo mejor de estos tres años, sin duda, es la Copa conseguida 34 años después del último título. Un partido que además de ser una final y un derbi teníamos que ganar. El primer equipo ha acabado estos dos años sexto y quinto, dos veces seguidas en Europa, tres en los últimos cinco años».
Aperribay también ha destacado «al ascenso del Sanse 59 años después, un hito histórico, el ascenso del tercer equipo a la 2ª RFEF y el quinto puesto en la Liga Iberdrola, el mejor conseguido por el equipo femenino».
Ha defendido la gestión del club en los dos ejercicios durante la pandemia, que se han saldado con un beneficio de dos millones en el primero, en el que solo afectó a la parte final, y unas pérdidas de 4,6 en el último, que influyó en su totalidad con un saldo negativo de doce entre lo que se ha dejado de ingresar y de gastar por el covid.
Defensa del acuerdo con CVC
El presidente realista ha defendido además el acuerdo de LaLiga con CVC, por el que este fondo «aportaría 2.500 millones el 10% de su valoración de la Liga, a cambio de quedarse con el 10,95% de los ingresos distribuibles, todos los ingresos menos los gastos, con un traspaso de la aportación en préstamos participativos».
Ha criticado a los clubes que apuestan por otra opción –Barcelona, Real Madrid y Athletic– y a la Federación Española por apoyarlos.
Aperribay se ha felicitado por el acuerdo para vender los derechos de televisión de LaLiga por 4.950 millones de euros en los próximos cinco años, por el que cinco partidos se darán por DAZN y otros cinco por Movistar La Liga: «Mantenemos los niveles de ingresos, suben algo, cuando en Inglaterra, Alemania e Italia han renovado a la baja».
El presidente blanquiazul ha explicado además el proyecto de construir nuevas instalaciones y mejorar las existentes en Zubieta con el apoyo de la inyección de CVC. El equipo femenino pasará a tener un edificio propio, con un campo con aforo suficiente para que pueda utilizarlo también el Sanse si estuviera en Segunda y en el que se incluirá una zona de restauración para generar nuevos ingresos.
También se preven mejorar las instalaciones del equipo profesional y las destinadas a la cantera y a los clubes convenidos con dos nuevos campos reglamentarios. La Real pasaría a tener ocho de fútbol en Zubieta, cinco de hierba natural y tres de artificial. Además se construirá otro campo de hockey hierba femenina en base al acuerdo alcanzado con el ayuntamiento de Donostia.
«Una Junta muy tranquila»
En la rueda de prensa posterior Jokin Aperribay ha agradecido el apoyo de los accionistas: «Ha sido una Junta muy tranquila y eso es bueno para la Real».
Ha destacado el récord de abonados: «La respuesta de la afición es extraordinaria, son el futuro de la Real. La pena es que no ha estado en la pandemia y en la final de Copa. Lo mejor es la respuesta de las personas. Tener 37.316 socios es extraordinario, desde hace unos cuatro años hemos aumentado el 50%».
Ha añadido que «yo era de los convencidos de que iba a ocurrir, pero no tan pronto, y teniendo en cuenta que nos ha pasado una pandemia a los seis meses de acabar el campo cuando hace cuatro años éramos 24.000. Ojalá que se quede pequeño».
Aperribay ha pedido que no se lancen objetos en Anoeta en los partidos y ha desvelado que están identificados dos de los chavales que han protagonizado esos incidentes que se han saldado con multas.
El Sanse
También ha reclamado a la afición que vaya a ver al Sanse: «Ha habido una coincidencia de dos partidos en un fin de semana con muy mal tiempo. Tenemos que concentrar a las personas, facilitar que los abonados vayan acompañados...». Además ha señalado que se «está barajando reforzar al filial. De momento ya ha venido Jonathan. Si hay que reforzar los dos equipos lo haremos».
Sobre el acuerdo con CVC, ha comentado que «en los próximos años nos jugamos mucho y esos deberes no los podemos dejar para dentro de quince años. Los tenemos que hacer ahora».