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Israel desaloja a una familia palestina que resistía en su casa, que ha sido demolida

La Policía israelí ha expulsado a la familia que resistía en su vivienda de Jerusalén Este y que amenazaba con hacer estallar unas bombonas de gas. La casa ha sido posteriormente derruida.

Una excavadora retira escombros protegida por varios agentes policiales. (AHMAD GHARABLI | AFP)

Después de múltiples intentos, la Policía israelí ha destruido la casa de una familia palestina en el barrio Sheikh Jarrah, en Jerusalén Este ocupado. Agentes han acudido de madrugada al domicilio de la familia Salhiya, amenazada de expulsión desde 2017 y objeto de una campaña de respaldo en los territorios palestinos y en el extranjero.

El desalojo comenzó a ejecutarse el pasado lunes, cuando la familia se blindó en la vivienda con gasolina y bombonas de gas con la amenaza de hacer explotar la casa. Mientras, las excavadoras israelíes desmantelaban varias estructuras de la parcela.

Sobre la 1.00 de esta pasada noche, un dispositivo israelí regresó a la vivienda «con extrema violencia», según un comité de apoyo a la familia, después de «haber cortado la electricidad y arrojar bombas de estruendo».

«Durante la noche, la Policía israelí ejecutó la orden de expulsión de edificios ilegales en un terreno previsto para una escuela destinada a niños que requieren cuidados especiales», ha apuntado este cuerpo en un comunicado.

«Los miembros de la familia que vivían en los edificios ilegales tuvieron innumerables oportunidades de entregar la tierra con su consentimiento, pero lamentablemente se negaron a hacerlo», ha añadido. El operativo ha dejado cerca de una veintena de arrestos.

«Una excusa»

Grupos que defienden a la familia consideran que la escuela podía ser construida en otro sitio sin tener que destruir la residencia.

Los Salhiya son una de las 70 familias, más de 300 personas, que están bajo amenaza de expulsión, por diferentes motivos, solo en este barrio de Sheikh Jarrah, próximo a la Ciudad Vieja de Jerusalén.

Mahmud Salhiya, propietario de la vivienda, aseguró ayer a Efe que la construcción de la escuela es «una excusa» dentro de la política de desalojo y desplazamiento de la población palestina de esta parte de la ciudad.