La CEOE se descuelga de la subida del SMI, que el Gobierno español quiere fijar en 1.000 euros

Las patronales CEOE y Cepyme han rechazado de plano cualquier acuerdo sobre la subida del Salario Mínimo Interprofesional, subrayando que «las empresas han asumido una subida del 30%» desde 2019. El Gobierno de Pedro Sánchez ha señalado que quiere dejarlo en 1.000 euros, como piden CCOO y UGT.

En la reunión mantenida por ‘las tres patas’ de la Mesa estatal del Diálogo Social el lunes, el Gobierno español –representado por la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz– planteó la subida del salario mínimo interprofesional (SMI) a 996 euros mensuales por 14 pagas, mientras que CCOO y UGT reclamaron la cifra de 1.000 euros, y CEOE y Cepyme aplazaron su respuesta oficial. Este martes, en un comunicado conjunto, las direcciones de las dos patronales han rechazado la propuesta de subir el SMI en 2022, señalando que nos encontramos «en un contexto económico de incertidumbre, en el que previsiblemente no se recuperarán los niveles de negocio precrisis hasta 2023, con presiones crecientes en los costes de las empresas y una notable caída acumulada de la productividad».

Al mismo tiempo, han expresado su disposición a «analizar y concretar en el ámbito bipartito con los sindicatos la que debería ser la senda de actualización de los salarios razonable para los próximos años en el marco de las negociaciones del próximo Acuerdo Interconfederal para la Negociación Colectiva (AENC)».

Las organizaciones empresariales han indicado también que «la remuneración de los asalariados prácticamente ha recuperado los niveles de 2019 (previos a la crisis)», mientras que «el excedente bruto de explotación todavía está muy lejos de normalizar su situación y continúa siendo un 6,6% inferior al de 2019». Lo que no han comentado es que los beneficios netos de muchas empresas sí han superado en 2021 los niveles prepandemia.

«Los costes laborales»

Han incidido en que una nueva subida del SMI «contribuirá a aumentar los costes laborales y la presión sobre los márgenes de las empresas, lo que, unido a otros riesgos como el encarecimiento de las materias primas o los cuellos de botella en las cadenas globales de suministro, pueden llevar a un menor dinamismo económico en el futuro y a una menor creación de empleo».

Además, han alegado que las empresas «han asumido una subida del 30% en el SMI desde 2019, con una reciente subida en septiembre del pasado año –que alcanzaría el 5,2% sumada a la que se plantea para 2022–». Según sus cálculos, al aplicarse una subida de cotizaciones sociales aparejadas a los salarios, el «coste total por empleado» es «muy superior a esos 1.167 euros mensuales que se proponen y que sobrepasaría los 1.500 euros en términos generales».

En el comunicado no se menciona la subida del coste de la vida para los asalariados, con un IPC interanual que se ha disparado hasta el 6,5% en diciembre.

Tras señalar que una nueva subida del SMI «parece responder más a una aspiración política en el seno del Gobierno que a la lógica económica», CEOE y Cepyme plantean que «el deseo compartido de que la recuperación económica lleve aparejada un mayor nivel de rentas debe lograrse favoreciendo las palancas que están detrás del desarrollo económico y, concretamente, del crecimiento empresarial, como son la formación, la inversión o el desarrollo tecnológico».

La propuesta sube a 1.000 euros

Tras la reunión del lunes, los representantes de CCOO y UGT señalaron a los medios que la propuesta inicial del Gobierno había sido la de subir el SMI a 996 euros, mientras que la ministra de Trabajo eludió dar una cifra concreta por «respeto» a la negociación, a la espera de las respuestas de los sindicatos y las patronales.

Este martes, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, la portavoz del Ejecutivo, Isabel Rodríguez, ha aclarado que la intención es subir el salario mínimo a 1.000 euros en 14 pagas este 2022, recalcando que el SMI es «un elemento más en el avance por la dignificación de las condiciones laborales y de aquellos trabajadores más vulnerables».

La ministra portavoz ha incidido en que desde la llegada de Pedro Sánchez a la Moncloa el SMI ha subido 230 euros en tres años «Esta es la senda en la que hay que avanzar. Las cotizaciones sociales forman parte de la protección que después tenemos los trabajadores ante muchas contingencias y, por tanto, del anclaje fundamental del Estado del Bienestar que nos hemos dado», ha indicado.

El Ministerio de Trabajo y los citados agentes sociales volverán a reunirse este miércoles, a las 12.00. El Gobierno no está obligado a negociar el incremento del SMI, solo a consultarles, aunque el pasado 28 de diciembre el Consejo de Ministros aprobó la prórroga del SMI en 965 euros hasta que se produjera un nuevo acuerdo. CEOE y Cepyme tampoco apoyaron la última subida.