Cinco minutos de avalancha blanca tumban a la Real en el Santiago Bernabéu
Los donostiarras se han adelantado gracias a un penalti de Oyarzabal, pero dos zapatazos de Camavinga y Modric han volteado el marcador antes del descanso. En la segunda parte Benzema –desde los once metros– y Asensio han remachado el 4-1 definitivo.
La Real ha cerrado este ciclo de partidos con una derrota en el campo del Real Madrid, una de las célebres ‘visitas al dentista’ de las que hablaba Joaquín Caparrós. Los donostiarras se han adelantado muy pronto, pero el Madrid ha volteado el marcador en cinco minutos de avalancha antes del descanso, y en la segunda mitad no había fuerzas para poner en apuros al líder.
Los blanquiazules mantienen la sexta plaza gracias a la derrota del Villarreal en El Sadar y a los 6 puntos cosechados ante Osasuna y Mallorca, y ahora tienen ocho días para recargar baterías y recuperar efectivos antes del derbi frente al Alavés en Anoeta.
Imanol ha cerrado este agotador e intenso tramo de temporada con cuatro cambios en el once que ganó a los bermellones. En lo táctico destacaba el doble lateral por la derecha, con el multiusos Zubeldia atrás y Zaldua por delante para cubrir la zona de Vinicius, en un 4-4-2 con Silva de enganche e Isak –que no jugó el miércoles– en punta. Además volvía Illarramendi.
Por su parte, Ancelotti no ha reservado de cara al encuentro de Champions del próximo miércoles ante el PSG –el Madrid tendrá que remontar un 1-0– y ha presentado su mejor once, con Camavinga para cubrir la baja de Kroos.
Primera llegada
La película no ha podido comenzar de mejor forma. En la primera llegada de la Real, Silva ha caído derribado por un pisotón de Carvajal, y el francotirador Oyarzabal ha batido a Courtois desde los once metros (0-1, 8’).
El gol reforzaba el planteamiento de Imanol. Los locales monopolizaban el balón, pero la Real aguantaba sin problemas a la espera de cazar alguna otra contra.
El primer susto serio para Remiro no ha llegado hasta el minuto 35, cuando Le Normand ha sacado un centro de Modric antes de que llegara Casemiro.
Pero todo se ha venido abajo en la recta final. Un zapatazo de Camavinga que se ha envenenado tras tocar en Illarra ha significado el empate (1-1, 40’), y ha sido como abrir la compuerta de una presa. Benzema ha vuelto a marcar un minuto después, pero estaba en fuera de juego por muy poco.
Remiro ha sacado un remate cercano y a la salida del córner siguiente, Modric ha recortado a Silva al borde del área y con la zurda la ha puesto donde tejen las arañas (2-1, 43’). Es lo que tienen los grandes pegadores del ring, dos directos a la mandíbula y su rival en la lona sin saber cómo ha llegado allí.
Cambio de plan, falta de fuerzas
Tras el descanso Imanol ha pasado al plan B, la que suele ser habitualmente su idea original. Ya no valía con aguantar. Pacheco ha dejado su sitio a Naïs, que se ha ubicado como atacante derecho, Zubeldia se ha colocado como central y Zaldua como lateral. Además, Rafinha ha salido por Silva en la mediapunta.
Benzema y Casemiro, este de libre directo, han hecho trabajar a Remiro. El Madrid, con más espacio, seguía apretando, a la caza y captura de la sentencia. Benzema ha vuelto a marcar, pero nuevamente se ha topado con el VAR, en forma de fuera de juego de su compañero Rodrygo.
La Real no creaba peligro y la puntilla ha llegado desde los once metros. Aritz Elustondo, que había entrado por Zaldua, ha derribado al habilidoso Vinicius al filo del abismo, y ya se sabe que en el Bernabéu reza el latinajo ‘in dubio pro merengue’, en caso de duda se barre para los de casa. El videoarbitraje ha visto la falta sobre la raya y Benzema no ha perdonado (3-1, 74’).
El partido estaba finiquitado, pero aún faltaba un cuarto de hora de sufrimiento. Carvajal se ha sacado de la chistera un pase de la muerte para que Asensio aumentara la cuenta (4-1, 78’) y Naïs se ha retirado lesionado con molestias en la parte posterior del muslo, quedándose el equipo con diez. Datos del partido