Después de ganar el miércoles, los vascos de la ACB sueñan con volver a ganar el domingo
Surne Bilbao Basket visita a las 13.00 la difícil cancha de Gran Canaria tratando de exprimir sus opciones de acercarse al Top 8 de la competición. Bitci Baskonia se las verá a las 18.30 frente a Valencia Basket con la idea de reducir las distancias sobre los primeros clasificados.
La victoria en la jornada entre semana ha abierto para Bitci Baskonia y Surne Bilbao Basket la oportunidad de seguir peleando en lo que resta de Liga Regular de la ACB. Los gasteiztarras ya se han situado en séptima posición, con la amenaza de la novena plaza de UCAM Murcia y Gran Canaria con solo un triunfo menos, pero al mismo tiempo, con Baxi Manresa, Valencia Basket, Lenovo Tenerife y Joventut a solo dos victorias de distancia. En lo que compete a Bilbo Basket, sus dos últimas victorias sobre Valencia Basket y Real Madril han certificado de manera casi matemática su permanencia, pero además le supone un aliciente disponer de una pequeña opción de colarse en el Top 8, ya que UCAM Murcia, ubicado por el momento en el filo de los play-offs, está a solo dos victorias d diferencia.
No son más que castillos en el aire ponerse a elucubrar lo que pudiera suceder en caso de ganar y de cara a las jornadas que restan, pero cuando el futuro inmediato se afronta como una ilusión resplandeciente y no una condena, es un primer paso para un porvenir venturoso.
O eso quisieran los equipos vascos de la Liga ACB, que presentan sendos partidos ante rivales más que directos. A las 13.00 –horario de Euskal Herria–, Bilbao Basket se las verá en la cancha de Gran Canaria, un partido que pudiera descolgar a los bilbainos de la pelea por el Top 8 o, en caso contrario, aparte de darle a los de Mumbrú un poco más de aire de cara a la recta final de la Fase Regular, de paso le supondría un favor para Saski Baskonia.
Por su parte, los gasteiztarras reciben a las 18.30 a un Valencia Basket que viene de caer en las canchas de Bilbao Basket y Betis en sus dos últimas jornadas, dando la impresión de que los pupilos de Joan Peñarroya tienen la mente más puesta en sus inminentes eliminatorias de la Eurocup –dado que la clasificación del AS Mónaco para los play-offs de la Euroliga ha limitado únicamente el campeón de la Eurocup el pase a la Euroliga 2022/23– que en la competición doméstica.
Una visita compleja
Visitar la cancha del Gran Canaria, ya fuera la antigua «Roca» como este Gran Canaria Arena, ha supuesto un suplicio para Bilbao Basket. Los hombres de negro se han impuesto en muy pocas ocasiones en el feudo «¡pío, pío!» y este mediodía no parece ser menos.
Una vez superada la emoción por el triunfo ante el Real Madrid y el posterior homenaje a Alex Mumbrú, habrá que ver si los bilbainos afrontan este partido de bajón o si han podido recargar su tensión competitiva.
Ya en el partido de la primera vuelta, los vizcainos ganaron a los pupilos de Porfi Fisac por 95-90, dentro de la famosa racha de siete victorias que tuvo Bilbao Basket en la recta final del año pasado y el inicio de 2022. Cierto es que los grancanarios llegaron al Bilbao Arena en un punto de juego muy bajo –tanto es así que se quedaron sin poder disputar la Copa– y en esta segunda vuelta, en su enloquecida carrera por meterse en el Top 8, los discípulos de Fisac han demostrado una mejoría más que notable, con Andrew Albicy y Pustovyi erigidos como los principales referentes del perímetro y el juego interior grancanario, respectivamente.
Bilbao Basket, con la única duda de Alex Reyes ya que sufrió un esguince de tobillo en el duelo del miércoles, ha vuelto a recuperar la calma tras encadenar las citadas dos victorias que tanto necesitaba para asegurarse un espacio en la Liga ACB de la próxima campaña. Asimismo, hay que recordar que los hombres de negro tampoco han brillado mucho lejos de casa, al punto de que solo han sumado tres victorias a domicilio.
«Consistencia», palabra clave
El triunfo por 93-83 sobre UCAM Murcia ha supuesto un espaldarazo de confianza para Saski Baskonia. Ante un rival tan pestoso como el cuadro pimentonero, los de Neven Spahija tuvieron que hacer un acto de resistencia continua, con un quinteto titular exprimido hasta casi el exceso.
Y es que, si bien entre Enoch, Fontecchio y Baldwin los gasteiztarras sumaron 71 de los 93 puntos –y de los 22 restantes, 14 los anotó Alec Peters–, se echó de menos mayor aportación de los suplentes. Entre Granger, Kurucs, Sedekerskis y Marinkovic, los de Spahija solo anotaron cuatro tiros libres y muy poca aportación más. Así las cosas, el quinteto titular compuesto por Baldwin, Giedraitis, Fontecchio, Enoch y Peters tuvo que exprimirse con más de 30 minutos cada uno.
Porque si bien la mirada gasteiztarra se sitúa por encima de su séptima posición provisional, la ubicación clasificatoria del cuadro baskonista sigue pendiendo de frágiles hilos. «No podemos perder partidos si queremos jugar el play-off», ha advertido a sus jugadores Neven Spahija en la previa del duelo que arrancará a las 18.30 en el Buesa Arena.
Para ello, el preparador de Sibenik ha subrayado que «debemos ser más consistentes durante todo el partido y mejorar nuestra defensa».
No ha aclarado el técnico gasteiztarra si Matt Costello va a poder volver a las canchas después de perderse el partido ante UCAM Murcia. Lo cierto es que no les vendría nada mal una mano a Enoch, Peters y Sedekerskis ante una batería interior taronja tan extensa como la que forman Dubljevic, Labeyrie, Jasiel Rivero, Pradilla, Tobey y el propio Víctor Claver.
Por contra, la línea de creación de juego valenciana está bajo mínimos, con el islandés Martin Hermannsson y el canterano Guillem Ferrando como únicos armadores disponibles después de las lesiones de Dimitrijevic, Klemen Prepelic y un Sam Van Rossom que tal vez pudiera tener algunos minutos este domingo en Zurbano.
Quien no parece que vaya a debutar será Yannick Wetzell, recientemente fichado por Saski Baskonia. El neozelandés de pasaporte samoano ha sido bienvenido por Neven Spahija en su rueda de prensa. «Es un buen jugador que puede defender y hacer las cosas bien en ataque», ha resumido el croata, que ante todo ha admitido que «sumar un nuevo jugador a la plantilla siempre es bueno».