INFO

El kafkiano proceso de la justicia en Irán

‘EL PERDÓN’
Irán-Estado francés. 2020. 105’ Tít. Orig.: ‘Ghasideyeh gave sefid’. Dir.: Maryam Moghadam y Behtash Sanaeeha. Guion: Maryam Moghadam, Behtash Sanaeeha y Mehrdad Kouroshniya. Prod.: Etienne De Ricaud y Gholamreza Moosavi. Int.: Maryam Moghadam, Alireza Sani Far, Avin Poor Raoufi.

Maryam Moghadam interpreta a una viuda cuyo marido ha muerto en la horca. (NAIZ)

La actriz, guionista y realizadora Maryam Moghadam y el productor, realizador, guionista y montador Behtash Sanaeeha forman una premiada pareja del cine iraní desde que juntos hicieran el documental ‘The Invencible Diplomacy of Mr. Naderi’ (2018), en el que daban a conocer la curiosa figura de un ciudadano empeñado en influir por su cuenta y riesgo al acercamiento de posturas entre Estados Unidos y el estado islámico iraní.

Para contribuir a un encuentro entre Bush y Ahmadinejad, confeccionó una alfombra persa con los rostros de los presidentes estadounidenses y las banderas de sus estados, que bautizó como la Alfombra de la Paz. Ya con su ópera prima ficcional ‘El perdón’ (2020), la pareja lograría el premio a la Mejor Dirección Novel en la Seminci de Valladolid.

El guion, que también está escrito entre ambos, le toca más de cerca a ella, porque su padre murió en una ejecución política. La implicación personal va más allá, por cuanto Maryam Moghadam actúa en el papel principal.

Encarna a una joven viuda cuyo marido ha muerto en la horca, debiendo hacerse cargo de una hija sordomuda. Sin ayudas, es presionada por su familia política, que quiere que siga unida a ellos volviéndose a casar con el hermano del difunto. Lo que se perfila en principio como un drama familiar pronto deriva hacia la intriga kafkiana, mediante la introducción del tema de la justicia en Irán, en relación a los temas omnipresentes de la culpa y el perdón.

El principal testigo cuyo testimonio sirvió para incriminar al hombre ejecutado cambia su declaración, reconociendo que acusó a la persona equivocada y que el verdadero culpable es otro. Uno de los jueces quiere reparar el daño causado de forma paternalista y anónima, por lo que se presenta como un amigo del fallecido ante su viuda, dispuesto a pagar una supuesta deuda contraída con él.