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Sare: «Nos toca comenzar a sonreír, vamos bien, pero nadie dijo que iba a ser fácil»

Sare lleva a cabo este sábado en Donostia una jornada que mezcla reivindicación y fiesta, en forma de broche final a su campaña Izan Bidea. Una manifestación ha partido desde Pío XII y ha subido a Illunbe, donde habrá conciertos esta tarde. 

Joseba Azkarraga y Bego Atxa, en el acto que ha tenido lugar en Ilunbe. (Idoia ZABALETA | FOKU)

Una marcha convocada por Sare ha partido este mediodía de la plaza Pío XII de Donostia para volver a exigir el fin de una política penitencia de excepción para con las presas y presos políticos vascos, y al mismo tiempo agradecer su labor a todas las personas que durante décadas han estado trabajando para que se respeten sus derechos.

Con anterioridad, el Boulevard ha sido el escenario de los últimos kilómetros de la iniciativa Izan Bidea, que se presentó en mayo de 2020 y cuyo objetivo era recorrer 3.127.326 kilómetros, que es el número de habitantes que tenía entonces Euskal Herria, como símbolo de un trayecto conjunto, «el camino a casa, el camino hacia la convivencia, el camino hacia la paz».

 

«Las familias y amigos merecen un monumento»

Entre las manifestantes había personas que han estado presas durante largos años en cárceles lejanas, como un hernaniarra que ha compartido con NAIZ sus sentimientos. «Es imprescindible realizar este tipo de movilizaciones porque se está acabando la dispersión pero hace falta un empujón para traer a las presas y presos a casa».

Este vecino de Hernani ha visto cómo han sufrido sus allegados «porque les ha tocado la parte más dura de la dispersión». Él ha conocido unas ocho prisiones: Herrera de la Mancha, Puerto II, Cartagena, Navalcarnero, también en el Estado español. «Tú estás en prisión y no hay duda, mejor si estás en Euskal Herria, pero le haces frente con tus medios. Pero las familias y amigos tienen que andar en la carretera haga buen o mal tiempo. Merecen un monumento».

Ha relatado que al preso le genera una gran ansiedad que sus personas queridas recorran tantos kilómetros en las visitas: «¿Ya llegarán? Han llegado. Luego tienen que volver. Cuando estás preso tienes esa espada, pero tienes que intentar escapar porque si no te volverías loco. Tienes eso en la mente pero regresas del locutorio, si estas con los compañeros te sumerges en el día a día, pero los familiares deben completar otros cien, doscientos o mil kilómetros para regresar».

Ha agradecido la labor impagable que han realizado numerosas personas y organizaciones como Etxerat, Mirentxin o la misma Sare.

La gran movilización de este sábado estaba repleta de petos amarillos, muchas de ellas eran jóvenes como June, que ha comentado a NAIZ que si el contexto político fuera otro la celebración sería mayor pero que es verdad que el trabajo no termina nunca. «Hoy toca trabajo y mañana también. Pero tenemos ganas. Hoy no podremos disfrutar mucho pero entre los ‘txandalaris’ suele haber muy buen ambiente y lo pasaremos bien».

Ha solido visitar a un preso del pueblo y siempre ha tratado de poner su granito de arena y trabajar en favor de su vuelta a casa.

Esperanzada y emocionada

Amaiur, bilbotarra de 19 años, siempre ha conocido a su aita en prisión. Ha sido una de las manifestantes que ha sostenido la pancarta y ha admitido a NAIZ que estaba siendo un día de muchas emociones. «Vemos que se está acercando el final. Es tanta la gente está haciendo el camino con nosotras, y tenemos que continuar. Estamos pidiendo el final de la política de excepción y entre todas y todos es más fácil de conseguir».

Todavía queda mucho camino pero Amaiur está esperanzada y emocionada por el apoyo de la gente.

«Mi aita lleva 22 años preso. Ha estado en Valdemoro, Córdoba, Castellón, y ahora está en Logroño. Cuando estaba alejado suponía dejar de lado mi vida durante un fin de semana. Cuando era pequeña no entendía muy bien la razón. Los viajes de ahora es verdad que no tienen nada que ver con los que hacíamos antes, salimos de casa por la mañana y volvemos para la hora de comer, cosa que antes era impensable. Eso tendría que ser lo normal, pero hemos normalizado la dispersión durante todos estos años, y ahora es increíble», ha declarado.

Su padre cumplirá el año que viene las tres cuartas partes de la condena y debería salir libre. Sin embargo, aún no le han admitido ni los permisos. «En esta nueva etapa toca luchar para la progresión de grados y los permisos». 

Final en Illunbe

La movilización de este sábado, con el lema ‘Etxera bidea gertu’, ha finalizado en el exterior de la plaza de Illunbe, donde Bego Atxa y Joseba Azkarraga, portavoces de Sare, han dado lectura a un comunicado en el que han destacado que se ha alcanzado «el reto que nos propusimos hace más de dos años» para reclamar que «nuestro país tiene un problema irresuelto» con la situación de sus presos, exiliados y deportados.

«Sonriamos, porque vamos bien. Vamos cumpliendo etapas y lo estamos haciendo juntos y juntas. Porque solo así lo vamos a conseguir. Nadie nos dijo que esto sería fácil. Sabíamos que ir poniendo fin a la vulneración de derechos que llevan padeciendo los presos y presas vascas desde hace décadas iba a ser difícil, pero poco a poco, vamos quemando etapas. Es un hecho innegable que los presos y presas hoy están más cerca de sus casas», han añadido.

No obstante, han denunciado que todavía existen «más de cincuenta razones para decir que la política de alejamiento aún no ha terminado. Es por ello que no podemos bajar la guardia, ni relajarnos. Vamos bien, sí, pero aún nos quedan muchas etapas que ganar».

En este trayecto han destacado la importancia de conseguir «la unanimidad sindical y de la mayoría política vasca con respecto a nuestros objetivos. Hemos remado en la misma dirección, fraguando alianzas y podemos alegrarnos por los logros que vamos alcanzando en este largo camino hacia la paz y la convivencia».

La intervención ha finalizado con un llamamiento a acudir a Bilbo para la manifestación del próximo 7 de enero. 

Terminado el acto se han abierto las barras y el espacio de almuerzo antes del festival de música que ha comenzado a las 15.30 y se alargará hasta la madrugada. 

 

El PNV hace suya la reivindicación pero no asiste

Esta mañana el PNV ha hecho público un comunicado en el que hace suya «la reivindicación de Sare respecto a la derogación de la legislación penitenciaria que vulnera los derechos de las personas presas», aunque ha recordado que el pasado enero anunció que «no asistiría más a este tipo de movilizaciones, y que trabajaría desde el acuerdo político y parlamentario».

Sare ha acogido con agrado ese apoyo de los jeltzales. «No dudábamos de esa posición del PNV ni tampoco de su compromiso de seguir trabajando para terminar, como ellos dicen, la legislación de carácter excepcional. Aparte hay otra decisión, la de no enviar ninguna delegación a esta manifestación, pero eso entra dentro de la estrategia de los partidos políticos que nosotros respetamos», ha declarado Joseba Azkarraga al inicio de la marcha, al ser preguntado por la cuestión.