Los memorialistas no se rinden en Madrid; otro intento de cambiar las calles franquistas

La plataforma que reúne a decenas de colectivos ha anunciado una propuesta para cambiar los nombres de seis calles que el año pasado el Gobierno del alcalde Almeida permitió que vuelvan a tener denominación franquista. Los concejales de PSOE y Más Madrid lo apoyan y todo depende de Ciudadanos.

En agosto del año pasado, la memoria histórica de la ciudad de Madrid se vio humillada cuando el Gobierno del alcalde José Luis Martínez-Almeida (PP) hizo caso al fallo del Tribunal Superior regional de reponer los nombres franquistas a algunas calles que durante el mandato de Manuela Carmena habían sido cambiados. Pudo evitarlo manteniéndolos mediante una proposición ordinaria municipal, pero no quiso.

Esto puso en pie de guerra a los colectivos de memoria, que desde entonces no cesan de organizarse en conjunto y realizar actividades, manifestaciones y acciones de concienciación en los barrios de las calles afectadas. La más emblemática de ellas es la de Maestra Justa Freire, lo que ha hecho que la plataforma lleve su nombre. Esta trabajadora de la educación, creadora de las «comunidades familiares» durante la guerra y represaliada por el franquismo, fue quitada para volver a poner el nombre del jefe de prensa del bando golpista y fundador de la Legión, Millán Astray.

Los colectivos se han reunido este jueves en el edificio que alberga a los grupos municipales y ofrecido una rueda de prensa en la que han anunciado el impulso a una nueva proposición de ley por vía ordinaria (los cambios en la etapa Carmena fueron por aplicación de la ley de Memoria Histórica estatal y con una justificación que el Tribunal Superior tumbó). El proyecto busca devolver los seis nombres que la Justicia depuso y Almeida permitió con el trámite legal simple del voto de los concejales.

Los memorialistas han anunciado que los grupos del PSOE y de Más Madrid han aceptado presentar esta proposición en el pleno del próximo martes y el Grupo Mixto (una escisión del errejonismo que están divididos entre sí pero son todos de izquierdas) también ha avanzado que lo apoyará.

Todo queda en manos del Cs de Villacís, que en materia de memoria histórica se escora a la derecha

Todo queda por tanto en manos de los ediles de Ciudadanos, liderados por la vicealcaldesa Begoña Villacís, que en materia de memoria histórica suele escorarse a la derecha y en repetidas oportunidades ha dicho que no cuenten con su grupo para «una vuelta atrás en la historia».

Ante una pregunta de NAIZ, Pedro Casas, del Movimiento Vecinal de Carabanchel y quien viene liderando la batalla por la recuperación de los nombres en el callejero, ha informado que su colectivo pidió reuniones con todos los grupos políticos «excepto con Vox». «Los del PP nunca nos respondieron, y en cuanto a Ciudadanos, nos recibió el presidente de la Junta Municipal de Latina, que es de Cs, pero no los concejales», ha respondido.

Tanto el PSOE como Más Madrid y el grupo Mixto sí tuvieron un encuentro con este colectivo (Podemos no tiene representación en el consistorio) y la aritmética parlamentaria permitiría que una abstención de Ciudadanos y el voto de las izquierdas alcance para borrar del callejero de Madrid al menos seis calles con nombres franquistas.

Se da por descontado el voto negativo de Vox y algunos memorialistas creen que el PP puede dar la sorpresa. En 2017, con Carmena, los «populares» se abstuvieron, pero hoy la situación es distinta. «Están en una guerra por el voto más escorado a la derecha y se están buscando perjudicar entre sí», dice una fuente de uno de los concejales progresistas preguntada por NAIZ, al referirse a la situación entre PP y Vox (los ediles de ultraderecha permitieron el ascenso de Almeida, que no había ganado las elecciones, con su abstención en 2019).

El moderador de la rueda de prensa, Alberto Pérez (Fundación Angel Llorca), ha querido recalcar que el suyo se trata de un «movimiento transversal y horizontal, que no va de derechas o izquierdas». Además, remarca que el mural que homenajea a Justa Freire en la calle que llevaba antes su nombre hecho por un grupo anónimo durante una madrugada «ha sido vandalizado varias veces» y se han dejado frases amenazantes sobre él. También ha comentado el silencioso movimiento ciudadano que empieza a despertar en torno al tema de las calles: señala que en ocasiones, tras el vandalismo sobre el mural, aparecen intentos de reparación y limpieza anónimos por vecinos del barrio (al sur del río Manzanares en la zona históricamente obrera madrileña).

Isabel Galvín: «Madrid no se merece calles dedicadas al ocio y sí en memoria una maestra como Justa Freire»

Isabel Galvín, representante en la plataforma por CCOO Madrid, ha destacado que la capital del Estado «no tiene ninguna calle con nombre de maestra y tiene una que merece ser recordada porque es referente internacional». Y ha enfatizado que no se trata de «valores partidistas sino [que representa] valores universales que toda ciudad que decida ser democrática y ser digna merece recordarlos». Ha añadido: «Madrid no se merece calles dedicadas al odio, se merece la memoria de una maestra como Justa Freire».

Las otras cinco calles en cuestión son la de Hermanos García Noblejas (falangistas y combatientes de la División Azul), Crucero Baleares (buque de los sublevados), Cirilo Martín (alcalde franquista), José G. Carranza (torero cercano a Queipo de Llano) y Caídos de la División Azul (los enlistados para combatir a favor de los nazis en la II Guerra Mundial).