Abde saca del lío a un Osasuna que se ha complicado el pase a octavos frente al Nàstic

Osasuna estará este sábado en el bombo de los octavos coperos, pero no sin sufrimiento. Los rojillos han necesitado de la prórroga y de estar en superioridad numérica durante casi tres cuartos de hora para doblegar al Nàstic.

Los resultados de la jornada copera de ayer ya aventuraban que no iba a ser un paseo el partido en el Nou Estadi, pero es que Osasuna ha sufrido lo suyo para dejar en la cuneta a un Nàstic que ha peleado hasta la extenuación.

Y es que la escuadra navarra ha necesitado de media hora extra, de un rival en inferioridad numérica y de un Abde en estado superlativo para superar la eliminatoria.

El internacional marroquí ha impulsado a los rojillos cuando más lo necesitaban con sus acometidas por el costado izquierdo y de una acción individual suya ha llegado el gol que ha decantado el pase.

Los locales han iniciado el choque con cierta dosis de desparpajo, Osasuna no ha tardado en hacerse con el control de una primera parte, en la que solo han pasado cierto peligro en sus últimos minutos.

Apenas les ha costado un cuarto de hora a los rojillos poner tierra de por medio, mediando previamente el aviso navarro con un gran empalme de Chimy Ávila que ha escupido el poste cuando ya se cantaba el 0-1.

Eso ha sido en el minuto 12 y, cuatro más tarde, Kike García no ha perdonado el doble fallo consecutivo de la defensa granota al no pocer sacar con eficacia de su área un centro desde la izquierda de Rubén García.

Con el electrónico a su favor, Osasuna se ha manejado con soltura, casi siempre en campo contrario, y ha podido duplicar su ventaja, pero esta vez el delantero conquense no ha estado tan preciso y su remate intencionado con el exterior ha salido lamiendo el palo.

Fruto de la relajación rojilla y de que el Nàstic ha apretado por el marcador adverso, los últimos compases del primer periodo han sido los más complicados para los pupilos de Jagoba Arrasate.

El exrojiblanco Guillermo, quien más quebraderos de cabeza le ha generado a la defensa visitante, ha peinado de cabeza en el 45 que ha tocado en un rival y, en el posterior corner, Montes ha rematado con la testa a las manos de Herrera, en la única intervención del guardameta burgalés.

Reacción local

El triple cambio del técnico local, Raúl Agné, ha propiciado una mejor imagen de los anfitriones, al mismo tiempo que el envite ha comenzado a entrar en una fase más enredada, poco propicia para los intereses osasunistas.

Al mismo tiempo, se ha producido en el 60 la lesión muscular de Rubén Peña, lo que dejará probablemente al cuadro navarro sin laterales derechos específicos para el duelo de San Mamés el próximo lunes.

El abulense, además, se ha llevado la amarilla al encararse con el público en su reemplazo por el canterano Diego Moreno, con quien se había especulado que podía ser titular precisamente para evitar el problema mencionado.

Arrasate ha movido banquillo para que el encuentro no se fuera de las manos, sacando a Aimar para disponer de más control del esférico y a Abde buscando un mayor filo por banda.

Sin embargo, la decisión no ha podido evitar el empate catalán, nacido de un segundo centro tras saque de esquina, que ha cabeceado Pablo Fernández tras ganar en el salto a Darko.

El preparador vizcaino ha reaccionado dando entrada a otros dos titulares –Moi Gómez y Budimir– para enmendar una situación que ha ido variando a peor conforme pasaban los minutos.

El duelo ha dado un nuevo giro cuando una protesta airada del autor del gol local, Pablo Fernández, le ha costado la segunda amarilla en el 84. En superioridad numérica, Osasuna ha encerrado al Nàstic en su área intentando evitar la prórroga.

Darko con un chut arriba (m.90+4) y un testarazo de Budimir (m.90+5) han podido evitarlo, pero no han estado acertados y los rojillos se han visto obligados a afrontar el tiempo extra.

Esa media hora añadida se ha convertido en un monólogo navarro, con Abde como gran protagonista, al estar en varios lances muy cerca de lograr la segunda diana, desbordando constantemente por la banda zurda, pero sin la eficacia final necesaria.

Al final, ha tenido que ser el internacional marroquí quien, en su enésima individualidad, se ha marchado en velocidad de su par dentro del área y su centro lo ha introducido en propia puerta Montes en el 113.

Los rojillos han fallado varios remates para finiquitar la eliminatoria –especialmente una contra muy clara– y se han complicado la vida en el último suspiro con la expulsión de Pablo Ibáñez, pero han sabido materializar un pase bastante apurado.

Arrasate: «No estoy contento»

Pese a superar la eliminatoria, Arrasate ha admitido no estar «contento con el partido» de los suyos, diseccionándolo según las diversas por las que ha transcurrido el envite en el Nou Estadi.

«En el primer tiempo hemos estado bien, me ha gustado y hubiésemos podido hacer el segundo gol. En la segunda parte, en cambio, no hemos estado bien y se ha complicado con interrupciones y ha llegado su gol. Después, 11 contra 10, hemos decidido ir a por todas», ha explicado.

Además, ha añadido que su conjunto «vivió momentos tensos», aunque ha considerado que es «algo normal». A su juicio, ha sido un alivio «marcar en la prórroga para evitar los penaltis».

Respecto al Nàstic, el técnico osasunista se ha deshecho en elogios. «Ha estado al nivel que esperaba, creo que es un grandísimo equipo, sobre todo ante su afición. El Nàstic tiene gente muy buena en ataque y le auguro una gran segunda vuelta en Primera Federación», ha vaticinado.