Los barrios del sur de Bilbo se movilizan ante el «ninguneo» institucional de décadas

Los barrios del sur de Bilbo están hartos de que las instituciones gobernadas por PNV y PSE no atiendan sus reivindicaciones históricas mientras sufren el deterioro de su calidad de vida por ese abandono. Han conformado una plataforma para reclamar soluciones a «necesidades acuciantes».

Los colectivos que reivindican la construcción de la línea 4 de metro y el derribo de la autopista sobre Errekalde se han unido con una decena de asociaciones vecinales para conformar la Plataforma Barrios del Sur de Bilbao con el objetivo de defender la «dignidad» de estos barrios ante el «ninguneo que padecemos desde hace décadas».

En su presentación, se han quejado de que las inversiones millonarias que anuncian desde la Diputación vizcaina y Consistorio bilbaino no llegan a unos barrios habitados por cerca de 70.000 personas. «No podemos esperar más, exigimos –han enfatizado José Luis Padilla y Ana Blanco, que han ejercido de portavoces– la realización inmediata de las infraestructuras que llevamos muchos años esperando».

Entre esos proyectos prometidos y no ejecutados se encuentra la construcción de la línea 4 de metro Errekalde-Moyua-Matiko o el derribo de la autopista. Demandan inversiones para revitalizar unos barrios que languidecen, o que se mejoren servicios básicos como el alumbrado, limpieza, mantenimiento de jardinería, salubridad y aparcamiento

Décadas de abandono

La plataforma exige que «de una vez, esta zona se ponga en el mapa institucional y se hagan las inversiones públicas que mejoren la calidad de vida de nuestros barrios». Han citado ámbitos como el de la movilidad y las conexiones del transporte público; la accesibilidad a los barrios altos mediante elementos mecánicos»; y que se aumente la oferta educativa y se arreglen los propios centros donde se imparte. No se han olvidado de pedir que se ponga fin al «continuado deterioro de la atención sanitaria» en los centros de salud.

Se sienten olvidados frente a las inversiones millonarias para impulsar la ciudad de servicios y turística en que se ha convertido Bilbo. «Los barrios no contamos. Lo nuestro son gastos, lo otro inversiones», han denunciado, hartos de muchas promesas y pocas actuaciones.

Los colectivos vecinales denuncian el «desprecio a la participación ciudadana» por parte de PNV y PSE, que les llevó hace tiempo a no participar en el consejo de distrito. Esperan que los responsables políticos recapaciten, aunque no son muy optimistas. No ocultan su «hartazgo» por no ver atendidas sus peticiones y limitarse las autoridades municipales a explicar los proyectos que van a ejecutar.

Cansados de promesas y excusas, han constituido la plataforma para emplazar a las instituciones. Blanco ha recordado que todos los logros conseguidos en barrios como Irala, Errekalde, Larraskitu, Uretamendi, Betolaza, Aratzu Goikoa, Artatzu Behekoa, Iturrigorri-Peñaskal, Torre Urizar y San Adrián han sido posibles gracias a la lucha del movimiento vecinal. «Nos ha unido el hartazgo ante el ninguneo», han subrayado.

Esta tarde tendrá lugar una presentación pública de la plataforma, a las 19.30, en el centro municipal de Errekalde y para el sábado 18 de marzo anuncian una manifestación. «No estamos dispuestas a seguir siendo una zona ninguneada por nuestras instituciones públicas», han advertido.