La coalición de los Leopard se moviliza y el fabricante ofrece producir más
La coalición para mandar carros de combate Leopard a Ucrania ha movilizado 43 tanques en las reuniones de los últimos días de los ministros de Defensa a nivel de la OTAN, mientras la empresa alemana fabricante de estos tanques, Krauss-Maffei Wegmann, se ha ofrecido a aumentar la producción.
La coalición de los Leopard se ha movilizado para enviar a Ucrania 43 carros de combate de ese tipo, mientras el fabricante de estos tanques se ha ofrecido para producir más si fuera necesario.
De la cita de ministros de esta semana en Bruselas han salido compromisos que estarían por debajo de las previsiones iniciales de Berlín, en el centro de la coalición para los tanques, cuando apuntó al escenario de movilizar tanques para formar dos batallones: esto es, entre 70 y 80 carros de combate.
Por lo pronto, el ministro de Defensa germano, Boris Pistorius, ha confirmado que Alemania aportará 14 carros de combate Leopard del modelo 2A6, el mismo tipo que propone Portugal, que contribuirá con tres tanques más de este tipo. El Leopard 2A6 se trata de un modelo más moderno que los 2A4 que movilizarán otros aliados, entre ellos el Estado español.
Es el caso de Polonia, uno de los más activos en el suministro de armamento a Ucrania, cuyo viceministro de Defensa, Mariusz Blaszczak, ha anunciado el envío de 14 carros de combate, en un paso conjunto con Noruega y Canadá.
El país nórdico movilizará un paquete militar que incluye ocho unidades de Leopard 2 y otros cuatro tanques de menor tamaño, junto a repuestos y suministros, según ha confirmado el Ministerio de Defensa noruego. Por su parte, la ministra de Defensa de Canadá, Anita Anand, ha asegurado antes de la reunión una oferta para mandar cuatro Leopard 2 a Ucrania. «Esperamos que el papel que jugamos inspire a otros países a seguir esta línea», ha afirmado.
Aparte de estos compromisos, Alemania, Dinamarca y Países Bajos trabajan para desplegar al menos 100 tanques Leopard del modelo más antiguo 1A5, mientras que países del este de Europa como República Checa, Polonia y los bálticos van a facilitar el tanque soviético T-72 y el postsoviético PT-91.
«Esto no cambiará las reglas del juego, pero ayuda a mantener la dinámica de apoyo. Ucrania necesita armas y se necesitarán más tanques, pero el tabú se ha roto», explica una fuente aliada sobre el paso dado con los tanques.
El objetivo de estos envíos es formar batallones de carros de combate occidentales, como ha explicado el ministro de Defensa ucraniano, Oleksi Reznikov, quien ha pedido «decisiones prácticas» al Estado español y los aliados que han prometido tanques a Kiev.
Dudas españolas
Por su parte, la ministra española de Defensa, Margarita Robles, ha evitado concretar cuál será la aportación del Estado a la coalición de los tanques, insistiendo en que sigue pendiente de los trabajos de reparación y rehabilitación que lleva a cabo la empresa Santa Bárbara en cinco carros de combate Leopard 2A4.
En lo que sí participa activamente Madrid es en la formación de soldados ucranianos para manejar los Leopard. Un nuevo contingente formado por 125 militares ucranianos llegó ayer al Estado para perfeccionar su formación, 55 de ellos para instruirse en el uso de esos carros de combate Leopard.
Este contingente se desplazará a Zaragoza y el resto, 70 soldados, estarán en Toledo, donde la Unidad de Formación de Combate se encargará de capacitar en atención sanitaria a un grupo, y en desminado y combate contra artefactos explosivos improvisados a otros dos, según ha explicado el Ministerio español de Defensa. Se trata del tercer grupo de jóvenes ucranianos que recala en Toledo para recibir formación militar.
Posible aumento de la producción
Ante el empeño de utilizar tanques Leopard 2 en la guerra de Ucrania, la empresa alemana que los fabrica, Krauss-Maffei Wegmann (KMW), se ha ofrecido a aumentar la producción si hay una petición política al respecto.
El consejero delegado de KMW, Ralf Ketzel, ha afirmado que no hay problemas de suministro que compliquen un posible aumento de la producción. «Hasta el momento, nadie nos ha dicho que no fuese posible», ha declarado Ketzel. «Lo que necesitamos es un claro consenso político», ha apostillado.