El sistema de cuidados ante el 28M: méritos del PSE a UGT y el giro del PP hacia «Zaintzaketa»
Maite Peña (PNV), Olaia Duarte (EH Bildu), Susana García (PSE), Víctor Lasa (EP-IU) y Mikel Lezama (PP) se han sentado a hablar sobre políticas sociales, sobre un sistema de cuidados que debe cambiar para cumplir una manida promesa: la de no dejar a nadie atrás.
Gipuzkoa luce fama de ser vanguardia y modelo en lo que a políticas sociales se refiere. Para el PNV y el PSE, es un sello de su Gobierno foral. Para EH Bildu y Elkarrekin Podemos-IU, una falsa postal a la donostiarra a la que hay que darle la vuelta. Y, por raro que parezca, el PP intenta hacer amigos en el haz y el envés de la política autonómica.
La precampaña está servida, y responsables de los cinco principales grupos políticos que presentarán su candidatura a las elecciones municipales y forales del 28M se han sentado a hablar sobre políticas sociales. Maite Peña (PNV), Olaia Duarte (EH Bildu), Susana García (PSE), Víctor Lasa (EP-IU) y Mikel Lezama (PP) han participado este martes en Donostia en el debate electoral organizado por la Coordinadora de ONGD de Euskadi y Sareen Sarea.
El debate se ha centrado en un mantra que jamás se ha cumplido en política: el compromiso de «no dejar a nadie atrás», que una vez más todas las formaciones han vuelto a adquirir, a pesar de que la siguiente legislatura, al igual que esta, estará condicionada por las múltiples crisis que se vienen encadenando una tras otra desde 2008.
Estas crisis afectan también a Gipuzkoa que, aunque es cierto que es la provincia «con menos peligro de pobreza en el Estado español», ha apuntado Duarte, «los ciudadanos en exclusión social están cada vez peor, una de cada diez personas en Hego Euskal Herria no puede calentar su casa y el 15% de la población está en situación de pobreza». «Estamos dejando atrás a mucha gente», ha enfatizado.
Maite Peña, Diputada de Políticas Sociales en Gipuzkoa, ha sido quien ha tenido la llave en los últimos ocho años para revertir esta situación y transitar «hacia un nuevo modelo» de políticas sociales que ha defendido. Y la ha utilizado, ha asegurado, porque la senda hacia ese nuevo modelo está abierta con la Agenda 2030 y tres programas que ha destacado: Adinberri, programa «que busca anticiparse a los retos de envejecimiento de la sociedad», los ecosistemas locales de cuidados puestos en marcha en 14 municipios, donde cooperan instituciones y sistemas sanitarios y sociales, y Elkarrekin Lanean, programa para fomentar el empleo de las personas en exclusión social.
Los cuidados a debate
Esta transición pedalea también sobre el II Plan de Servicios Sociales de Lakua que, para EH Bildu, ha supuesto «una decepción», sobre todo en lo referente a «brecha social y brecha de género» en el sistema de cuidados. «Decía Maite Peña que avanzamos en el sistema de cuidados y sí, estamos avanzando a peor, porque nos están encaminando más a la privatización y a la precariedad de las mujeres que trabajan en el sector. El plan estratégico plantea como modelo estructural el modelo cheque-servicio. La administración le da dinero a una familia para complementar lo que cuesta una plaza en una residencia privada. Esto, por ejemplo, en Osakidetza, sería inimaginable; que alguien tenga que operarse de las varices y que el médico le diga ‘tenga, le doy 800 euros para que se pague la operación en una clínica privada’», ha ahondado la concejala del Ayuntamiento de Donostia.
El candidato a la alcaldía de Donostia por Elkarrekin Podemos, Víctor Lasa, también ha criticado la privatización del sistema de cuidados de la CAV –«cuando la motivación de quien nos cuida es beneficio, eso altera la naturaleza del sistema», ha valorado–, y ha rechazado que los socios de Gobierno, PNV y PSE, no han hecho más que «poner parches a un sistema disfuncional». ¿Qué propone Lasa? Que la gestión de las residencias para mayores sea 100% pública, lo mismo que la representante de EH Bildu y, por sorpresa, del PP.
En concreto, Mikel Lezama, candidato del PP a diputado general de Gipuzkoa, ha planteado un Osakidetza de servicios sociales, un «Zaintzaketa», y ha celebrado coincidir en el planteamiento con la coalición abertzale. «Me gusta que coincidamos, queremos lo mismo, otra cosa es la estrategia que tenga cada partido, pero esto es lo bonito de la política», ha dicho dirigiéndose a Duarte.
Ratios y realidades
Susana García ha defendido la manera de hacer del Gobierno que comparte con el PNV, no sin antes decir a la representante de EH Bildu que «nunca debemos aprovechar una crisis para desafiar lo establecido». La cabeza de lista por la circunscripción de Donostialdea ha tirado de muchas promesas y pocas concreciones, al asegurar que el PSE «posicionará a Gipuzkoa en la vanguardia de los cuidados con un nuevo modelo que se base en las personas, que dé respuesta a sus necesidades actuales, pero también futuras». Ha precisado, eso sí, que ante las necesidades que va a plantear el envejecimiento de la sociedad es necesario pensar en una nueva concepción de las residencias de las personas mayores. «Ello conllevará mejorar los ratios del personal; hacen falta más personas en el conjunto del sistema de cuidados», ha señalado.
Sin embargo, sobre la necesidad de aumentar ratios, Olaia Duarte ha recordado a García que el PSE aprobó en el Gobierno un decreto «que nos colocan en los ratios de los años 80» –según ELA, la ratio en Gipuzkoa es de 13 usuarios por trabajadora– y un convenio colectivo en las residencias del territorio «que sigue fomentando la desigualdad y que solo apoya el 8% de la plantilla de las auxiliares». García ha contestado a Duarte aplaudiendo el convenio colectivo suscrito únicamente por UGT y criticando de paso a los demás sindicatos: «Quien ha hecho bien ha sido UGT, me da igual el porcentaje de representación que tenga, luego lo firma la mayoría de las trabajadoras. Hay ciertos conflictos que me dan la sensación de que buscan otros intereses, que no son precisamente los que buscan las trabajadoras».
Maite Peña, por su parte, ha invitado a los representantes de la oposición a «bajar a la realidad». Y así ha sellado el buen hacer de su Gobierno: «En Gipuzkoa tenemos un modelo donde más del 86% de plazas en las residencias de personas mayores son concertadas. Tenemos los mejores ratios, los mayores salarios, tenemos prestaciones económicas…».