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Pensionistas muestran en las calles de Hego Euskal Herria su rechazo a «esta reforma»

Iruñea, Donostia y Gasteiz han sido escenario durante la mañana de este sábado de sendas manifestaciones de pensionistas para mostrar su rechazo a «esta reforma» y advertir de que la pensión mínima de 1.080 será insuficiente. En Bilbo se celebra a partir de las 18.00 horas.

Imagen de la manifestación celebrada en Donostia. (Gotzon ARANBURU/FOKU)

Su rechazo a «esta reforma» es lo que han mostrado los pensionistas vascos en las manifestaciones que han celebrado esta mañana en Iruñea, Donostia y Gasteiz, y a la que se sumará la que tendrá lugar esta tarde en Bilbo.

En la realizada en Iruñea, el portavoz de la plataforma de pensionistas de Nafarroa, Benito Uterga, ha advertido de que «la pensión mínima de 1.080 euros ya se ha quedado corta tal y como ha ido el coste de la vida» y ha adelantado su disposición de comenzar a exigir que esta se incremente hasta los 1.260 euros.

La reforma de las pensiones, ha reconocido, «tiene aspectos positivos» como la garantización este año del IPC, pero ha recordado que no ha sido así en los dos últimos años y ha exigido que se recupere este poder adquisitivo perdido.

Además, ha criticado, las futuras generaciones «tienen un problema enorme» debido a un sistema de pensión complementaria que ya existe hoy en día y está otorgando en las cotizaciones más altas 200 euros que «no pueden solventar el recorte que se está produciendo y va a seguir produciéndose en las pensiones nuevas que acceden al sistema público».

En un comunicado leído en castellano y euskara al término de la marcha, han denunciado que «esta no es la reforma» que vienen reclamando en las calles «desde hace más de cinco años», ya que aunque «incorpora ciertas mejoras», es «parte de un proceso de reformas que está recortando pensiones y derechos de las pensiones».

Han reclamado también las recuperación de la jubilación a los 65 años, los 15 años de cotización mínima necesaria para el cálculo de la pensión que con la actual reforma crecen hasta los 29 y la derogación de los coeficientes reductores de la jubilación anticipada con 40 años cotizados.

De igual modo han pedido «medidas efectivas para erradicar la brecha de género en salarios y pensiones» considerando que crear un complemento que aumenta para el 2024 y 2025 un 10% de la prestación por hijo es «insuficiente», así como que los planes de pensiones colectivos de empleo «coticen y tributen como rentas de trabajo».

Uterga ha reconocido que dan «muy poca credibilidad» a las promesas de campaña ya que en años anteriores «también ha habido promesas de cara al fortalecimiento del sistema público», pero «las presiones que se dan desde las esferas económicas, que son las que más condicionan, van en la dirección contraria» de «fortalecer los sistemas privados de pensiones».