El silencioso «boicot médico» de la Ertzaintza al Tour prolonga el conflicto
El boicot vía bajas médicas masivas de la Ertzaintza al Tour ha sido el elefante en el salón de estas tres primeras etapas. El Departamento lo ha logrado solventar movilizando otros efectivos, pero habría rondado el 50% en algunas comisarías.
«Sin acuerdo no hay Tour». Con esta tajante afirmación se echó al monte el colectivo asindical ‘Ertzainas en Lucha’ hace dos meses, en la manifestación ante San Mamés que reunió a unas 4.000 personas. Esa amenaza no se ha logrado llevar a efecto, pero no ha sido por falta de empeño.
A tenor de diversas fuentes sindicales y asindicales, el volumen de bajas forzadas en las consultas médicas estos días por estos ertzainas, sublevados para reclamar más dinero, ha rondado el 50% y ha tenido especial impacto en comisarías como Gasteiz, Eibar, Ondarroa o Irun.
Basta con señalar que algunos aficionados internacionales les ha sorprendido la escasa presencia policial en puntos de gran afluencia antes de la llegada del pelotón o que las partes protegidas con vallas han superado con creces lo habitual en estas grandes rondas, aspecto destacado en las retransmisiones televisivas especializadas.
Así las cosas, la revuelta ha tenido efecto a medias, puesto que se ha consumado pero no visualizado. La única expresión que ha llegado a los medios es la concentración que estos agentes llevaron a cabo el jueves, antes del acto de presentación del Tour en Bilbo.
Erkoreka: «Gente enfermiza»
Cuestionado al respecto tras la reunión del Consejo de Gobierno, el consejero de Seguridad de Lakua, Josu Erkoreka, ha insistido en que «todos los servicios de la Ertzaintza programados con motivo del Tour de Francia estuvieron garantizados», si bien ha reconocido que ha habido «más ausencias de las habituales».
Ha explicado que se trata de ausencias producidas «sobre todo por bajas médicas», que no se han dado por igual en todas las unidades. «Se ha tratado de un fenómeno concentrado en algunas unidades», ha aseverado, citando la Brigada Móvil, donde algunos apuntan que nació el movimiento ‘Ertzainas en Lucha’.
Asimismo, Erkoreka ha avanzado que la unidad de Asuntos Internos ha puesto en marcha una investigación para «aclarar lo ocurrido». «Después de este análisis tendremos una aproximación más certera de la realidad», ha remarcado, y ha ironizado con que «a lo mejor puede servir para descubrir que tenemos un índice de gente enfermiza en algunas unidades mayor de lo que pensábamos».
De cara a la negociación con los sindicatos, ha señalado que «una vez pasado el Tour se produce una circunstancia adecuada positiva para que las centrales que han abandonado la mesa regresen a la misma y retomen la senda de la negociación».
El viernes en Donostia, nuevo asalto
La llamada a la negociación del consejero coincide con el anuncio de una nueva protesta este viernes 7 de julio. Una caravana de coches recorrerá Donostia y podría tener especial impacto teniendo en cuenta los graves problemas de tráfico que ya presenta la capital guipuzcoana en estas fechas.
Tras este asalto del Tour, Ertzainas en Lucha ha emitido un comunicado este martes matizando que en realidad «queríamos que la prueba se celebrase» y que su eslogan «solo quería poner de manifiesto las carencias con que se iba a plantear la prueba ciclista».
Al respecto, se quejan de que el operativo improvisado por el Departamento tras la avalancha de bajas «ha dejado patente lo poco que le importa la gente que se encuentra bajo su mando. Agentes dejados en sus puestos con un botellín de agua y con la comida que han llevado de sus casas, agentes en formación (¡no en prácticas!) abandonados en sus puestos sin más cobertura, voluntarios que tras la finalización no pudieron contactar con sus coordinadores en el Whatsapp que les facilitaron si tenían problemas... ¿Estas son las condiciones laborales que ofrece el Gobierno Vasco a quienes trabajan para él? ¿Abandono y ninguneo?».