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Caída del Gobierno en los Países Bajos: ¿Y ahora qué?

Después de solo un año y medio en el poder, la coalición de Gobierno en los Países Bajos, encabezada por el primer ministro Mark Rutte, se ha desmoronado por cuestiones de inmigración, desencadenando elecciones prematuras con un resultado incierto para el país y para Europa.

el primer ministro, Mark Rutte, a su llegada al palacio real. (Robin UTRECHT | AFP)

Holanda, como muchos otros países de Europa, busca reducir su inmigración y este tema ha envenenado rápidamente las relaciones entre los cuatro partidos en el poder desde enero de 2022: el VVD (centro-derecha) de Mark Rutte, su primo ideológico del CDA , el D66 (centro-izquierda) y el Partido Demócrata Cristiano Christen Unie.

El año pasado, el país fue atravesado por un gran escándalo provocado por la saturación de los centros de recepción de migrantes, que obligaron a cientos de ellos a dormir en la calle, y la muerte de un bebé de 3 meses en uno de estos establecimientos en agosto de 2022. Mark Rutte había prometido actuar para poner fin a una «situación vergonzosa».

Durante la semana pasada y según los medios locales, el primer ministro sorprendió al llamar repentinamente a limitar el número de refugiados de guerra admitidos en el país a 200 cada mes, un plan que ha provocado la ira de sus socios, la coalición Christen Unie y D66.

Muchos han cuestionado por qué Rutte se arriesgó a torpedear a su coalición de esta manera, y la respuesta más probable parece estar relacionada con las tensiones en su propio partido por la inmigración.

Coaliciones inestables

La comisión electoral holandesa ha indicado que las próximas elecciones podrían tener lugar en noviembre como muy pronto debido, en particular, a las vacaciones de verano y a la necesidad de dar tiempo a los partidos para hacer campaña.

Estas serán las segundas elecciones generales en dos años en el país, gobernado por un complejo sistema multipartidista que a menudo produce coaliciones inestables.

A la última votación de abril de 2021 le siguieron 271 días de negociaciones, una duración récord, y desembocó en la llegada al poder en enero de 2022 de la actual coalición de gobierno, la cuarta liderada por Mark Rutte desde 2010.

Ganadores y perdedores

Todos los ojos están puestos en el incipiente Movimiento Campesino-Ciudadano (BBB, por sus siglas en inglés), que se ha basado en la protesta liderada por los agricultores contra los planes para reducir el tamaño de los rebaños para limitar las emisiones de gases de efecto invernadero.

Este partido, que surgió de la nada hace cuatro años, ganó la mayoría de los escaños en las elecciones al Senado de este año y su líder, Caroline van der Plas.

La extrema derecha del político islamófobo Geert Wilders y su Partido de la Libertad (PVV) ha sido durante mucho tiempo una fuerte fuerza política en el país, pero sus porcentajes han ido disminuyendo desde 2021.

Según los medios, los grandes perdedores de las próximas elecciones podrían ser el CDA del canciller Wopke Hoekstra y el D66 de su homóloga de Finanzas, Sigrid Kaag.

¿Un quinto mandato para Rutte?

La capacidad de supervivencia política de Mark Rutte le ha valido el apodo de «Mark Teflon», con escándalos deslizándose sobre él como una sartén antiadherente.

Sin embargo, esta vez podría toparse con un «problema» que resume así el medio holandés RTL: «¿Quién quiere seguir gobernando con Rutte?».

Sus socios le critican y la líder del Partido Campesino jura que nunca se uniría a una coalición con él en su seno.

Si el BBB reúne suficientes votos para exigir un lugar en una coalición, el VVD de Mark Rutte podría verse tentado a sacrificarlo para colocar a otro de sus miembros al frente del gobierno.

Alarma en Europa

Holanda podría servir como una llamada de atención para otros países europeos.

La Unión Europea está desgarrada por la acogida de miles de inmigrantes que quieren llegar al continente, en un contexto de auge de los partidos xenófobos.

La extrema derecha ya está en el poder en Italia y podría ser la co-ganadora de las próximas elecciones en el Estado español.