El Ejército apoya a los golpistas en Níger, suspende las instituciones y cierra las fronteras
El Ejército de Níger ha mostrado su apoyo a los golpistas que el miércoles detuvieron al presidente para «evitar un enfrentamiento mortal». La Junta militar ha suspendido las actividades de partidos e instituciones y ha cerrado las fronteras del país, para alarma de los socios occidentales del país.
El Ejército de Níger ha mostrado este jueves su apoyo a los militares golpistas que ayer detuvieron al presidente, Mohamed Bazoum, en Niamey. El jefe del Estado Mayor, general Abdou Sidikou Issa, ha argumentado que pretendía así «evitar un enfrentamiento mortal entre las diferentes fuerzas».
«El mando militar de las Fuerzas Armadas de Níger (FAN) ha decidido suscribir la declaración de las Fuerzas de Defensa y Seguridad», ha indicado una nota de prensa firmada por el Jefe del Estado Mayor, general Abdou Sidikou Issa.
Tras Mali y Burkina Faso, Níger, aliado estratégico de los países occidentales, y sobre todo del Estado francés, se convierte en el tercer país del Sahel en sufrir un golpe de Estado desde 2020. Los golpistas lo han justificado por «el continuo deterioro de la situación de seguridad y la mala gobernanza económica y social».
La Junta, autodenominada Consejo Nacional para la Salvaguardia de la Patria (CNSP), que reúne a todos los cuerpos del Ejército, la Gendarmería y la Policía, ha suspendido instituciones y las actividades de los partidos políticos, ha cerrado las fronteras y ha establecido un toque de queda entre las 22.00 y las 5.00.
Además, el Ejército ha acusado al Gobierno francés de violar los cierres fronterizos tras el aterrizaje de un avión de transporte militar de tipo Airbus A400 en el Aeropuerto Internacional de Niamey, y ha apelado, «de una vez por todas al estricto cumplimiento de las disposiciones» tomadas por la junta.
Manifestaciones de apoyo al golpe
Bazoum rechazó el golpe y aseguró que «los logros obtenidos con tanto esfuerzo se salvarán», pocas horas después de que su propia Guardia Presidencial lo detuviera.
«Somos las autoridades legítimas y legales», ha declarado en France 24 Hamoudi Massoudou, ministro de Exteriores y jefe del Gobierno interino, que ha advertido de que no todo el Ejército apoyaba la asonada y ha apelado al diálogo, pero la declaración de las Fuerzas armadas parecía inclinar la situación del lado de los golpistas.
Por su parte, los militares han pedido calma a la población, a la que han pedido abstenerse de realizar actos de vandalismo después de que cientos de personas se manifestaran ondeando banderas rusas y coreando consignas antifrancesas, para apoyar el golpe. En Niamey, han asaltado la sede del gobernante Partido Nigerino para la Democracia y el Socialismo y han incendiado algunos vehículos.
El golpe ha sido fuertemente condenado por todos los socios de Níger, sobre todo los occidentales, que han exigido la liberación inmediata de Bazou, retenido junto a su familia en la residencia oficial.
En cambio, Burkina Faso, vecino dirigido por un régimen fruto de dos golpes consecutivos en 2020, y más cercano a Rusia desde entonces, ha dicho desear una «cooperación más estrecha» entre ambos países a partir de ahora.
Rusia, que precisamente celebra en San Petersburgo la cumbre Rusia-África, también ha pedido diálogo y la «pronta liberación» del mandatario.
Níger es un socio privilegiado de París, que tiene allí 1.500 soldados e importantes intereses estratégicos. El grupo francés Orano (antes Areva), que explota las minas de uranio, ha asegurado que sigue la situación cada minuto y que en sus explotaciones se trabaja con normalidad.
Orano, especializada en el ciclo del combustible nuclear, explota desde hace 50 años dos minas de uranio en el norte de Níger. La seguridad, a cargo de guardias privados, se ha reforzado, en colaboración con las «fuerzas de seguridad interior», según la empresa, que ha activado una unidad de crisis.