Concejos y agricultores alzan la voz contra el despliegue de instalaciones solares en Araba
UAGA, juntas administrativas, ediles e integrantes de la comunidad de regantes de Noryeste han mostrado su rechazado a los planes de Solaria, que pretende erigir tres parques solares en Araba. Se trata de Vitoria Solar 1 y 2, con 200.000 paneles, y una tercera instalación en Erriberabeitia.
Integrantes de las juntas administrativas de Durana, Zurbano, Arrioabe, Uribarri-Ganboa, Arzubiaga y Uribarri-Arratzua, de los ayuntamientos de Arratzua-Ubarrundia y Erriberabeitia, así como de UAGA y la comunidad de regantes del Noryeste han mostrado este jueves su rechazo a las plantas solares previstas por la multinacional Solaria en Araba.
«Comparecemos ante los medios para denunciar la amenaza de colonización y saqueo indiscriminado que está sufriendo nuestro territorio y en particular las zonas rurales y su entorno natural», ha señalado la presidenta de UAGA, Edurne Basterra, que ha alertado de que «no es verdad que las centrales fotovoltaicas y eólicas proyectadas tengan por objeto descarbonizar la energía».
«Se trata de añadir estas nuevas fuentes a las que actualmente se consumen de origen fósil», ha apuntado, incidiendo en que «el desarrollo indiscriminado de estas centrales, tal como se plantea ahora mismo, agudiza el problema en la medida que se destruyen entornos naturales y tierras de cultivo».
Asimismo, ha rechazado que el despliegue de las citadas centrales se esté realizando «de forma ordenada», y ha señalado, en alusión al Plan Territorial de Energías Renovables, que «los nuevos criterios que se pretenden aprobar para agilizar y promover la implantación de macrocentrales se están amoldando a los intereses de las grandes energéticas».
«De esta manera se pierde la perspectiva que debe primar la ordenación territorial, que no es otro que garantizar un nivel de vida adecuado para la población y la conservación del ambiente, tanto para las actuales generaciones como para las del futuro», ha apuntado Basterra, que ha intervenido junto a Pedro Espinosa.
Ambos se han referido a las presiones ejercidas por Solaria sobre propietarios de terrenos y agricultores, aseverando «los pueblos de Araba nos encontramos abandonados ante un adversario que tiene infinidad de medios que no duda en poner en práctica, desde la compra de voluntades con enormes cantidades de dinero, como la amenaza y el chantaje a aquellos que se resisten».
Campaña de alegaciones
Ante esta situación, han anunciado una campaña de alegaciones que tiene por objeto paralizar Vitoria Solar 1 y Vitoria Solar 2, porque «suponen fraccionar el territorio y someter a esta enorme zona –de unas 1.100 hectáreas según agricultores y vecinos– a una presión que hace difícil la continuidad de la actividad agraria».
Y han mostrado su rechazo al proyecto previsto por Solaria en Erreiberabeitia, donde van a ocupar cien hectáreas. «Los aquí presentes apoyamos la decisión tomada por los concejos de Quintanilla de la Ribera y de Betolaza de no ceder sus terrenos comunales a Solaria. Mostramos nuestra solidaridad y apoyo a estos concejos, así como a cuantos se sumen en la defensa del territorio y contra la especulación y el saqueo de Araba».
A este respecto, han advertido de que «la obsesión por la rentabilidad económica del Departamento de Industria del Gobierno Vasco y en particular de Arantxa Tapia y el seguidismo y desidia del diputado general de Araba, Ramiro González, suponen la mayor amenaza territorial a la que se enfrenta Araba».
Han emplazado a las instituciones a plantear otras ubicaciones destinadas a la instalación de parques solares, proponiendo la ocupación de los terrenos del cuartel militar de Araka o la fallida balsa de riesgo de Noryeste. Esperan lograr parar los planes de la multinacional, como ha ocurrido en Erreniega.