Israel ultima una «nueva fase de la guerra» en Gaza tras expirar el ultimátum
Al vencer el ultimátum dado por Israel a los habitantes de Gaza para abandonar sus casas y dirigirse al sur de la Franja, continúa la caótica evacuación sin que en ningún momento hayan cesado los bombardeos. Israel insiste en que abandonen el norte porque «atacará con gran fuerza» zonas evacuadas.
El Ejército israelí ha anunciado este sábado que está ultimando una nueva «fase de la guerra» contra Hamas con el despliegue masivo de sus fuerzas en la frontera con la Franja de Gaza con vistas a un «ataque de gran fuerza» que alcanzará a zonas del enclave que están siendo escenario de la salida masiva de gazatíes.
«Estamos preparando nuestras fuerzas, estudiando los planes, y preparados en todos los escenarios de combate: sur, norte y centro», ha hecho saber el principal portavoz del Ejército israelí, el vicealmirante Daniel Hagari, ante una posible entrada en firme por tierra del Ejército israelí en la Franja de Gaza, la primera a gran escala desde 2008.
Hagari ha insistido a la población del norte de Gaza que abandone inmediatamente la zona porque «quien decida no evacuar se está poniendo en peligro a sí mismo y está poniendo en peligro a su familia» antes de ratificar que el Ejército israelí «atacará con gran fuerza las zonas evacuadas».
Cabe recordar que el Ejército israelí ha anunciado este sábado a la población del norte y del centro-norte de Gaza la apertura de dos corredores de salida hacia el sur del enclave que permanecerán en vigor de 10.00 a 16.00 –entre las 09.00 y las 17.00 en Euskal Herria–. Sin embargo, el Ejército israelí ya llevó a cabo las primeras incursiones localizadas en Gaza poco después de lanzar el ultimátum.
En su última evaluación de los desplazamientos, la UNRWA consta que 500.000 civiles se encuentran en sus refugios, de los cuales 375.000 se encuentran en edificios de UNRWA en el sur después de haber huido desde el norte, donde miles de personas (mujeres embarazadas, niños, ancianos y personas con discapacidad) no han podido huir.
No obstante, tampoco la evacuación es sinónimo de seguridad, ya que al menos 70 personas murieron cuando la aviación israelí atacó uno de los convoyes que huía. Este sábado, poco antes de vencer el ultimátum, un ataque aéreo contra una casa en el distrito de Yabalía, en la parte norte de Gaza, ha causado 20 muertos y más de 80 heridos, según informa la agencia palestina Wafa.
El ultimátum ha sido rechazado por Naciones Unidas y varias ONG internacionales que la consideran como un desplazamiento forzado que abocará a 1,1 millones de residentes de estas poblaciones a una catástrofe humanitaria y una violación del derecho Internacional humanitario.
La evacuación es imposible
Tres grandes centros médicos de la Franja de Gaza, el hospital de Al Awda, el centro infantil Kamal Adwan, y sobre todo uno de los más grandes del enclave, el hospital Al Quds, han anunciado que no tienen más remedio que desoír la orden de evacuación dada por Israel a los residentes del norte de la Franja de Gaza, donde se encuentran estos centros médicos, ante la imposibilidad de un traslado y para seguir atendiendo a los pacientes de los bombardeos israelíes.
El hospital Al Quds es un centro operado por la Media Luna Roja Palestina, que en un comunicado publicado este sábado ha avisado que ahora mismo hay cientos de civiles que están refugiados en este hospital de Ciudad de Gaza, entre ellos «numerosos heridos con casos críticos», así como «niños en incubadoras».
«Por ello, Media Luna Roja no puede evacuar el hospital, y su mandato humanitario obliga a sus empleados a seguir atendiendo a los heridos». Así pues,«seguirán proporcionando tratamiento esencial a los residentes que hayan decidido quedarse», avisa Media Luna Roja.
Por su parte, el responsable del hospital del Al Awda, Ahmed Muhanna, ha hecho saber a la agencia oficial de noticias palestina Wafa que el personal médico del hospital, compuesto por 35 médicos y enfermeras, se enfrenta a «condiciones catastróficas debido al rápido aumento del número de muertos y heridos».
La negativa de ambos centros ha sido confirmada por la organización médica israelí Médicos por los Derechos Humanos, cuyos responsables han recordado de que el hospital de Kamal Adwan es un centro de atención infantil en Beit Lahiya, a pocos kilómetros de Jabaliya, donde ahora mismo hay 150 pacientes, entre niños y mujeres embarazadas.
Situación de «vida o muerte»
La agencia de Naciones Unidas para los refugiados palestinos, la UNRWA, ha avisado este sábado que los más de dos millones de habitantes de la Franja de Gaza se encuentran en una situación de «vida o muerte» por la falta de agua en el enclave, escenario desde hace una semana de un contraataque israelí en respuesta a la ofensiva del pasado sábado lanzada por Hamás.
La agencia recuerda que hace una semana que Israel no permite la entrada de suministros humanitarios en Gaza, donde la planta de agua y sus redes de distribución han dejado de funcionar, por lo que la población se ve obligada a utilizar agua sucia de pozos, con el consiguiente riesgo de enfermedades transmitidas por el agua. Gaza también sufre un apagón eléctrico desde el 11 de octubre, que también afecta al suministro de agua.
Como otras agencias de la ONU, la UNRWA ha trasladado sus operaciones al sur de Gaza ante la amenaza de Israel a los habitantes del norte del enclave (la mitad de la población total) pero allí el agua potable «también se está agotando», avisa el jefe humanitario.
Hamás dice que otros nueve rehenes han muerto en bombardeos
Las Brigadas al Qasam, brazo armado del grupo islamista palestino Hamás, han anunciado este sábado que otros nueve rehenes han muerto durante las últimas 24 horas por los intensos bombardeos israelíes sobre la Franja de Gaza.
Al Qasam ha asegurado en un comunicado que nueve cautivos han muerto por los ataques «a los lugares donde se hallaban presos», y ha detallado que entre los fallecidos hay cuatro extranjeros, sin concretar su nacionalidad.
Hamás anunció este viernes la muerte en los bombardeos de 13 cautivos, así como de cuatro rehenes más el pasado lunes, por lo que las cifras de secuestrados muertos, confirmados por el grupo, en la ofensiva de Israel sobre Gaza serían 26.
El líder político de Hamás, Ismaeil Haniye, exiliado desde hace años en Qatar, ha enviado una carta al secretario general de la ONU, Antonio Guterres, en la que denuncia que los ataques del Ejército israelí en el marco de la guerra con las milicias de Gaza «equivale a crímenes de guerra».
Israel bombardea Líbano
El Ejército israelí ha bombardeado este sábado en Líbano en respuesta al lanzamiento, poco antes, de varios proyectiles desde ese país, en un nuevo intercambio de fuego en la frontera.
Este incidente marca el séptimo día consecutivo de hostilidades en la frontera entre ambos países, en paralelo con la guerra entre Israel y las milicias de Gaza desatada el pasado sábado.
Esta mañana, el Ejército israelí ha señalado que sus tropas identificaron a «una célula terrorista que intentaba infiltrarse desde Líbano», ante lo que han abierto fuego mediante un dron, y han matado «a cierto número de terroristas».
Sin embargo, ninguna milicia en Líbano ha reivindicado el presunto intento de infiltración ni ha ofrecido información sobre los fallecidos.
Este tipo de episodios se han intensificado en los últimos días, incluyendo un intercambio de fuego ayer, viernes, en el que un camarógrafo de Reuters falleció y otros seis periodistas resultaron heridos tras los ataques de Israel con proyectiles y mediante tanques al Líbano.
Líbano denuncia muerte del periodista ante la ONU
Precisamente, el Gobierno del Líbano ha anunciado que presentará una queja formal contra Israel ante el Consejo de Seguridad de la ONU por el «asesinato deliberado» del camarógrafo de la agencia Reuters Issam Abdalá, alcanzado por el mencionado proyectil mientras trabajaba en las áreas fronterizas.
Al menos 11 periodistas han muerto, 2 han resultado heridos y otros 2 están desaparecidos en la Franja de Gaza e Israel, según una organización de defensa de los profesionales de la información.
Este mismo sábado, un grupo de periodistas de la BBC que cubrían el ataque a Israel han sido agredidos y retenidos a punta de pistola después de que la Policía los detuviera en la ciudad israelí de Tel Aviv.
Frustración en el mundo árabe por el «silencio» de Occidente
Ante el ultimátum de Israel para forzar el éxodo de más de 1,1 millones de personas del norte de la Franja de Gaza y el «silencio» de Occidente, los países y organismos árabes en Oriente Medio han mostrado su frustración y amargura por la casi inexistente condena internacional a los «crímenes de guerra» que está sufriendo la población palestina.
«Grave violación del derecho internacional» y «crimen de guerra». Estos han sido los conceptos más repetidos durante la jornada de hoy por la Liga Árabe, Egipto, Arabia Saudí, Catar, Jordania y la Organización de la Cooperación Islámica, entre otros, que han alzado la voz para que el sufrimiento de los palestinos no sea ignorado.
Ya se lo advirtió ayer el líder de la Liga Árabe, Ahmed Abulgueit, a Josep Borrell, el jefe de la diplomacia de la Unión Europea: «Es importante que Europa preste atención a la verdad y se ajuste a los principios de los que habla», algo que también trasladó a Naciones Unidas.