Dos cazas de Estados Unidos sobrevuelan Banja Luka contra la fiesta nacional proserbia
Las tensiones en Bosnia han aumentado este lunes con la celebración en la República Srpska de su día nacional, que se conmemora el 9 de enero, hasta tal punto que dos cazas estadounidenses han sobrevolado su capital, Banja Luka, como advertencia a las autoridades proserbias.
Dos cazas de combate F-16 estadounidenses sobrevolarán este lunes Bosnia-Herzegovina para advertir que Estados Unidos no tolerará intentos de secesión en el Estado balcánico, según ha comunicado este lunes la embajada de ese país en Sarajevo.
«Estados Unidos ha destacado que la Constitución de Bosnia-Herzegovina no prevé ningún derecho de secesión y actuará si alguien intenta cambiar este elemento básico del Acuerdo de paz de Dayton», ha advertido la embajada en un comunicado difundido en su página web.
Esta advertencia y el sobrevuelo de los cazas, que tendrán lugar por la tarde, coinciden con el inicio de una celebración de dos días en la República Srpska del día nacional, el 9 de enero, considerada ilegal por Bosnia-Herzegovina, y tras proclamas independentistas por parte de sus autoridades.
La embajada ha destacado también que los ejercicios de los cazas forman parte de un entrenamiento bilateral con el Ejército bosnio y representa parte de la cooperación militar entre los dos países que «contribuye a la paz y la seguridad» en los Balcanes occidentales. «También demuestra el compromiso de los Estados Unidos de garantizar la integridad territorial de Bosnia-Herzegovina frente a la actividad secesionista y anti-Dayton», ha subrayado.
El líder serbobosnio, Milorad Dodik, calificó la semana pasada al embajador de Estados Unidos, Michael Murphy, de «psicópata» al recalcar éste el apoyo de su país a la integridad territorial bosnia.
La República Srpska es, según el acuerdo de paz de Dayton que puso fin a la guerra bosnia (1992-1995), uno de los dos entes que, junto a la Federación, componen Bosnia-Herzegovina. La misión de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) en Bosnia ha vuelto a advertir en los últimos días que la celebración de ese día nacional es «discriminatoria y anticonstitucional», por lo que representa un acto penal.
Los serbobosnios celebran esta fiesta desde hace años a pesar de las condenas, pero este año existe tensión especial debido a nuevas declaraciones secesionistas del presidente de la República Srpska, Milorad Dodik. El Alto representante internacional para Bosnia, Christian Schmidt, ha llamado a la Fiscalía estatal bosnia a reaccionar si la fiesta llega a celebrarse oficialmente. Dodik ha advertido de proclamar en tal caso a la Fiscalía central bosnia incompetente en el territorio de la República Srpska, lo que, según Sarajevo, representaría una secesión «de jure».
El Tribunal Constitucional prohibió en 2015 por primera vez ese festivo, por considerar que la fecha de 9 de enero es «discriminatoria, adoptada en contra de la voluntad» de los bosnio-musulmanes y bosnio-croatas de la RS.
Serbia ha apoyado de forma clara la celebración y anunció su participación. «El 9 de enero, día en que fue creada la República Srpska, es uno de los días más importantes en la historia reciente del pueblo serbio», comentó este domingo el ministro de Exteriores serbio, Ivica Dacic, y evaluó que su celebración es más importante que nunca hoy, «cuando desde fuera quieren romper nuestra unidad».