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Luis Enrique reservó a Mbappe ante el Lille, pero espera que esté al 100% ante la Real

El entrenador asturiano destacó tras la victoria del sábado del PSG que su estrella descansó para recuperar su tobillo tocado, pero confirmó su presencia el miércoles en la Champions. Dejó hasta siete titulares en el banquillo. Eso no impidió el triunfo ante uno de los mejores equipos de la Ligue 1.

Mbappe y Marquinhos, en un banquillo en el partido del sábado con siete titulares. (Alain JOCARD/AFP)

El entrenador del PSG, Luis Enrique, explicó tras la victoria del sábado contra el Lille (3-1) que no alineó a su mejor jugador, Kylian Mbappe, tocado en un tobillo tras recibir el miércoles una dura entrada de un defensor del Brest en la Copa, pese a estar «bien físicamente. No hemos querido asumir riesgos. Si hubiera sido una final, habría jugado. El miércoles estará al 100% sin ninguna duda ante la Real».

El técnico asturiano confirmó que también reservó a Marquinhos tras recibir otro golpe ante el Brest porque tampoco quiso asumir riesgos con él. No fueron los dos únicos titulares que descansaron. El portero Donnarumma, Hakimi, Zaïre Emery, Vitinha y Barcola también se quedaron en el banquillo, aunque los cuatro jugadores de campo salieron en la última media hora de partido para asegurar la victoria en lugar de dos de los tres titulares habituales que jugaron de inicio, Lucas Hernández y Dembelé. Solo Ugarte completó el partido y el undécimo entre los más utilizados, Milan Skriniar, está de baja tras ser operado de una lesión de tobillo que le impedirá jugar contra la Real.

Luis Enrique alineó ante el Lille a Keylor Navas; Mukiele, Danilo Pereira, Lucas Hernández (Hakimi, m. 71), Beraldo; Ugarte; Dembele (Barcola, m. 62), Fabián Ruiz (Vitinha, m. 62), Asensio, Kolo Muani; Gonçalo Ramos (Zaire-Emery, m. 74). El Lille se adelantó en el minuto 6 con un gol de Yacizi, pero el PSG remontó con autoridad con tantos de Gonçalo Ramos (m. 10), Alexsandro, en propia puerta (m. 17) y Kolo Muani (m. 79).

El equipo parisino domina de tal manera la liga francesa, con quince victorias, cinco empates y una sola derrota el 15 de septiembre ante el Niza (2-3), segundo clasificado, que puede ganar con los suplentes a un Lille que estaba cuarto a doce puntos y ha jugado Champions League. Empezaba la jornada con ocho puntos de ventaja sobre el Niza y eso le da tranquilidad para priorizar la Champions estas semanas.

«Mucha tensión con la Champions»

Luis Enrique señaló tras el partido que «veo mucha tensión con la Liga de Campeones. Y no se trata de tener tensión, sino de disputar los partidos con competitividad y de aprovechar la competición. Hace dos semanas que no se habla más que de la Champions en la televisión y hay que tener calma. Relax. El equipo va a estar perfecto y lo vamos a aprovechar».

El entrenador asturiano añadió que el partido contra el Lille fue «muy completo, muy parecido al del Brest de Copa y que nos prepara para lo que nos espera contra la Real. Nos ha permitido preparar el partido».

No quiso dar pistas sobre el once que presentará el miércoles: «Lo decidiré el día del partido tras el último entrenamiento. Quiero verlos y elegir en ese momento. Ahora no sé quién jugará contra la Real». Se espera que Luis Enrique presente su mejor equipo formado por Donnaruma; Hakimi, Marquinhos, Danilo, Lucas Hernández; Ugarte, Zaïre Emery, Vitinha; Dembelé, Mbappe y Barcola.

Luis Enrique ha dado un mayor rigor al equipo con su llegada a un equipo que además agradece la pérdida de Messi o Neymar en defensa. Lo destacaba tras el encuentro el técnico del Lille, Paulo Fonseca, que señalaba que «el PSG es más fuerte porque colectivamente son más fuertes. Todos los jugadores trabajan en defensa y todo el mérito es de Luis Enrique».

Un equipo en el mejor momento

El PSG recibirá a la Real en su mejor momento. La era Luis Enrique comenzó con solo dos victorias, dos empates y una derrota en cinco jornadas de Liga y dos derrotas en los cuatro primeros partidos de la Champions, pero está invicto desde que perdió contra el Milan el 7 de noviembre (2-1).

Desde entonces lleva dieciséis encuentros oficiales sin perder con dos empates en la Champions que le bastaron para acabar segundo del grupo de la muerte. En la Liga ha sumado doce victorias y dos empates en las últimas catorce jornadas de Liga con 37 goles a favor y doce en contra, tres triunfos en la Copa con 16 goles a favor y dos en contra y una victoria en la Supercopa ante el Toulouse (2-0).

Una trayectoria, una capacidad goleadora y una suficiencia en la Ligue 1 que contrasta con la racha de la Real de cuatro partidos sin marcar y una victoria y solo tres tantos en las últimas ocho jornadas de Liga que le han dejado fuera de posiciones europeas por vez primera desde septiembre.

La Real se entrenará este lunes en Zubieta a puerta cerrada y el martes en el escenario del partido del miércoles a las 21.00 con el objetivo de recuperar al menos a Mikel Oyarzabal. Imanol dijo el sábado tras la derrota ante Osasuna que «es complicado. Hoy ha salido al campo y sus sensaciones no han sido buenas. Mejora día a día, queda mucho o poco para el partido, según cómo evolucione, pero es importante que esté con el equipo. A poco que pueda viajar viajará porque, incluso aunque no pueda jugar, es importante que esté Mikel por lo que aporta».