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Noche mágica en Anoeta: del abrazo entre Arroyo y Eizagirre al «tú sí que eres buena» de Amaiur

Los goles de Franssi y Jensen fueron determinantes para derrotar a un Atlético que, pese a la insistencia final, no pudo levantar el cerrojo txuri-urdin y la Real disputará su segunda final de Copa. Antes de empezar el partido, las jugadoras se emocionaron con los mensajes de sus familiares.

Las jugadoras de la Real celebran el pase a la final de Copa. (Jon URBE | FOKU)

«Representa un poco lo que somos, que somos como una familia; espero que os guste y nos ayudar a ganar el partido de hoy». Fue Iris Arnaiz, que está temporada ha sido relegada al segundo plano, quien tomó la palabra en el vestuario, pocas horas antes de comenzar el partido de vuelta de las semifinales de Copa.

Era un vídeo que recopilaba mensajes de los familiares ante los cuales las jugadoras no pudieron evitar emocionarse. Estaban a un paso de conseguir un hito, de lograr el pase a la final cinco años después de disputar y ganar la primera final de Copa, en una temporada que, en el plano general, está siendo agridulce pero que con la guinda de ayer, la valoración final tendrá más de dulce que de agria.

El apoyo de los familiares y las lágrimas de emoción de las jugadoras fue el primer fuelle para encarar el duelo de altura frente al Atlético. Anoeta, con 15.265 espectadores, fue el segundo, con una sinergia total con el equipo, totalmente enchufados en el partido, llevando en volandas a las jugadoras y botando en las gradas gracias a la efectividad nórdica.

Anoeta fue la jugadora número 12 que la Real necesitó cuando le tocó sufrir el arreón del Atlético, con un 2-1 en el marcador, a pocos minutos del final del partido. En cuanto la árbitra Marta Huertas de Aza pitó el final del partido, estalló el júbilo en el estadio, con abrazos representativos: como el de Arroyo y Eizagirre, entrenadora y capitana del equipo, nada más terminar el partido; con varias jugadoras abrazando a Jensen, que se echó al suelo muy emocionada; el corro de todo el equipo, con Txurdin incluido, cantando el himno de la Real junto al público; el sentido abrazo que le da Arroyo primero a Aparicio, una de las grandes apariciones de esta temporada, y después a Cecilia...

Las jugadoras tomaron su tiempo para disfrutar del hito, agradeciendo el apoyo de la gente, disfrutando del triunfo en equipo, en familia, tal y como afirmó Arnaiz en el discurso previo.

Andreia Jacinto, la joven portuguesa que se ha hecho con el centro del campo de la Real, optó por grabar con su movil la noche mágica que estaba viviendo en Anoeta. «Amaiur, qué buena eres», de la lusa, la réplica de la donostiarra «tú sí que eres buena»; el «feliz» y el «Oh my god» de Jensen, que no se lo podía creer; el «vamos» de Franssi, que protagonizó otra actuación soberbia, y de Vanegas, pilar de la defensa, Mirari Uria en volandas... La noche se alargó en Anoeta y la afición txuri-urdin tendrá su final deseada, aunque poco se podrá hacer si hoy no ocurre una ecatombe en la semifinal entre el todopoderoso Barça y el Athletic (0-3 a favor de las culés en la ida).