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Prisión para cinco de los detenidos por el tiroteo de Barakaldo que causó un muerto

Cinco de las siete personas detenidas el pasado domingo por su presunta implicación en el tiroteo entre clanes familiares que causó la muerte a un hombre y heridas a otras dos personas en Barakaldo han ingresado en prisión.

La Ertzaintza ha puesto a disposición judicial a las personas detenidas por el tiroteo mortal de Barakaldo. (Arnaitz RUBIO | EUROPA PRESS)

El titular del juzgado de Barakaldo que ha tomado declaración a seis de los siete detenidos por su presunta implicación en el tiroteo entre clanes familiares en el barrio de Burtzeña de esa localidad, que causó la muerte a un hombre y heridas a otras dos personas, ha dictado el ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza para cinco de los arrestados –tres hombres y dos mujeres–, por la presunta comisión de un delito de asesinato y dos delitos de asesinato en grado de tentativa.

Además de ellos, la Ertzaintza ha puesto a disposición judicial a otra persona detenida por estos hechos, que ha quedado en libertad provisional sin fianza, pero con la obligación de comparecer ante el juzgado de forma periódica y cuantas veces sea llamado, según ha informado el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV)

El juzgado ha impuesto también a los seis medidas cautelares de prohibición de aproximación a menos de 500 metros y de comunicación con los dos heridos por arma de fuego.

El séptimo de los arrestado con relación a este caso permanece ingresado en un centro hospitalario, en calidad de detenido, y todavía no ha sido puesto a disposición del juzgado.

Los hechos se produjeron sobre las 16.20 horas del pasado domingo, cuando se enfrentaron a tiros dos familias residentes en la misma calle de Burtzeña que, según varios vecinos, ya habían mantenido riñas anteriores.

Los disparos acabaron con la vida de un hombre de unos 50 años y otras dos personas fueron alcanzadas por los disparos y permanecen ingresadas en el Hospital de Cruces.

La Ertzaintza localizó diversas armas de fuego en los registros practicados en las viviendas de los detenidos (cinco escopetas, una pistola, un revólver y munición de diferentes calibre), así como navajas, machetes y otras armas blancas manipuladas.