El Parlamento gallego reconocerá a Castelao como primer presidente de Galiza

El Parlamento gallego reconocerá este viernes a Castelao como el primer presidente de Galiza. El considerado como padre del nacionalismo gallego presidió el Consello da Galiza, un Gobierno en el exilio constituido en Uruguay en 1944.

El Parlamento gallego reconocerá este viernes a Alfonso Daniel Rodríguez Castelao, considerado como el padre del nacionalismo gallego, como primer presidente de Galiza. En concreto, se reconoce su labor como primer presidente del Consello da Galiza, el Gobierno gallego en el exilio que se organizó a semejanza del Gobierno Vasco del lehendakari José Antonio Agirre y que reclamaba la legitimidad del Estatuto de Autonomía que fue votado en referéndum en 1936, pero que truncó el golpe de Estado franquista.

Castelao emigró a Argentina con 9 años para regresar posteriormente a Galiza. En 1916 ingresa en las Irmandades da Fala, una organización nacionalista, y colabora asiduamente en su órgano de expresión, ‘A Nosa Terra’, un referente en la vida cultural y política gallega. En esta revista publica sus primeros relatos breves en 1919.

En 1920, nace la revista ‘Nós’, otro de los referentes del periodismo en Galiza, y Castelao es nombrado director artístico de la publicación.

Castelao fue el primer presidente de esta institución hasta que tras su muerte en 1950 en el exilio bonaerense fue sustituido por Antón Alonso.

La iniciativa de este reconocimiento partió del Partido Galeguista (PG) con el apoyo de entidades y asociaciones de la emigración y el exilio gallegos como la Federación de Entidades Galegas de Argentina o el Centro Galicia de Buenos Aires, así como de la Fundación Rosalía de Castro. Esta petición fue trasladada a los grupos parlamentarios (PP, BNG, PSOE y Mixto-Democracia Ourensana) que le dieron el visto bueno.

El editor e investigador Antón Mascato destaca, en declaraciones a ‘Nós Diario’, que el reconocimiento a Castelao es «un paso fundamental». En primer lugar, subraya la importancia de que se reconocer a Castelao como primer presidente de Galiza. Junto a ello, añade que se reconoce al Consello de Galiza y a la legalidad republicana. Todo ello, en definitiva, es un reconocimiento al nacionalismo gallego anterior a la guerra de 1936 y al exilio.

«En Castelao cabemos todos, solo necesitamos ser gallegas y gallegos. Es la cartografía que nos guía para no perdernos», señala José María Vila Alén, miembro del Consejo de Administración de la delegación argentina de la Fundación Galicia América y uno de los impulsores del manifiesto que está en el origen del reconocimiento por parte del Parlamento gallego.

Padre del nacionalismo gallego

Alfonso Daniel Rodríguez Castelao, nacido en Rianxo en 1886 y muerto en el exilio bonaerense en 1950, está considerado como el padre del nacionalismo gallego. Personalidad poliédrica, desarrolló tareas de narrador, ensayista, dramaturgo y dibujante, además de dedicarse a la política y a la medicina, que abandonó «por amor a la humanidad».

Tras sus primeras publicaciones e ‘A Nosa Terra’, en 1920, nace ‘Nós’, otro referente del periodismo gallego de la época, y Castelao es nombrado director artístico de la publicación.

Tras la caída de la dictadura de Miguel Primo de Rivera, en 1930 se produce un auge del nacionalismo gallego. En 1931, Castelao es elegido diputado independiente por Pontevedra en las Cortes Constituyentes de la Segunda República española. Se integra en el grupo formado por la Federación República Gallega-Organización Republicana Gallega Autónoma (FRG-ORGA). Posteriormente, este grupo se escindió, naciendo el Partido Galeguista (PG), abiertamente nacionalista, en el que se integran las Irmandades da Fala y el propio Castelao.

Tras la aprobación de la Constitución republicana de 1931, el nacionalismo gallego reclama un Estatuto de Autonomía. La reivindicación fue frenada por el centralismo republicano hasta junio de 1936, cuando se celebra un referéndum. Sin embargo, el proceso se trunca con el golpe de Estado fascista de un mes después.

En 1933, Castelao participa en la formación de la alianza con nacionalistas vascos y catalanes. En abril, participó en un mitin en Gernika organizado por ANV y al que también acudió ERC. Ese mismo año, diseña la escenografía de la obra de Ramón María del Valle-Inclán ‘Divinas palabras’. En las elecciones de ese año, no salió elegido diputado.

Tras la Revolución de 1934, la oleada represiva lleva al cierre de sedes del Partido Galeguista y a la suspensión de ‘A Nosa Tierra’. Castelao es desterrado a Badajoz hasta septiembre de 1935.

En 1936, el Partido Galeguista se integra en el Frente Popular y Castelao vuelve a ser elegido diputado. Desde ese puesto, impulsa la campaña por el Estatuto de Autonomía.

Tras el golpe de Estado franquista, en Madrid organiza unas milicias gallegas junto con el PCE. Posteriormente, marcha a Barcelona y a València. Ya nunca regresará a Galiza.

En la primavera de 1938 viaja a la URSS dentro de una comisión cultural de la República española. En verano, participa en actividades republicanas en EEUU y Cuba, llegando a Argentina en 1940, donde se exilia. En 1941 estrena en la capital argentina la obra de teatro ‘Os vellos non deben de namorarse’ y en 1944 publica su libro más referencial, ‘Sempre en Galiza’. Ese mismo año se constituye el Consello de Galiza. Previamente, en 1941, un impulsa el acuerdo de Galeusca con nacionalistas vascos y catalanes.

Dibujante

Una de las facetas más destacadas de Castelao es la de dibujante, en la que como tal desarrolló una línea muy personal. Sus dibujos denuncian el caciquismo que golpea a la Galiza rural. Sus personajes más habituales son los desheredados, campesinos y marineros, que muestran su sufrimiento. Todo ello, con un punto de humor negro. Pura esencia gallega.