Un inversor europeo de transformación de empresas, muy interesado en reflotar Sunsundegui
Una firma de inversión y transformación de empresas de origen europeo ha visitado a lo largo de este jueves y viernes las instalaciones de Sunsundegui en Altsasu, mostrando un especial interés por ser quien pueda reflotar la empresa carrocera de autobuses.
Según ha podido saber NAIZ, una firma de inversión y transformación de empresas que trabaja en el ámbito europeo y que dispone de una oficina en Madrid estaría muy interesada en hacerse con Sunsundegui.
De hecho, representantes de dicha empresa, con una trayectoria de tres décadas a sus espaldas, ya han estado visitando la fábrica ubicada en Altsasu a lo largo de este jueves y viernes, para conocer de primera mano sus instalaciones y entablar los primeros contactos con la dirección.
Se trata de la última posibilidad conocida para reflotar Sunsundegui, después de que el consejero de que el Consejero de Industria del Ejecutivo foral, Mikel Irujo, asegurase en una comisión parlamentaria que se habían barajado hasta una decena de inversores interesados.
Antes de la aparición de la firma europea, también se especuló con la posibilidad de que ISN, cuya cabeza visible es el navarro Fermín Elizande, se hiciese con Sunsundegui, pero las negociaciones no terminaron de prosperar.
La visita de los representantes de esta firma europea coincide en el tiempo con el anuncio de quién será el administrador que gestione el concurso de acreedores, Molins Andrés Abogados, un bufete afincado en Iruñea desde hace 17 años.
Dicho concurso de acreedores permite que durante su proceso se puedan recibir ofertas de posibles inversores que vean una oportunidad de negocio de una empresa que ha llegado a su actual situación por la mala gestión, ya que sí que dispone de mercado, como lo dejaron claro en su momento los trabajadores.
En la planta de Sunsundegui de Altsasu trabajan actualmente 367 personas, aunque se llegó a asegurar que podrían llegar a crearse 800 puestos de trabajo. El hecho de que se haya pasado de hablar de una ampliación de esas característica al concurso de acreedores ha sido duramente criticado por el comité de empresa.
En concreto, ha señalado que «ni la plantilla ni nadie en esta zona entendemos que en pocos meses hayamos pasado de poder crear 800 puestos de trabajo al riesgo de perderlo todo, como ejemplo el cierre de Azkenga en Etxarri y Olazti, como asimismo el mal momento que están atravesando el resto de proveedores. Sufrimos retrasos en el pago de nuestras nóminas. La plantilla ha realizado numerosos esfuerzos en sus condiciones de trabajo durante los últimos años», han lamentado.
Una empresa «con mercado»
A pesar de ello, desde los sindicatos se considera que Sunsundegui puede tener una «oportunidad», porque creen que «es una empresa con mercado, siendo estratégica para Alsasua, nuestra comarca y para toda Navarra. En unos tiempos además, donde la movilidad va a sufrir numerosos cambios».
Precisamente esas circunstancias han hecho que desde las instituciones se haya apostado por la continuidad de esta empresa, como recordó el consejero Irujo en la citada comparecencia parlamentaria.
Así, el Gobierno de Nafarroa, a través de Sodena, concedió dos préstamos a Sunsundegui tras obtener el visto bueno del Parlamento navarro. El primero, por un importe de tres millones, se concedió en diciembre de 2023 y el segundo, por seis millones, estaba sujeto a dos condiciones: un nuevo Consejo de Administración y un acuerdo con los entes financieros que habían concedido previamente varios préstamos. Una vez cumplidas esas condiciones, se produjo la concesión de ese segundo préstamo.
Sin embargo, esas inyecciones económicas no han sido suficientes para revertir la complicada situación de la empresa, de tal manera que tiene «un elevado endeudamiento de 48 millones de euros», indicó Irujo, y «la compañía se encuentra en causa de disolución por la acumulación de pérdidas», tal y como se recoge en un informe elaborado por la consultora KPMG.
Pero el consejero se mostró dispuesto a pelear «hasta el final para conseguir un socio para asegurar los puestos de trabajo de las 400 personas que integran la plantilla y su parque de proveedores», que supondrían otros 200 empleos indirectos en la zona.
Por el momento, hay que esperar para comprobar si el socio que se buscaba con urgencia puede ser ese inversor europeo de transformación de empresas.