Andoni Amonarraiz, en tu última “Desde la simple lógica” publicada el día 6 y 8 en la prensa de Gipuzkoa, una vez más (¿cuantas van?) tengo que desmentirte cuando dices: «se obtienen, como mínimo los mismos resultados que con su puerta a puerta…» como al alcalde Astigarraga y calló. Tu Andoni ¿querrás contestar o aceptar un debate público en Biteri… o también callarás?

Sabes que estamos por debajo de la media de la UE15 en reciclaje y muy por debajo en compostaje. Sabes que en 2015 el binomio reciclaje-vertedero fue 42-58 y que según el Sr. Asensio, pasado el primer semestre de 2016 ya hemos alcanzado el 51%-49%, pero como nos dicen desde Bruselas: cada institución barre para su casa… hay que unificar las metodologías de cálculo.

Sospechas que a otros nos consta que el binomio real de 2016, teniendo en cuenta los datos de San Markos y rechazo de las plantas de reciclaje, estaría mas cerca del 42%-58% de 2015, máxime teniendo en cuenta el incremento de toneladas de errefusa al haber vuelto algunos pueblos a sistemas de depósito voluntario y recogida con contenedor abierto las 24 horas todos los días.

La que quizás no sabes es que, para evitar una mala o fraudulenta utilización de fondos europeos y principalmente por iniciativa del gobierno belga, el embajador español ante la UE ha recibido el anuncio de que van a revisar las primas a la generación de electricidad en plantas incineradoras, cuestionando los nuevos proyectos en particular en lo relativo a eficiencia energética y caracterización de materiales aprovechables que entran en las plantas de TMB y luego se eliminan por combustión: «nuevas instalaciones que no deben ir en detrimento de la recogida selectiva……» blanco y en botella.

Una normativa que exigirá a todos los países con carácter vinculante implantar sistemas de separación y recogida eficientes para progresar hacia objetivos mas ambiciosos que los que se dan hoy en el binomio aprovechamiento-eliminación: desde el 70%-30% de Austria, al 3%-97% de Rumanía y el 43%-57% medio EU28. ¿¿¿En Gipuzkoa??? Forma parte del debate pendiente.

Lo que reclama la UE de inmediato es unificar una metodología de cálculo de datos, para que nadie «trampee» el objetivo vinculante del binomio 50-50 para 2020 y 70-30 para 2030, y así evitar desfases entre datos institucionales y reales como se pudiera estar dando en Gipuzkoa.

No es justo que el diputado alardee de que en 2016 hemos alcanzado el objetivo de 2020 y a la vez silencie cuando no ningunee mediáticamente a esos pocos pueblos que están a la cabeza europea al alcanzar un binomio medio real 75%-25% desde hace años y que son los que hacen posible alcanzar esa cuestionable media que nos anuncia el Sr. Asensio, siendo que poblaciones importantes como Donostia, Irun, Eibar… están mas cerca del 35%-65%.