Está claro que la empresa Euskaltel actualmente es privada, pero durante su creación, promoción y asentamiento en el mercado mundial, recibió la ayuda de nuestras entidades públicas (o sea, la ayuda de todos nosotros), de las cuales se han beneficiado particularmente los socios iniciales y, ahora, Kutxabank (BBK,S.A.) y el fondo inglés Zegona y la Corporación Financiera Alba (grupo Banca March)…

Cuando se otorgan esas ayudas, lógicamente el perceptor (en este caso, Euskaltel) se compromete a una serie de cláusulas y compromisos que le atan con la entidad benefactora, y que, si no las cumple, debe devolver con creces todo lo recibido.

Y ahora la pregunta latente es ¿ha escuchado alguien a la consejera Tapia o a los responsables adecuados, reclamar y exigir esa devolución y el cumplimiento de las cláusulas comprometidas?

Y la consejera Tapia tiene la «candidez o desfachatez» de decir que las empresas vascas resultan atractivas a los extranjeros… ¡pues claro!
Pero no se entera de que eso, entre otras razones que tienen que ver con las buenas ideas y estrategias de sus propietarios y trabajadores, se ha visto enormemente favorecido por las ayudas y subvenciones del Gobierno Vasco y de otras instituciones oficiales (o sea, de nuestros bolsillos) lo cual, con toda lógica, repercute en su valoración en el mercado de las acciones en bolsa o mercados secundarios del valor de las empresas…

Y, si se venden ahora sus acciones, en todo o en parte, ¿quiénes son los que se benefician de ese incremento de su valor o plusvalia?

¡Je!¡je!... ¡que se lo pregunten a ese “bendito” incompetente que es Javier Iturbe!... Personaje que ya se benefició pornográficamente en «la operación» Kutxabank, cuando era su vicepresidente, y que ahora con la venta de acciones de Euskaltel ha participado en el reparto de 29 millones de euros con otros directivos y Kutxabank, a su vez, se ha beneficiado de otros 390 millones, (así como otras sociedades mafiosas como el fondo británico Zwgona que se embolsará 421 millones de euros, y la Corporación Financiera Alba, sociedad de inversiones de la Banca March, otros 216 millones).

Tal como ha ocurrido en muchos casos con anterioridad, desde luego queda claro que, si la Consejera Tapia ha hecho todo lo que está en su mano en pro de las empresas vascas, ha demostrado que es capaz de muy poquito, y, nunca lo es, pero es que en un cargo como el que tiene no podemos admitir la mediocridad…

Además de este caso de Euskaltel, la consejera Tapia nos debe la explicación a todos los vascos también de lo sucedido en años anteriores con otros muchos casos de empresas que pasaron por expolio parecido…

Resulta ridículo su silencio ante la manera como les han tomando el pelo todas esas multinacionales y fondos buitre que se han apropiado una participación mayoritaria en el capital de todas esas empresas que como Gamesa, Ikor, Kiro Robotics (Grifols), Grunal, Candy (antigua Lavadoras Otsein, después Mayc, SA), Sidenor, Ibermatica… Kutxabank… y tantas otras cuyo poder de decisión «voló» de Euskadi… y ahí tenemos ahora aún otras colgando como lo que está ocurriendo con varias empresas vascas del sector farmacéutico y otras… como el chandrío Ibil-Repsol con las electrilineras, Corrugados Azpeitia o la adquisición de la empresa vasca de limpieza Alfus Iris por el grupo suizo Ufenau.

Y la consejera Tapia (es que no da ni una en el clavo)… y Eusko Jaurlaritza… mutis por el foro… Resulta ridículo su silencio ante la manera como les están tomando el pelo todas esas multinacionales y fondos buitre a las que han «regalado» la propiedad de esas empresas exvasca… como buenos samaritanos.

Pero nada… los políticos del ramo siguen cobrando «su sueldazo» sin merecerlo… demostrando su mediocridad, o incompetencia, continuamente con todos esos casos… Solo está clara su adscripción política jeltzale (al menos aparente e interesadamente) y sin hacer intención o mención, ni «acordarse» siquiera de recuperar las ayudas y subvenciones públicas de las que esas empresas se beneficiaron en los ejercicios anteriores.